Capítulo I: Despertar.

Dolor, algo le causaba mucho dolor a James Alder, sintió el frio roce de la cámara metálica en la que estaba confinado, todo estaba oscuro y el aire se sentía pesado. Donde estoy, que había pasado. Esas preguntas empezaron a llenar sus pensamientos mientras intentaba recordar.

James abrió los ojos con dificultad, solo para ver oscuridad, movió su mano débilmente hacia al frente, hasta sentirla chocar con una capa de cristal.

¿Qué hacía en una cámara de cristal?

Sus recuerdos eran borrosos, pero podía recordar quien era, su padre, sus amigos, el colegio.

Aun así, no pudo explicar cómo llego a este predicamento.

El cuerpo le dolía, se sentía débil y entumido. Busco la libertad de esa pequeña cámara, sintiendo el cristal contra su rostro cuando intento levantarse, recordó la sensación de sus dedos moviéndose, sus pies, sus piernas, sus brazos, en su torso el pecho le causaba un gran dolor.

¿Estaré en un hospital? ¿Me habrán secuestrado?

Pero esto no tenía mucho sentido, el no valía lo suficiente para ser víctima de una abducción, aunque el robo de partes, así como de sujetos de experimentación, es posible/

La amnesia es un síntoma de una contusión a la cabeza. Si pido por ayuda con suerte vendrá un médico.

*Ayuda, que alguien me ayude*

James empezó a desesperarse y siguió golpeando la cámara de cristal con sus débiles piernas y brazos sin efecto. Reunió la fuerza para mover los labios, pero ningún sonido podía salir.

"Ayu…. ayuu"

Pero esto era raro, no había ninguna luz a su alrededor, que clase de hospital operaria en total oscuridad, no he quedado ciego, ¿verdad? ¿Cómo se ve la ceguera en primer lugar?

Su mente empezó a dar vueltas.

En su desesperación, James intento gritar, aun sin saber quién estaría allá fuera, y si existe alguien allí en primer lugar.

*Que alguien me ayude! *

En su mente gritaba, pero no podía enunciar las palabras.

"Quiee ro… sa"

Alguien debía venir y sacarlo de esa cámara de cristal en cualquier momento.

Se esforzó para recordar, pero no podía concentrarse, se estaba volviendo difícil respirar.

Su visión empezó a volverse nublada, no podía ni concentrarse en la oscuridad total.

Decidió tomarlo en sus propias manos, aterrado en la posibilidad de que no exista nadie que lo pueda salvar.

*Quizás pueda encontrar un modo de salir*

Desesperado palpo la superficie de esa cámara hasta llegar a la parte metálica donde estaba recostado, en la cabecera había lo que parecía una palanca, jalo con la energía que tenía sin efecto, mientras sentía la fuerza escapar de sus dedos

James se sintió débil, desconectado de su cuerpo, su mente daba vueltas y el aire estaba más pesado, empezó a ver recuerdos de su pasado, aun sin recordar como llego a esta cámara, la cual lo vería morir.

*No, NO QUIERO MORIR! *

*No quiero morir, no así, no aquí, solo, encerrado en esta cámara *

James uso toda su energía para jalar la palanca incluso si no sabía lo que hacía, ciegamente puso su esperanza en esta. Jalo con toda su fuerza usando el peso de todo su cuerpo grito usando el aire que quedaba, esta era su única esperanza.

La palanca se movió, pero no pasó nada, absolutamente nada.

Todo su esfuerzo fue en vano.

Porque puso toda su esperanza en esta palanca, porque lo hizo, esto no tenía sentido, pero esta cámara de cristal tampoco lo tenía.

Aun en su final, James no podía recordar que es lo que se lo trajo.

Su conciencia empezó a fallar, se estaba quedando dormido, aunque en el fondo James sabía que no iba a despertar.

*Este es mi final? … Me hubiera gustado hacer tantas cosas… Debí haber intentado más… No quería que mi final fuera así…*

"Quiero salir, quiero vivir"

"Alguien ayúdeme…"

*No puedo contar ni conmigo… ¿Pero pude hacer otra cosa? *

*Pero supongo que ya se acabó*

En su último lamento no escucho el clic mientras se desmallaba.

Al abrirse la cámara de cristal, ahora la puerta de una capsula., el cuerpo de James se azoto contra el suelo.

No lo sabía, pero había sobrevivido su confinamiento.