Capítulo 9 - Accidente del Archipiélago Sabaody

En el momento de que las cuatro personas terminaron de hablar con desdén del Gobierno Mundial, en medio del salón se abrió una grieta espacial de la nada. Sin embargo todos en el lugar no se sorprendieron ya que sabían quién abrió la grieta espacial.

Ya que de ella salió ni más ni menos que Jigen, el cuál al verlo los soldados del lugar le hicieron un saludo militar, y las cuatro personas lo saludaron de diferentes maneras, haciendo ver que su relación era de buenos amigos.

"Al parecer ya se fueron... ¿y entonces, que piensan del Gobierno Mundial y de la Marina?". Tras saludar a las cuatro personas, Jigen cerró el portal detrás de el, y de paso le hizo una pregunta a los cuatro acerca de la reunión anterior.

Estos por supuesto, tras oír la pregunta de Jigen fruncieron el ceño, no por que les desagradaba Jigen si no que recordaron a los Marines que se acaban de ir.

"Hmph, simplemente son unos perros que siguen las órdenes de sus amos". Y como no, el primero en hablar fue Gilgamesh el cuál expresó totalmente su despreció hacía las dos fuerzas en el Mar.

"Opinamos lo mismo, simplemente son perros de unas basuras... nada más". En el siguiente momento, Sakumo habló y lo hizo por Tobirama y Kakashi, los cuáles solo asintieron estando de acuerdo con las palabras de Sakumo.

"Jeje... no me extraña que ustedes los vean así, pero que más da... en fin, solo vine a decirles que luego de esto va a ver un tiempo de inactividad en el cuál espero que ustedes no solo se ocupen de temas administrativos si no que también tengan tiempo para entrenar". Tras burlarse un poco de la actitud de las cuatro personas, Jigen les habló seriamente a lo último.

"No tienes por que preocuparte, nosotros sabemos ciertamente eso así que no aflojamos nuestro entrenamiento". Al escuchar las palabras de Jigen, todos estuvieron de acuerdo, y el que habló por todos esta vez fue Kakashi.

"Bien ya que e dicho lo que tengo que decir los veré después, ya saben que pasa si me voy por mucho tiempo al lado de esas dos". En el momento de que Jigen se despidió, no olvidó decirle a los cuatro por que no se podía quedar.

Y estos al escuchar el motivo no dijeron mucho, ya sabían a que mujeres se referían, además también conocían el carácter de las dos así que no querían que por que Jigen se quedará ellos fueran víctimas de eso.

Claro Jigen solo dijo un motivo por el que se iba, el otro es por que va entrenar, si entrenar, ahora sabe que no es lo suficientemente fuerte, aunque tiene la capacidad de destruir un planeta con todas sus fuerzas para el no es suficiente.

Por ejemplo, hace mucho el le dijo a Kaito que peleara contra el para ver la diferencia de poder entre los dos, y claro el resultado fue obvió. Kaito solo lo golpeó con un solo dedo y casi lo mata, si no fuera por su resistencia ya no estaría vivo, bueno y por que el mismo Kaito se contuvo bastante incluso si solo le dió un golpe casual con el dedo.

En ese momento sabía que era débil, incluso se sintió mucho peor cuándo Kaito le dijo que incluso con el poder que tenía no sería capaz de ir a la dimensión de Lovecraft solo y derrotara todos los seres en ella, así que luego de organizar las cosas en el mundo Pirata decidió entrenar hasta que la trama comenzará.

Luego disfrutaría por algún tiempo la historia y finalmente conquistaría este mundo, ya que no quiere perder más tiempo y tiene la intención de ir a otros mundos e incluso tiene planeado ir con Kaito a entrenar si es necesario, ya que no quiere ser un cordero para se sacrificado en la guerra que se avecina.

Así luego de despedirse de las cuatro personas Jigen comenzó su entrenamiento, el cuál duro por mucho, mucho tiempo.

•••

Nueve años después, Archipiélago de Sabaody....

En una casa de subasta...

"Luffy, por favor no hagas nada... me lo prometiste, incluso si alguien muere ante ti por culpa de un Tenryuubito no harías nada, así que por favor... no hagas nada". Mientras el Gyojin Hachi antiguo subordinado de Arlong se desangraba, entre lágrimas le suplicaba a Luffy que no atacara al Tenryuubito delante de el por dispararle.

Sin embargo, ¿como puede Luffy soportar ver esto?, es más, incluso tras ver llorar a Hachi se enojó más, así que con un tirón se safo del agarre de este y se dirigió directamente hacia San Charlos, y cuándo hizo esto todos lo miraron con miedo.

Ya que vieron que Luffy quería hacerle algo a un Tenryuubito, y sabían perfectamente que pasaría si algo le sucedía a un tipo así, un Almirante vendría de inmediato y aniquilaria a todos los implicados. Así con las miradas nerviosas de Nobles y Piratas en la subasta Luffy se acercó a San Charlos.

En el momento que estaba apunto de golpearlo de repente el golpe de la puerta abriéndose resonó en el lugar, al oír el sonido todos inconscientemente miraron hacia esa dirección, incluso San Charlos y Luffy. Y cuándo todos vieron quién entro al lugar no pudieron evitar suspirar una bocanada de aire frío.

Ya que varios hombres con capas negras, y armaduras azules estaban en la puerta, y las personas no tuvieron miedo por su aspecto si no por la insignia plateada que tenían las capas, esa insignia de la Estrella que todos conocen en el Mar... la insignia del ejército del Imperio de la Estrella Azul.

Pero las cosas no terminaron, ya que vieron como los soldados al frente caminaron hacia dentro del sitio pero después de dar unos paso se movieron a los lados, y al hacerlo varías personas más con la capa y la insignia del Imperio de la Estrella Azul entraron en el sitio.

Una de las personas era conocida para Robin y Olvia, y esa persona fue la que las salvó del infierno que paso en Ohara, efectivamente esa persona era Jigen, a su lado también habían dos personas que madre e hija también conocían, Ashura e Indra, aunque no hablaron en absoluto ellas vieron como estas dos personas peleaban con los actuales Almirantes, Akainu y Aokiji.

Claro aparte de ellos habían más personas, como Altair, Mordred, los hermanos Yoriichi y Michikatsu, por último también estaba Nobunaga. Al entrar al lugar, las personas que acompañaban a Jigen miraron a todos lados y al ver como era el Tenryuubito, una mirada de despreció obvió apareció en sus ojos.

"¿E-eh?... ¿que es lo que miran todos ustedes?, yo siendo un Tenryuubito, ¿por que no se arrodillan?". Por supuesto que San Charlos noto las miradas del grupo de Jigen, así que con un tono de superioridad les apuntó con su arma mientras les decían que se arrodillaran.

Todo esto fue visto por las personas que viendo lo que hacía San Charlos un miedo sin precedentes llenó su corazón, saben que si el Imperio de la Estrella Azul a durado por más de diez años significa que no le teme al Gobierno Mundial, entonces ahora un simple Tenryuubito se atreve a ofenderlos.

"Hmmm.... Jigen, ¿puedo deshacerme de un tipo tan desagradable?". Mientras todos tenían el corazón en la garganta, una voz femenina resonó en el lugar.

Cuando todos se giraron para ver quién hablo, vieron como la mujer de cabello plateado azulado al lado de Jigen fue la que habló, y al hacerlo todos en el lugar sabían que el Tenryuubito ya estaba acabado.

Pero eso no es lo peor, ya que saben que si algo le pasa al Tenryuubito el Almirante de la Marina vendrá. Y cuándo lo haga tendrá un conflicto si o si con el Imperio de la Estrella Azul, y ellos se verán involucrados como daños colaterales.

"Hum... también me desagradan estos tipos... ¿Jigen puedo también encargarme de los otros dos?". Mientras todos estaban nerviosos por lo que iba a suceder, la voz de Mordred hizo que sus almas salieran de sus cuerpos.

Ahora no solo a San Charlos le va ocurrir algo, si no que al resto de su familia también, no sabían por que precisamente al estar en esta subasta ocurrió esto.

"No tienes por que preguntarme esto, puedes hacer lo que quieras, no es como si te fuera a detener". Cuando la gente del lugar sufría, Jigen le respondió a la ligera a Mordred, sin embargo al hacerlo la miro a ella y Altair con una mirada significativa.

Esa mirada hizo que un escalofrío recorriera la espalda de las dos mujeres, ya saben lo que significa la mirada de Jigen, así que no quieren que el las cuidé de nuevo, incluso luego de varias horas este tipo estaba bien pero ellas ni se pudieron levantar de la cama.

Por supuesto que Jigen no conocía el miedo de las dos mujeres, simplemente estaba bromeando. Pero a el de verdad no le importa lo que hagan, ya que vino a la subasta para ver a Robin y su madre, claro también a la pequeña Nami la cuál finalmente se unió al grupo de Luffy.

"¿¡Ustedes estúpidos plebeyos!?, ¿¡acaso están despreciando a los descendientes de los dioses!?... ¡Los voy a mat-!". En el momento que San Charlos iba a terminar de regañar al grupo de Jigen de repente sus palabras se atascaron en su garganta.

Bueno más precisamente, una espada de luz estaba atravesando su garganta, y como no esta espada de luz fue hecha por Altair, la cuál ya no pudo soportar ver a la persona cerdo delante suyo.

"Hmph, que desagradable sujetó... Mordred encargate de los otros dos, ahora me desagrada con solo verlos". Mientras dejaba de mirar el cuerpo inerte de San Charlos, Altair no se olvidó recordarle a Mordred que se encargara de los otros dos Tenryuubitos.

"Tsk, no tienes por que recordarme algo que voy hacer ahora mismo". Aunque infeliz por las palabras de Altair, Mordred no fue lenta en sus acciones, rápidamente sacó su espada y se preparó para lanzar un Ki de espada que matará a los dos Tenryuubitos de golpe.

Pero al momento que iba actuar seis figuras vestidas de blanco aparecieron en el lugar, cuatro de estas estaban protegiendo al padre y hermana de San Charlos, las otras dos estaban revisando el cuerpo de este. Y por supuesto, estas figuras son los miembros del Cp0, los encargados de proteger a los Tenryuubitos.

Sin embargo tras ver que San Charlos estaba muerto las dos personas dejaron de revisarlo, luego miraron a Altair con una intensión asesina sin precedentes. Saben muy bien que pasara si mientras cuidan a un Tenryuubito les pasa algo, además como el Gobierno Mundial les labo el cerebro su lealtad esta totalmente predispuesta hacia los Tenryuubitos.

"¡Tu, maldita plebeya!...¿¡sabes lo que hiciste!?... mataste a un descendiente de Dios que es imperdonable, así que prepárate para morir". Sin decir más palabras los dos miembros del Cp0 actuaron de inmediato.

Rápidamente levantaron y bajaron sus piernas, al hacerlo dos considerables cortes de energía salieron de sus piernas y se dirigieron directamente hacía Altair, la cuál se quedó en el sitio sin hacer ningún movimiento. Esto hizo que las dos personas del Cp0 estuvieran felices ya que la persona que mato a su amo iba a morir.

Pero no esperaban que antes de que las dos cuchillas de energía se acercaran a Altair dos personas bloquearon el ataque, esto dejo atónito a los dos miembros del Cp0 ya que no sabían como los dos jóvenes delante de ellos bloquearon su ataque sin hacer nada.

Por supuesto, los que bloquearon el ataque fueron Indra y Ashura, los cuales bloquearon el ataque no por que Altair fuera a salir lastimada, más bien por que querían luchar contra los miembros del Cp0 para probar los resultados de su entrenamiento de estos nueve años.

"Altair, ¿no te importa si luchamos contra esos tipos, verdad?". Al terminar de bloquear el ataque de los dos miembros del Cp0, Ashura se giró para ver a Altair con ojos suplicantes para poder pelear con los miembros del Cp0.

Esta acción hizo que Altair se disgustara al instante, y a su lado Indra parecía avergonzado por tener un hermano así.

"Deja de decir tonterías y mejor actúa". Sin poder soportar al hermano a su lado, Indra le dió un golpe en la cabeza y luego de hacerlo se abalanzó contra un miembro del Cp0.

"¡Oye!... ¡estúpido Indra, ya veras!". Aunque enojado por las acciones de Indra, Ashura no se aturdió y se fue a enfrentar al otro miembro del Cp0.

"Maldición, a estos tipos si les gusta pelear". Mientras los hermanos Otsutsuki luchaban, a un lado de Jigen, Nobunaga no pudo evitar hablar.

"¿Oh, enserio?... ¿acaso no eres también igual a ellos?". Cuando Jigen escuchó la voz de Nobunaga, no pudo evitar burlarse de ella y cuando lo hacía también señalo a los otros dos hermanos Tsugikuni, que junto a Mordred y Altair estaban peleando con los otros cuatro miembros del Cp0.

"Hum, ¿quien dijo que soy como ellos?". Insatisfecha por lo que Jigen dijo, Nobunaga comenzó a quejarse con Jigen.

El cuál tuvo que soportar a esta chica, ya que no quería hacer que se volviera loca, sin embargo decidió darle una lección más tarde para que aprenda. ¿En cuanto al problema de los Tenryuubitos?, a el no le importa en absoluto, incluso si vienen los tres Almirantes nisiquiera debe actuar, además... en sus ojos los Tenryuubitos no son nada, incluso si mata a todos los de Mariejois no sentirá nada.