316 Capítulo 316 - Me voy a casa con él

Las mejillas de Su Qianci ardían mientras dejaba que la llevara al sofá. Agarró el hielo y la toalla de las manos de Li Sicheng, envolvió el hielo en la toalla, y se lo puso a Li Sicheng sobre la mano herida. La mano quedó atrapada por los suaves dedos de ella. Aunque los dedos eran fríos, el corazón de Li Sicheng era cálido. La miró con dulzura y susurró:

—He encontrado a Rong Rui.

Su Qianci se detuvo y lo miró con sorpresa.

—¿Rong Rui?

—Sí, él y Tang Mengying están planeando deshacerse del bebé y culparte a ti por ello. No te acerques a Tang Mengying por un tiempo.

Su Qianci se sorprendió ligeramente. Eso era, de hecho, lo que Tang Mengying haría. Pero, ¿cómo sabía él eso?

—¿Los has espiado?

A Li Sicheng no le gustó esa palabra. Frunció el ceño y le respondió:

—Para ser exactos, los escuché abiertamente.

Por desgracia, no había una grabación de eso. De haber sido así, habría sido suficiente para limpiar su nombre.