Capitulo 117- ¡Tripulación de Barbanegra lista para demoler Impel Down!

Por sugerencia de Karl, el grupo de Barbanegra abandonó las Islas Sabaody y abordó un gran barco en dirección a la prisión de Impel Down. 

En cuanto al final de la situación en el Archipiélago Sabaody , la Marina se encargará de la limpieza. 

En ese momento, era imposible para los piratas que observaron la batalla reconocer la verdadera identidad de los Piratas de Barbanegra. 

Solo Hancock con su fama de "Emperatriz pirata" fue reconocida. 

Esto también explica por qué la Marina no tomó medidas contra este grupo de personas. 

Se puede imaginar que cuando este grupo realmente vuelque el mar y sus identidades queden expuestas, ¡la reacción en cadena será de dinamita! 

Cuatro días y medio pasaron rápidamente. 

Antes de que comenzara la guerra, el olor a pólvora parecía comenzar a llenar lentamente la zona marítima... 

Bajo la influencia del Conquistador de Karl los piratas de Barbanegra no encontraron problemas con los Seakings del Calm Belt. 

Después de varios días de navegación sin prisa, en la madrugada del quinto día, el gran barco de los Piratas de Barbanegra finalmente llegó a las cercanías de Impel Down. 

El barco se ancló a treinta millas náuticas de Impel Down, esperando el momento adecuado para avanzar. 

Debo decir que el momento de partida que organizó Karl fue perfecto. 

¡Porque, en este momento, solo faltan doce horas para la ejecución pública de "Puño de Fuego" Ace! 

"¡Capitán, Primer Oficial! 

"¡Vi a los marines abordar el buque de guerra con "Puño de Fuego" Ace!" 

A las nueve de la mañana, la 'gaviota' en que se transformó Laffitte llegó velozmente desde la distancia. 

Cuando el barco estuvo vacío, Laffitte regresó a su forma humana, saltó a la cubierta, corrió frente a Karl y Barbanegra y les informó emocionado. 

¡Es el momento! 

"¡Vamos!" 

Finalmente llegó el momento. Con la orden de Karl y Barbanegra, el gran barco se dirigió rápidamente hacia Impel Down. 

"¿Usted es, Barbanegra el nuevo Oka Shichibukai?" 

En la entrada de la prisión de Impel Down, el director Magellan frunció el ceño y preguntó a los inesperados visitantes que tenía frente a él. 

"Así es." 

"Como ya lo sabes, no diré más. Tenemos prisa. ¡Líder, por favor, guíenos!" 

Siguiendo el consejo de Karl, Barbanegra fue directo al grano, ¡sin rodeos! 

"Desde que recibí la orden, ustedes son los invitados aquí y, naturalmente, podrán entrar" 

"Sin embargo, como alcaide todavía necesito decirle ciertas limitaciones." 

" 'Emperatriz Pirata' Boa Hancock, ¿qué están haciendo aquí? ¿Por qué vienen juntos? 

"La orden que recibí parece ser solo para la tripulación de Barbanegra..." 

Magellan, siendo muy cauteloso, sobre todo después de mirar a un invitado no invitado. 

Aunque el Almirante de Flota le había dado una orden previamente, era una gran coincidencia que llegaran en ese momento, ¿verdad? 

El personaje clave, el buque de guerra en el que se encontraba "Puño de Fuego" Ace, acababa de salir del puerto. 

Los escoltas de su grupo no habían tenido tiempo de regresar cuando el otro grupo llegó a la entrada. 

Sea como sea, parecía algo deliberado, como si intentaran evitarlo a propósito. 

Además de las personas que aparecieron, ¡había una fuerza adicional de Shichibukai! 

Esto hizo que Magellan tuviera un muy mal presentimiento en ese momento. 

Debes saber que los Shichibukai son muy arrogantes. Aunque son "colegas", no se someterán a nadie. 

¡No hablemos de cómo interactúan; lo mejor es que estos grupos se mantengan separados y no colaboren! 

"Magellan, no te equivoques, ¡ella no es tu prisionera!" 

"Hancock vino aquí a ejercer su derecho como Shichibukai, aunque no hubo aviso previo, ese no es el motivo de su 'interrogatorio'." 

Al ver que el rostro de Hancock se tornó frío, parecía estar al borde de una crisis. 

En ese momento, Karl se adelantó. 

Al ver la imponente figura de Karl, los hermosos ojos de la Reina Kuja se llenaron de corazones de admiración. 

"¡Señor Karl, es tan confiable y conmovedor pensar en mí!" 

Si no hubiera tanta gente presente, no hay duda de que Hancock se habría lanzado hacia Karl sin pensarlo. 

"Entonces, ¿por qué harías esto...?" 

Al escuchar la reprimenda de Karl, el rostro de Magellan se enrojeció, y su postura indicaba claramente que estaba avergonzado. 

Sin embargo, antes de que pudiera terminar sus palabras, la emperatriz, que estaba detrás de Karl, intervino. 

"¡Caminare en cualquier lugar que quiera, y no es tu turno de cuestionar mi elección de donde camino!" 

"¡¡¡Persona grosera!!!" 

¡La belleza junto a su actitud dominante de Hancock es tan fuerte que todos los carceleros y marineros presentes quedaron completamente petrificados! 

Ni siquiera el den den mushi se salvó... 

"¡Tú...!" 

¡Al ver esto, el rostro de Magellan se volvió completamente hosco! 

El Alcaide de la gran prisión submarina no pudo evitar pensar enojado: 

¿Me equivoque? ¿Acaso sabes dónde estás parada mujer? 

Cuando llegó a Impel Down, ni siquiera guardo el más mínimo respeto. 

¡Son tan arrogantes que no solo petrificaron a todos sus subordinados, sino que también fueron irrespetuosos con su persona! 

Es insoportable, ¡es demasiado! 

"Bueno, yo fui el que fui brusco". 

"De hecho, es su libertad caminar. No es algo que deba pedir. Como Shichibukai, la 'Emperatriz Pirata' naturalmente tiene el derecho de entrar en Impel Down." 

"Primero desata la petrificación de mis subordinados, yo te llevaré." 

 Al final Magellan se tragó su enojo y dijo mentalmente: lo aguanto... 

De ninguna manera, esta vez las acciones del Gobierno Mundial y de Marine están muy relacionadas, y no hay lugar para errores. 

Por teléfono, Sengoku recordó más de una vez que los nuevos Piratas de Barbanegra deberían tratar de no provocarlos tanto como fuera posible, y que no debían provocarse entre sí en este momento. 

Este grupo de personas jugará un papel importante en esta posible guerra. 

¡Aunque se resuelva más tarde! 

Aunque no entiendo por qué el Cuartel General de la Marina depende tanto de un pirata, esta es una orden del propio Almirante de Flota, y él la ha enfatizado muchas veces. ¿Cómo puede refutarla? 

Además, al escuchar las palabras de Sengoku, también estaba muy molesto con este grupo de personas... 

Pero hasta el Almirante de Flota lo aguantó, por tanto, Magellan piensa que también puede aguantarse 

"¡Hum!" 

Al ver que la actitud de la otra parte se suavizó, bajo el gesto de Karl, Hancock solo resopló, agitó la mano y liberó la petrificación de los prisioneros y los marines. 

Ustedes basura, ¡si son encarcelados personalmente los hare pasar un infierno! 

Al ver que sus hombres se recuperaban, Magallan maldijo por dentro y luego le pidió al carcelero que estaba detrás de él que sacara las esposas de piedra marina y se las pusiera a tripulación de Barbanegra. 

"Magallan, solo un aviso: no intentes desafiarme directamente". 

"¡Mi paciencia es limitada...!