396 Capítulo 396 - Has estado mal

Después de que le cubrieron la herida y le hicieron una transfusión de sangre, Su Qianci estaba mucho mejor.

—Quiero verlo. ¿Podrías llevarme?

—No es conveniente.

—¿Que no es conveniente? —después de preguntar, pensó en algo y puso mala cara—. ¿En qué estás pensando? Él podría ser mi padre. No pasaría nada entre él y yo.

Al escuchar eso, Li Sicheng apretó su nariz y mencionó:

—¿Crees que soy tan mezquino?

—¿No lo eres?

—Escuché que su esposa acaba de llegar de la capital. Lleva medio mes en Kingstown, por lo que deben tener mucho de qué hablar.

—Oh... —expresó ella asintiendo—. Está bien; llévame a verlo mañana entonces.

Él asintió y se quitó el abrigo.

—Duerme un poco más.

—No estoy cansada —respondió ella y apartó su mano—. ¿Cuándo dormiste la última vez? Mira tus ojeras.

Ella le tocó la cara, sintiéndose preocupada.

—Acuéstate un rato. No estoy cansada.

—La cama es muy pequeña.