3 Capítulo 3: Desconocidos

—Me atrevería a decir que te llamas Marta o Olivia- dijo y luego se rió—En verdad no se como te llamas pero intuyo que es un nombre muy poco común porque no pareces ser como otras chicas eres...—se detuvo en eres

—Soy que? Termina tu oración

—Eres misteriosa.

Me quede en silencio, no iba a negarle algo que para todos parecía tan obvio, no me gustaba decir como me sentía, ni hablaba mucho con las personas porque simplemente soy así, nadie puede cambiarme, pero aquí estaba yo, hablando con un desconocido y debatiendo acerca de porque no me llamo Ashley, debería de haberle dicho mi nombre real.

—Y me dirás tu nombre en algún momento? Me refiero a tu nombre real

—No

—Entonces admites que me has mentido, eso no es muy educado de tu parte

—No te conozco, no tengo porque ser educada contigo—le dije directamente

—Wow también tienes bastante agallas, te puedes llamar Debora quizás, porque me deboras con tu indiferencia.

El empezó a reírse, de sus propias palabras, pero debo aceptar que si tuvo su gracia aquel comentario. Aun así no tenía pensado decir mi nombre.

Ya eran las 4:55 de la madrugada, según el reloj de la estación de trenes, mi tren debería de llegar en 5 minutos y con suerte no volvería a ver a aquel chico jamás en la vida.

Se escucha el tren aproximarse y siento impaciencia porque llegue ya, es el transporte que me llevará a mi nueva vida. El tren se detiene, bajan pasajeros de este y yo me aproximo a entrar sin despedirme de Aryeh, el ya no tan desconocido chico. Muestro mi boleto, me dirijo a Lostville, queda a 8 horas de aquí pero este gran viaje vale la pena.

Monto en el tren y me dirijo a mi sitio

Miro por la ventana preguntándome si algún día volveré a este pueblo y algo me dice que si, si regresaré algún día, pero no sé con qué motivos podría regresar.

Alguien se sienta a mi lado, espero unos minutos y luego volteo mi rostro cuidadosamente para ver quien es, es un chico, es lindo, tiene una piel muy blanca, sus ojos son verdes, su cabello es muy oscuro y tiene un peinado que lo favorece bastante, pues luce muy bien, pero no hay tiempo para el amor en estos momentos ni para quedar cegada por alguien que es físicamente atractivo y qué tal vez sea un chico tonto.

—No se porque me miras de ese modo Ashley?—Me dice él y me doy cuenta de que es Aryeh, ni siquiera había podido ver su rostro hace unos minutos, este chico tan loco que hablaba consigo mismo tiene un rostro bastante llamativo.

—Pero como? Porque? Que?—tartamudeé como tonta hasta que pude decirle—Este no es tu sitio

- Si que lo es, mira- y me mostró su numero de asiento en el boleto

—No lo puedo creer—dije bastante bajito pero igual me escucho

—Yo si, se llama destino chica misteriosa—Me dijo de un modo que podría asegurar que estaba bastante feliz con eso.

—No puedo creer que tendré que pasar 8 horas contigo a mi lado, por favor solamente te pido que hagas silencio, podrías no hablarme ni relatarme tu vida?

—Tengo una condición—lo miré dándole a entender que no haría caso a su petición y entonces me dijo—Si me dices tu nombre no hablaré ni una palabra

—Vale—le dije

Me llamo Winter.