Ella No Es Tonta!

El dolor fue completamente bloqueado por el sistema. ¡Huanhuan se sintió inmediatamente renovada!

Aunque ya no le dolía, todavía estaba muy débil. Solo podía acostarse inmóvil en el suelo y mirar el cielo.

Se preguntó dónde habría ido Xue Ling.

Hablando del rey de Roma.

Xue Ling se acercó. Acababa de bañarse en el lago, y su cabello todavía estaba mojado. Cuando se acercó a Huanhuan, ella podía sentir el fresco vapor que emanaba de él.

Se veía mucho más delgado, y había un color azul-negruzco tenue en sus ojos.

Sus originalmente deslumbrantes ojos rojo sangre se habían apagado mucho.

Cuando vio que Huanhuan abría los ojos, se quedó ligeramente aturdido al principio, luego rió entre dientes.

—Sabía que solo estabas dormida. Mira, ¿acaso no estás despierta ahora? —dijo él.

Huanhuan estaba a punto de saludarlo cuando de repente se inclinó y la besó con fuerza.

¡Huanhuan estaba impactada!

Quería luchar y resistirse, pero su cuerpo estaba demasiado débil para moverse.