61 Canción Parte I

Guardé silencio por unos momentos, miré mis manos que temblaban por lo que me acababan de contar, ¿acaso esto era una pesadilla? ¿cuando me dejarán en paz? ¿Podía existir una persona tan vil como para hacerle daño a una mujer con una niña?.

-¿Estás bien cariño? ¿Quieres un poco de agua?.-Dijo la señora Lilly mientras volteaba a ver a la puerta para hablarle a su nieto.

-Estoy bien. Solo estoy sorprendida.- Dije tratando de recuperar aquella valentía que había perdido hace algunos años.

-Sé cuidadosa, aunque sólo te dije una cosa que me contó tu madre aún debes estar alerta de lo que pasa a tu alrededor. Si quieres saber más tendrás que investigar con lo poco que te he dicho... quisiera ayudarte pero tu madre era muy reservada con "ese" tema.- A través de sus gafas podía ver la sinceridad de sus palabras, después de todo la Señora Lilly siempre quiso protegerme de lo que me estuviera acechando.

-Gracias por contarme esto, tendré que investigar algunas cosas para saber la verdad. Sé que le fue difícil guardar estas cosas, pero en verdad valoro esto que esta haciendo, solo así podré saber que causó la muerte de mi madre.- Tomé sus manos y sonrei para brindarle aquella calma que siempre quise darles a las personas que me cuidaban.

-Se esta haciendo tarde mi niña, aún debes ir a otro lugar con la pequeña Ash, vayan ahora para que no se les haga de noche.- Dijo mientras miraba su reloj.

-Si, es verdad. Venga, vayamos con lo demás.- Le ayudé a ponerse de pie y entramos a la casa donde nos esperaban mis amigos y los padres de Alex.

-Hola hija, estás hermosa. No cabe duda de que eres la hija de Mía.- Dijo una señora muy bonita con cabello negro y gafas que se acercó a darme un abrazo acompañado de un beso muy efusivo.

-Hola ¿Cómo han estado?.- Dije mientras me unía a una platica que duró tan solo unos minutos.

Cuando Ash y yo nos despedimos de los padres de Alex y de la señora Lilly los chicos salieron de la casa para despedirnos.

-¿Están seguras de querer ir solas? ¿No quieren que las acompañemos?.- Dijo Matt mientras se acercaba a abrirme la puerta.

-Necesitamos una tarde de chicas.- Dijo mi amiga mientras se subía al auto y esperaba a que me sentara a su lado.

-Esta bien, pero cualquier cosa nos llaman. ¿De acuerdo?.- Alex nos miro esperando una respuesta a lo que las dos levantamos el meñique para confirmar nuestro trato.

Cerré la puerta del auto, me abroche el cinturón y bajé la ventanilla para decirles adiós con la mano.

-¿Estas bien Sash? Te veo un poco preocupada, ¿tiene algo que ver con la señora Lilly? o ¿tal vez quieres cambiar de asiento?. Sabes que no tienes que obligarte a superar esto.- Dijo mientras me miraba de reojo.

-Estoy bien, bueno... me siento mareada y muy... muuuuy nerviosa al estar sentada en este lugar del auto, pero solo es cuestión de que me acostumbre. Y de lo otro prefiero contarte una vez que estemos en tu casa.-

-Nuestra casa Sash, tu siempre has formado parte de mi familia, recuerdalo.- Dijo mientras me daba su celular para que pusiera música.

Tomé el teléfono y pude ver que su fondo de pantalla era una foto en donde salia su familia, los padres de Alex y mi madre cargándome en sus brazos. Sonreí al darme cuenta que aunque no tuviera a mi madre a mi lado, ella se había encargado de dejarme con personas que me amaban y me cuidarían pasara lo que pasara. Ingrese a su aplicación para musica y coloqué la canción que había dejado de escuchar desde hace unos años y que mi madre siempre me cantaba.

-Tenía tiempo que no escuchábamos esa canción.- Preguntó Ash mientras que en sus ojos se formaban algunos rastros de lágrimas que intentó ocultar girando la cabeza al lado contrario al mio.

-Lo sé.- Tome la perilla del volumen y le subí un poco más, cerré los ojos mientras que sentía mis ojos inundándose cada vez más.

avataravatar
Next chapter