En un enorme cráter, se podía ver una pequeña figura. El ser que yacía dentro estaba extremadamente molesto.
"Maldita sea."
- ENERGÍA ANORMAL ESTÁ EVITANDO NUESTRA RECUPERACIÓN.
- ENERGÍA ANORMAL RESTRINGIÓ EL MANÁ DE LA ZONA. SOLO ES POSIBLE USAR EL MANÁ INTERNO DEL CUERPO. ESTE SE VERÁ DRASTICAMENTE DEBILITADO AL SALIR DEL CUERPO.
"Me importa una mierda. Alguien debe pagar por esto."
Me encontraba tirado en el medio de un cráter. Mis heridas ya se habían cerrado; no tenía heridas gracias a 'reparador'. Sané en un instante, o eso debió pasar. Mi recuperación no estaba completa; la razón de esto se debió al choque que tuve con la barrera. Externamente estaba bien, pero internamente todo era un caos.
"Hacía tiempo que no sentía tanto dolor."
- ¿QUÉ HACEMOS CON EL SER QUE NOS VIGILA?
'Nada. Déjalo ser.'
- ENTENDIDO.
'¿Cuánto tiempo tomará sanar por completo?'
- UN DÍA COMPLETO. PERO SI USAMOS LA AUTORIDAD REPLICADA, SERÁN SOLO UNOS MINUTOS.
'Entiendo.'
Después de mi charla con D, procedí a ponerme de pie. Mi ropa ya no estaba; se convirtió en nada cuando choqué con la barrera. 'Cortar' se aplicó a mi piel, para ser exactos, no a mi ropa. Sin perder el tiempo, saqué del cubo la ropa que me trajo aquel mensajero y me la puse rápidamente. No era mi estilo ir por ahí desnudo. Mirando en cierta dirección, dije:
"Cinco individuos poderosos. A dos de ellos no los puedo medir."
Usando el 'ojo demoníaco' al máximo, pude ver todo el panorama. Por lo general, no lo haría, pero actualmente estaba ansioso por desquitarme con el bastardo que levantó esa barrera. Usar el 'ojo demoníaco' a máxima potencia tenía su desventaja, y esa era que dañaba mis ojos; pero para mí eso no significaba mucho, ya que podía ser reparado rápidamente con 'reparador'. A lo lejos se podían ver cinco individuos haciendo mierda a un grupo de elfos. Algo que llamó mi atención fue que uno de los cinco individuos me miraba directamente. De inmediato lo supe: era el tipo que estaba buscando.
- ACTIVANDO LA CARACTERÍSTICA 'OCULTAR'.
'Espera. ¿Por qué no teníamos activa 'ocultar'?'
- EL IMPACTO DE ANTES ME HIZO PERDER EL CONTROL DE LA CARACTERÍSTICA DE FORMA TEMPORAL.
'¿Incluso tú te viste afectado por la barrera?'
- SÍ.
Al mismo tiempo, en un campo de batalla cercano, una figura con túnica completamente negra y una máscara que parecía estar hecha de madera dijo en voz alta, para que sus compañeros que luchaban cerca pudieran escuchar:
"Alguien atravesó mi barrera."
Con la simple mención de esas palabras, sus compañeros inmediatamente pararon sus ataques y se reagruparon rápidamente cerca de él. Un sujeto que parecía medir dos metros fue el primero en hablar:
"¿Fue el dragón?"
"No."
"¿Entonces qué es?"
"No lo sé, pero esa cosa nos está mirando ahora mismo."
"¿Tú, entre todas las personas, no sabes qué es?"
"Tiene la forma de un humano, pero lo que hay dentro es desconocido."
El grupo de sujetos que rodeaba a la persona fruncieron el ceño. No se esperaron que alguien fuera capaz de ingresar al palacio. Se habían estado tomando su tiempo con respecto a su objetivo, pero las cosas parecían haber cambiado ahora.
"¿Qué hacemos entonces, Aris?" preguntó la gran figura de dos metros de altura.
"Asesinaremos a la hija menor del rey Maedhros. Seguiremos el plan original."
"¿Y qué pasa con Gardolak?"
"Si se presenta la oportunidad, lo rescatamos."
Todos los presentes asintieron con la cabeza. Aris tenía un mal presentimiento con respecto a la situación actual. El ser que sintió antes emitía un aura mortífera; era como un monstruo buscando a su presa, y lo que empeoraba la situación era que dicha criatura desapareció por completo de su detección. Era la primera vez que le pasaba esto. Preguntó el sujeto que medía dos metros:
"Terminemos con estos tipos rápidamente. Se las han arreglado para no morir, pero no creo que aguanten más."
Delante de ellos había cuatro elfos gravemente heridos. Ellos formaban parte de la guardia real de la familia real, y rodeando a los guardias reales había 42 elfos de la guardia del palacio. Todos ellos tenían miradas extrañas en sus rostros y heridas graves, pero la sangre no salía de sus cuerpos. En toda la zona se podían ver cadáveres tirados en el suelo. Los cadáveres habían sido cortados en pedacitos pequeños por los cuatro elfos que se encontraban rodeados.
"Termínalos rápido, Leonardo. El resto vendrán conmigo. Vamos por la princesa."
"Está bien. Dame un momento. Les voy a reventar la cabeza de un solo golpe."
Cuando Leonardo se acercaba a los cuatro elfos heridos, una escena ocurrió ante sus ojos, o más bien, su visión cambió rápidamente de ver a los cuatro elfos frente a él a ver a sus cuatro compañeros que se encontraban detrás de él. No recordaba haberle ordenado a su cabeza dar la vuelta para mirar a sus compañeros. Lentamente, todo a su alrededor se comenzó a volver negro.
¡Thud!
El cuerpo de Leonardo cayó al suelo. Aris, que se disponía a irse, quedó en shock ante la situación actual. Solo había volteado la cabeza por unos cuantos segundos hacia otro lado, y al volver a ver en dirección a Leonardo, este ya había sido asesinado. El silencio envolvió toda la zona. Todos los presentes miraban a una pequeña figura que estaba justo al lado del cadáver de Leonardo. Esta figura pronto rompió el silencio:
"Mucho gusto en conocerte. Me moría de ganas por conocer a la persona que creó esa barrera."
La pequeña figura habló a Aris. Parecía no tener interés en los demás. Al no tener otra opción, Aris respondió en el idioma de los elfos:
"Mucho gusto en conocerte."
Aris estaba confundido. No sabía cómo había llegado tan rápido a este lugar, y para empeorar la situación, no lo pudieron detectar. Los cuatro elfos de antes reconocieron rápidamente a la pequeña figura, con las acciones que habían visto sabían que él estaba de su lado. Sin perder el tiempo, los cuatro se lanzaron contra los 42 elfos que estaban siendo controlados por el enemigo. Tenían que reducir sus números rápidamente.
"Oh, hablas el idioma de los elfos también."
"¿Quién eres y por qué te interpones en mi camino?"
"Cálmate un poco. No estoy aquí para responder a tus preguntas. Solo vine a entregar un mensaje."
"????????"
"Gardolak no desea ser liberado. Retírate, o llamarás la atención de ese dragón."
Las palabras que soltó el humano de cabello blanco y ojos azules hicieron que Aris frunciera el ceño. No sabía cómo este monstruo conocía a Gardolak. Pero Aris no se podía retirar sin cumplir su objetivo.
"¿Cómo conoces ese nombre?"
"No necesitas saberlo."
La pequeña figura lo miraba fijamente a los ojos. Esto tenía incómodo a Aris. Esta vez, Aris preguntó de forma amenazadora. Obtener la ubicación exacta de Gardolak era información valiosa que solo los reyes conocían.
"¿Niña, sabes dónde se encuentra Gardolak?"
Cuando Aris formuló la pregunta, se dio cuenta de que los ojos del humano se abrieron de par en par, como si estuviera en shock por lo que había dicho. La expresión del humano se volvió aterradora de golpe, y dijo con voz fría:
"Pequeño hijo de puta, soy hombre."
"¿Qué?"
El niño de cabello blanco largo pisó el cuerpo de Leonardo, y este desapareció inmediatamente. Esto sorprendió a Aris y a su grupo, que lo miraban con diferentes caras.
"¿Tú qué fue lo q-?"
Aris no tuvo tiempo de preguntar qué había hecho con el cuerpo de Leonardo. El humano desapareció de su vista, y pronto sintió un dolor en su abdomen. Miró hacia abajo, y ahí lo vio: la mano del humano había hecho un agujero en su abdomen de alguna manera.
"Ugh."
Al escuchar a Aris gemir de dolor, casi de inmediato Eldarion se dio cuenta de lo que había pasado y atacó al humano. Una lanza fue la primera arma en llegar al humano. Para mala suerte de Eldarion, el humano contraatacó con un potente corte de viento. La lanza golpeó el cuerpo del humano, y este fue enviado volando por los aires, y el corte de viento fue recibido por Eldarion. En su armadura se podía ver un enorme corte; de él salía un espeso líquido rojo por montones.
"¿Qué carajos? Este maldito puede usar maná."
Eldarion estaba sorprendido. Él lo sintió cuando apuñaló con la lanza al humano; no sintió que la lanza lo penetrara. Esa sensación que sintió en ese momento era de apuñalar un escudo de maná. El mejor que nadie lo sabía. Eldarion dio un grito que se escuchó por toda la zona.
"Isaac, no te quedes parado como un idiota. ¿Qué carajos haces? ¡Sáname de una maldita vez!"
"Está bien."
Respondiendo al grito de Eldarion estaba un hombre de cabello negro y ojos color café. Tenía la apariencia de una persona común; su altura rondaba entre 1 metro con 80 centímetros. Él levantó un bastón que tenía una hermosa gema negra en la punta y lo apuntó hacia Eldarion. Estaba pensando en lanzar un hechizo curativo sobre él, pero ese hechizo no llegó.
¡Spurt!
¡Thud!
La cabeza de Isaac abandonó su cuerpo. El sonido de sangre saliendo a chorros se podía escuchar. Segundos después se escuchó el sonido de algo golpeando el suelo. Esto no pasó desapercibido por Eldarion. Al notar que Isaac había sido asesinado, de inmediato gritó hacia el culpable a todo pulmón:
"¡Eru, hijo de puta!"
Eru, que se había estado escondiendo, decidió salir cuando bajaran la guardia los invasores. Ya había observado suficiente y había entendido mejor la fuerza del enemigo.