Bebe la leche

Shen Hanxing no sabía lo que estaban pensando. Guió a Ji Ning hacia su asiento mientras saludaba a Ji Mo, quien acababa de regresar de la escuela. —Ya regresaste. Ve a lavarte las manos para cenar.

Ji Mo era un joven refinado y guapo. Obedientemente llevaba su uniforme escolar y cargaba una mochila en su delgada espalda.

Cuando escuchó las palabras de Shen Hanxing, sus ojos se oscurecieron ligeramente. Su mirada se deslizó por sus hermanos mayores y hermanas que estaban sentados obedientemente en la mesa del comedor a pesar de su incomodidad. Sonrió y dijo —¿Eres mi cuñada? Hola, cuñada.

Finalmente, había alguien que sabía ser educado.

Shen Hanxing asintió con la cabeza en señal de satisfacción, luego su mirada inadvertidamente se desvió hacia Ji Yang. El cuero cabelludo de Ji Yang se tensó y subconscientemente se enderezó.

Ji Yang, ...

Parecía haber desarrollado un reflejo condicionado a partir de sus golpes.

Para recuperar su dignidad como hermano mayor, tosió e instruyó a Ji Mo —No te quedes ahí parado. Ve a lavarte las manos y ven a comer. Todos están esperando.

El asombro en los ojos de Ji Mo se intensificó, pero asintió obedientemente. —Está bien.

Además de la Cuarta Señora Ji Qian que estaba en el extranjero y el Segundo joven maestro Ji Zhou cuyo paradero era desconocido, el resto de la familia Ji estaba sentado ordenadamente en la mesa del comedor. El ambiente era extraño y armonioso mientras terminaban su primera cena de reunión.

A la mañana siguiente, cuando Ji Mo bajó, vio a Shen Hanxing sentada en la mesa del comedor comiendo tranquilamente. Sus movimientos eran perezosos y un poco descuidados, pero también emitía un aura grácil incomparable. No era en absoluto como él esperaba — Shen Hanxing creció en un vecindario pobre en el extranjero.

Reprimió sus pensamientos y la saludó —Buenos días, cuñada.

—¿Vas a la escuela? —preguntó Shen Hanxing.

Shen Hanxing miró la mochila detrás de él y levantó sus delgados dedos ligeramente, señalando el vaso de leche frente a ella —Bebe la leche antes de irte.

Ji Mo se quedó atónito.

Al ver que se quedaba allí parado sin moverse, Shen Hanxing pensó que no estaba acostumbrado a comer por la mañana, así que le aconsejó —No es bueno para tu estómago si no comes en la mañana. Estás ocupado con tus estudios en la preparatoria, pero no puedes descuidar tu cuerpo por tus estudios. Si no te gusta la leche, ¿haré que la cocina la cambie a leche de soja mañana o algo más que quieras comer?

—No es necesario.

Ji Mo avanzó unos pasos, cogió el vaso de leche y lo bebió de un trago. Su mano que sostenía el vaso se apretó silenciosamente. Bajó la cabeza y dijo —La leche está buena. Gracias, cuñada.

—Está bien, ve a la escuela. Ten cuidado en el camino.

Hablando de eso, Shen Hanxing solo era dos o tres años mayor que Ji Mo, pero rápidamente aceptó su nueva identidad y cuidó de ellos como su senior.

Ji Mo se quedó en su lugar un rato antes de asentir con la cabeza para mostrar que entendía. Justo cuando estaba a punto de irse, un sirviente lo detuvo.

—Sexto joven maestro.

La Tía Chen cuidadosamente le entregó a Ji Mo una lonchera azul oscuro de dos pisos. —Esta es tu comida que la señora nos instruyó preparar para ti esta mañana. Incluye tu platillo favorito de bistec agridulce.

Shen Hanxing acababa de llegar a la casa de la familia Ji, así que no estaba al tanto de muchas cosas. Sin embargo, los sirvientes que habían estado con la familia durante mucho tiempo sabían que, bajo la apariencia bien comportada del Sexto joven maestro, era extremadamente difícil llevarse bien con él.

—Sí, si la Tía Chen no lo menciona, casi me olvido.

Shen Hanxing se golpeó la frente y dijo, —Escuché que la comida en la cafetería de la escuela es terrible, así que le pedí a la Tía Chen que te preparara el almuerzo. Anoche en la cena, vi que te gustaban los platos agridulces, así que tomé la iniciativa y pedí a la cocina que prepare bistecs agridulces para ti. Si no te gusta, avísame y cambiaré los platos.

Ella lo dijo como si fuera un hecho, como si tener la cocina preparando el almuerzo para él y asegurando que tuviera una dieta bien nutrida fuera lo que necesitaba hacer.

Ji Mo sostuvo la lonchera en sus manos mientras sus piernas se arraigaban al lugar. Se sentía en conflicto.

Se quedó allí tanto tiempo que Shen Hanxing lo miró con una mirada desconcertada. Solo entonces Ji Mo reaccionó. Movió sus rígidas piernas y sostuvo la lonchera en sus brazos. Frunció los labios y sonrió. —Gracias, cuñada. Me gusta mucho.

Raramente Ji Yang se despertó temprano hoy. Casualmente vio a Shen Hanxing preparando específicamente el almuerzo para Ji Mo, así que gritó, —Cuñada, estás jugando a favoritismos. ¿Dónde está mi lonchera?

¡Él también era un estudiante de preparatoria que necesitaba reponer su nutrición!

Shen Hanxing hizo una pausa por un momento. —Pensé que con tu personalidad, preferirías comer fuera con tus amigos. Sin embargo, si quieres, le pediré a la Tía Chen que prepare otra lonchera y te la traiga al mediodía.

Detrás de él, Ji Ning se apoyaba cuidadosamente contra la esquina de la pared y miraba hacia abajo con una mirada envidiosa. Aunque intentaba reducir su presencia, los agudos ojos de Shen Hanxing aún la vieron.

Sonrió y le hizo señas a Ji Ning. —Xiao Ning [el apodo de Ji Ning], ven aquí. Le pedí a la cocina que prepare un poco de sopa para nutrir tu cuerpo. No te ves muy bien. Necesitas comer más.

Shen Hanxing estaba acostumbrada a ser la jefa en su vecindario. Estaba acostumbrada a organizar la vida de las personas a su alrededor y a cuidar cada uno de sus movimientos. También estaba acostumbrada a su dependencia de ella.