Soy Mason Cross...

¿Hacia adónde voy? ¿Quienes me están secuestrando? ¿Qué quieren de mí? No lo sé, desde hace meses creo que nadie necesita nada de este ser maldito y desquiciado. Esa vida que tuve hace unos años, lamentablemente, aún no ha quedado atrás, y estoy seguro de que nunca lo hará, toda esa sangre derramada, todas esas personas que clamaban por sus vidas, todas esas miradas llenas de temor... Aún las recuerdo, cada día y cada noche, no siento arrepentimiento, pero tampoco el placer que sentía hace años. De hecho, ya no siento nada...

Por fin puedo ver, estos tipos quitaron lo que quiera que haya estado tapado mis ojos durante todo este tiempo, me traen a un lugar desconocido, lo único que sé, es que no es mi hogar, a no ser que lo hayan limpiado un poco, porque le hacía mucha falta. Me hicieron entrar a una puerta al fondo del pasillo, tras esa puerta, una gran sala apareció frente a mí, veo muchos escritorios y muchas personas bien vestidas trabajando arduamente en sus computadoras, al menos eso es lo que parece, debe de haber uno o dos que sólo fingen trabajar, de seguro están jugando solitario o buscaminas, además de que estoy casi seguro que no es mi hogar.

Los hombres me llevaron hacia un ascensor, pero antes de entrar a este, había algo que debía de hacer y se los hice saber, necesitaba ir al baño, creo que esto no debe de ser explicado tan explícitamente por lo tanto lo omitiré, entonces volvimos al ascensor, a simple vista veía que ellos no son más que marionetas, por ello, siquiera intenté preguntar sobre el lugar donde estaba o el porqué estaba aquí, sabía que no iban a contestarme nada y que me llevarían ante alguna autoridad, temo que debe de ser algún antiguo jefe o alguien que busca venganza por mi pasado empleo de exterminador de personas al azar, pero prometí no volver a matar a ninguna persona, por mal nacida que sea.

Voy aún por el cuarto piso, debo recorrer seis, según lo que estos hombres dijeron al joven raro que manejaba el ascensor, un chico que no ha abierto sus ojos en todo el recorrido y que tenía un cabello color verde, muy inusual para trabajar en alguna empresa donde haya gente elegante. En fin, el ascensor abrió y pude ver una sala de tamaño un poco menor a la anterior, lo más extraño, sólo era visible una puerta, una al fondo del pasillo, algo me dice que será ahí donde fuí traído, los hombres se detuvieron frente a la puerta y uno de ellos sacó un teléfono celular de su bolsillo, llamó a alguien y tan sólo dijo "Está aquí" estoy seguro que refiriéndose a mí, la puerta era enorme, supongo que dentro se debe alojar el jefe de todo el edificio, imagino que un hombre viejo, rubio, ojos claros, de traje entero y zapatos brillantes, un tanto cliché, pero así son la gran mayoría de jefes de grandes empresas, entonces los hombres abrieron la puerta, una sala lúcida, todo era tan blanco como el mármol, lo único que pensé fue "¿Adonde está el limpia pies?" Pues no quería arruinar tal perfección, la silla detrás del escritorio estaba viendo hacia afuera, no es para menos, estaba sucediendo un atardecer hermoso, digno de ver desde tal edificio, pero ese atardecer no era lo que quieran que presenciara, no lo creo, entonces la persona sentada sobre la silla dió vuelta a la misma, como lo supuse, era una mujer, ya que un hombre no sería capaz de mantener tal perfección en un lugar así, una chica de estatura promedio, color de piel moreno, cabello afro, ojos negros muy penetrantes, cuerpo muy bien cuidado, y un vestido blanco, para hacer el efecto visual de que era ella lo más importante y poderoso frente a los ojos de quien entrara al salón.

En cuanto ella volteó hacía el frente, los hombres que me custodiaban se fueron, entonces me miró a los ojos, experimenté un sentimiento que creí, había dejado en el pasado, sentí miedo, tenía una mirada fría, sanguinaria, realmente no podía ver el más mínimo rastro de un sentimiento dentro de su alma, inclusive me recordaba a mí mismo. Ella me dijo "¿¡Eres Mason Cross cierto!?" Tan sólo le acerté con mi cabeza, entonces le pregunté "¿Quién eres tú? Y ¿Qué quieres de mí?" Ella me respondió "Mi nombre es Amber..." Luego me explicó que era la presidente de la la O.R.A (Organización de Respuesta Avanzada) la cual fue creada por la ONU para interferir en problemas o situaciones peligrosas entre países o protegerlos de amenazas que el gobierno o el ejercito no podían o no quería detener por una u otra razón, dijo que necesitaban de mis servicios, eso me hizo recordar mis viejos tiempos, cuando mataba a personas por un poco de dinero, pero este dinero sería incapaz de pagar lo que hacía, las personas a quienes herí, ya que las víctimas no eran sólo a quienes mataba, los familiares destrozados por mi culpa, las personas que veían el asesinato frente a sus ojos y demás víctimas indirectas. Pero más grande aún, la satisfacción que sentía tras ver su sangre correr en el suelo....

Ella dijo haber visto por medio de un vídeo lo que pasó con la mujer que salvé de los sirvientes electrónicos que el mundo conocía como Androides, los cuales pasaron a ser casi personas en la civilización, pero añadió "¿Por qué no la mataste como lo hacías antes?" Claramente quería conocer sobre mi carácter y pues no se lo oculté. Una ira incontrolable surgió en mí, junto con crueles recuerdos, me levanté de la silla en donde me había sentado anteriormente y le exigí que no hablara sobre ello, pero creo que no se lo tomó de buena manera, ya que sacó una pistola, la puso en mi frente y me dijo "Si te atreves a gritarme así, de nuevo, no dudaré en jalar el gatillo" Pero sabía que ella me necesitaba y no sería capaz de disparar, entonces decidí tomar la pistola, en ese momento, ella tomó mi brazo con sus manos y me lanzó contra el escritorio, la pistola cayó al suelo y yo terminé con una herida en mi frente por el golpe, la sangre manchó la perfección que había en la oficina, pero ella no le dió la más mínima importancia a ello, sacó unos papeles de escritorio tras soltar mi brazo, este creo que debió recibir una pequeña fractura como mínimo, ya que sentía gran dolor, pero a ella no le importaba, entonces señaló los papeles y me dijo "Aquí puedes ver los registros que tenemos de los androides, son máquinas con forma muy semejante a la humana, por lo que hace complicado el poderlos distinguir de las personas. Estos empezaron a matar personas, aparentemente al azar, ya que no hemos sido capaces de encontrar un patrón concreto, tan sólo podemos saber de su presencia en algún lugar cuando alguno de nuestros hombres o asociados logran distinguir y nos llaman para tomar cartas en el asunto" Muy probablemente observaron lo de la chica a la cual rescaté del pueblo, aunado a mi pasado en el sicariato, me convirtieron en el hombre que ellos requerían, pensé en rechazar la oferta, pero Amber me dijo "Si aceptas, tus expedientes en delincuencia serán borrados del todo y a diferencia de las demás élites policiales a nivel mundial, sabemos quién era el hombre que estaba detrás de la ola de asesinatos de hace ya varios años, el asesino despiadado y que le gustaba torturar a sus víctimas, sabemos de lo que eres capaz, para poder encontrar, ejecutar y escapar sin ser visto. Eso es lo que necesitamos, además de que recibirás una paga significativa de dinero, aunque estoy segura de que lo que más te atraerá, es el hecho de dejar tu antigua vida en el pasado y forjar un nuevo futuro, también tendrás a tu disposición armamento y demás equipos de primera clase" Realmente el sobreponerme a mi vida pasada fue lo que más me atrajo, pero la idea de utilizar armamento de alta gama también suena muy interesante.

Luego de muchas preguntas de mi parte, y una descripción de cuales son los puntos débiles de estos seres, logró convencerme. Le dije que era aceptaría pero decidiría lo que debía de hacer y cómo hacerlo. Y tras otra pequeña discusión y un roce de bala en mi pierna, llegamos a un acuerdo. Después de todo, suena como un trabajo bastante interesante recibí un mapa de Argentina, y un mapa local de la zona de Quilmes, allí había remarcada una zona, en donde podría encontrar al androide, entonces recibí un tiquete de avión y me enviaron al aeropuerto para mi viaje.

Aún no comprendo muchas cosas. ¿Qué más saben ellos sobre mí, además de lo ya me había dicho? ¿Por qué yo? ¿Los androides matan por placer? ¿Alguien los lidera? ¿Amber es la cabeza o es sólo otro títere en esa gran organización? ¿Por qué la pizza es redonda, si viene en cajas cuadradas y sus pedazos son triangulares? ¿Por qué sigo sientiendo esa sed de sangre al atacar a estos seres? Cosas así pasan por la cabeza de alguien como yo.

Un hombre me recibió en el aeropuerto y desde allí, me dirigió al pueblo donde aparentemente se hospedaba la máquina asesina, tal como le dije a Amber, lo único que necesitaría para acabar con él, por ahora, sería una navaja bastante larga, de poco menos de un metro de largo y varios metros de cuerda de pescar, y claro, la pistola que siempre guardo en mi bolsillo, aunque sabía que esta no sería del todo útil para combatir a un ser como este. Todo estaba en un auto que consiguieron, uno bastante viejo quesque para no llamar la atención, yo creo que es más por no querer gastar dinero. En fin, llegué a Quilmes sin mayor problema, allí pregunté por el ser humanoide que habitaba por la zona, descubrí que muchas personas le conocían y muchos de ellos aparentemente no le temían para nada. Le encontré dirigiéndose al parque, el perfecto lugar para hallar víctimas desprotegidas y débiles, tal como lo son los niños.

Caminaba en dirección de donde habían un grupo de pequeños jugando con una pelota, ellos no se habían percatado de su presencia, y los pocos padres responsables que estaban con ellos, estaban muy ocupados con sus celulares como para prestarle un poco de atención a la realidad, en ese momento saqué mi pistola y disparé a la cabeza del robot infernal, pero sabía que no iba no tendría ningún grado de efectividad. La principal idea de hacer eso era el sacar a todas esas personas lo antes posible de allí y así fue. Tomé la navaja y la sujete a mis nudillos con la cuerda de pescar, el robot me volvía a ver solamente, pero en cuanto me acerqué, estiró su brazo más de 2 metros y trató de tomarme por el cuello pero por poco lo logré esquivar, sabía que ese monstruo no sería fácil de vencer pero el recordar porqué lo estaba haciendo me hizo tomar más fuerzas y volver a correr hacia el androide.

Esos robot están hechos de un material muy resistente, demasiado diría yo, pues si pocas armas del ejército son capaces de derribarles, además de que esa aleación de metal era resistente al calor y los cables que poseen están rodeados de hule, lo que los hacía casi inmunes a la electricidad también, pero tienen un punto débil, bueno, 5 puntos débiles, su diseño tiene unas pequeñas hendiduras, unas rayas bastante delgadas al rededor de sus rodillas, codos y una más largo desde el centro de su cabeza hasta la espalda, los que están muy cerca de los circuitos que sujetan sus partes y algunos cables importantes o algo así. Ya que ellos tratan de matar a las personas regularmente de frente y poseen una capacidad de reacción bastante alta, simulando la de un ser humano, además de que su rango de visión es igual al de un hombre, pues al parecer fueron hechos para ser idénticos a nosotros, eso puede hacer que las posibilidades de que ganemos la guerra que se avecina sean levemente mayores, pero, no significa que vaya a ser una tarea fácil, pues sólo uno de ellos puede ser un enorme dolor de cabeza, ahora todos los que hayan dispersados a nivel mundial...

Aunque trato de acercarme, no lo he logrado aún, bueno, lo logré este último intento en que él me tomó y me lanzó contra el suelo, lo cual dolió bastaate pero me logré esconder en la parte más llena de árboles que hay aquí, tomé los metros de cuerda y los sujeté al gatillo de la pistola, la cual está tras un arbusto, esto para tener una trampa, entonces vamos a la acción, jale de la cuerda y con ella del gatillo de la pistola, le dí al androide y este estiró su brazo hacia el arbusto, en ese momento me lancé del árbol en el que estaba, justo sobre el androide, mi intención era cortar su brazo con mi navaja, pero olvidé que su otro brazo tenía la misma habilidad, entonces el androide me lanzó contra el árbol y salí muy herido, una vez más, fue ahí que descubrí algo. Su brazo volvía en instantes si no lograba tomar lo que necesitaba, pero si lo lograba, su brazo tan sólo lo lanzaba, pues al parecer el lanzar los brazos gastaba mucha energía y estaban hechos para no desperdiciarla, lo que significaba que tenía que sujetar su brazo en el momento que volvía a su cuerpo, me acerqué y él trato de tomarme, pero me le adelanté y pude esquivar levemente su brazo, al menos para que no me tomara, entonces este se devolvió mientras me había sujetado de él y logré cortar sus brazos, por medio de sus ranuras, ya en ese estado era inútil el defenderse, sin embargo ese monstruo seguía tratando de golpearme con sus pies, le despojé de uno de ellos, entonces le tomé de la cabeza y corté a lo largo de su cabeza, con eso bastó para desactivar al ruin robot y lancé lo que quedaba de él, dentro del maletero de mi auto y me dirigí a un restaurante de comida rápida para comer algo y llamar a Amber o alguien de la organización para reportar que había acabado con la chatarra y volvería el siguiente día.

Tras ello, volví en avión a los Estados Unidos y entré al edificio en busca de una nueva indicación o un nuevo androide para aniquilar, pues me pareció un deporte muy divertido, aunque un poco doloroso y bastante fuerte, era divertido. Estaba aún muy adolorido y en el avión no logré dormir mucho, así que tomé una siesta en unos asientos vacíos que encontré, cuando desperté, ví que Amber estaba saliendo del ascensor, junto con un hombre, no era un guardaespaldas o nada por el estilo pues estaba vestido muy casual y poco elegante. Era alguien joven, de poco más de veinte años, tenía ojos claros y cabello rubio, cerré mis ojos de nuevo para poder escuchar su conversación sin que supieran que estaba despierto, ella le decía al tipo "... él es de quien te hablé, la nueva arma que nos ayudará a acabar con los androides" y él le contestó con risas "Ese tipo no tiene nada de especial, no es más que un anciano con poca higiene personal. ¿Segura que no lo han sacado de una alcantarilla o que estuviera viviendo en las calles o algo por el estilo? Hasta yo podría acabar con él sin mayor problema, después de todo soy el mejor" Pero Amber le dijo "Ese hombre es bastante peligroso, talvez fisicamente no sea el más apto para el trabajo, pero es muy resistente y podría decirse que es una máquina de matar" Realmente me sentí halagado por el comentario de Amber, entonces le dije "Wow, me sorprende que digas eso de mí, me alaga, realmente confías de mí ¿cierto?" Y ella me contestó "Ya era hora de que dejaras de husmear las conversaciones ajenas y dejarás de fingir estar dormido" pero sólo me reí, aunque realmente me sentí algo nervioso de nuevo por esa tipa, pero dije entonces "Oye Romanov, ¿y este intento de modelo de donde salió? ¿Acaso no había muerto cuando el Titanic se hundió?" Pero creo que ese comentario no le agradó entonces se paró sobre mí y me pidió que repitiera lo que había dicho, en ese momento descuidó su abdomen y le traté de golpear, pero mi puñetazo fue frenado, creí que era su mano, pero me sorprendí cuando ví que fue Amber quien le defendió, entonces le dije "¿Por qué lo defiendes? ¿Acaso tu novio no se sabe defender sólo y por ello debes de cuidarlo como a una mascota?" Él añadió "¿Qué dices maldito vagabundo? ¿Por qué no vuelves a tu alcantarilla?" Y antes de poder contestar, ella exclamó "¡Es suficiente ambos! ¡Red! ¡Mason! Ambos tienen trabajos que hacer" y tomé un papel que creí que había dejado botado en el sillón, pero era una dirección de otra misión para mí, pero decidí ir a la enfermería primero a tomar algún medicamento para el dolor. Pues sentía mis costillas muy adoloridas y ni que decir de mi cuello y espalda.

Tras ese día, seguí matando uno tras otro a los androides, conocí muchos lugares exóticos a nivel mundial y otros no tanto. Vi muchos androides con habilidades muy particulares, algunos más poderosos que otros, pero hace unos días me reencontré con un sentimiento y una sensación tan fuerte y cruel que llevaba mucho tiempo sin sentir, es increíble que antes era algo muy normal para mí, ahora lo ví y la pesadilla que viví hace años volvió a mí, la vida me trajo muchos recuerdos, muchas víctimas...