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Capitulo 57. Karl un héroe que vende sueños a una ignorante emperatriz.

"No, señor Karl... Lo he considerado..." 

"Desde que subiste a este barco y mataste a ese tenryūbito frente a mis ojos, ya no debería ocultarte esto." 

"Cuando tenía doce años, fui secuestrada y vendida como esclava a los tenryūbitos..." 

Obviamente, la emperatriz no pudo resistir más la insistencia de Karl y comenzó a hablar sobre su oscuro y doloroso pasado. 

Para Karl, esta historia de la emperatriz es clara y directa, y solo la ha alentado a contarla personalmente. 

Si ella no revela su corazón de esta manera, ¿cómo podrá estar convencida completamente? 

Si no está plenamente convencida, ¿cómo podrá obtener la recompensa de la tarea que conmueve su corazón? 

¡El objetivo de Karl se ha cumplido! 

"No fue hasta que Fisher Tiger liberó a los esclavos de los tenryūbito , a mí y a mis dos hermanas, que logramos escapar." 

"Después de eso, vagué por el mar durante mucho tiempo, hasta que encontré a abuela Nyon, la cual nos rescató a mí y a mis hermanas menores, así es como surgieron los actuales Piratas Kuja." 

En estos momentos, ¿cómo puede la emperatriz comportarse aún como una reina? 

Sentada en el arrecife de la playa, la emperatriz se acurrucó, tirando de la capa blanca para cubrir su alto y delicado cuerpo. 

Este oscuro pasado es difícil de recordar, pero incluso un breve recuerdo avergüenza y asusta profundamente a la Emperatriz. 

Este oscuro pasado, ni hablar de recordarlo, pero si recuerdo un poco, ¡la emperatriz se sentirá extremadamente deprimida y temerosa! 

¡De ninguna manera, esa escoria tenryūbito consideran a todos los otros que no son de su 'raza' meras 'mascotas', done su trato es peor que un sirviente, todo eso es mostrado a sus invitados con torturas como una forma de entretenimiento.! 

¡Incluso, el poder de la fruta que poseían la emperatriz y sus dos hermanas en ese momento fue obligado a comer por los tenryūbitos para poder ver la actuación por diversión! 

"No temas más, Hancock. Ese tenryūbito ya está muerto, ¿qué hay que temer?" 

"Yo mismo lo corté, demostrando que no son los llamados dioses supremos." 

"Aunque no son como tú y yo, son simplemente cerdos arrogantes y moralmente corruptos que se creen superiores y pisotean a los demás." 

"Estos idiotas se han acostumbrado demasiado a su arrogancia. Ahora que hemos intervenido, ya no permitiremos que los tenryūbito actúen como quieran." 

Con palabras llenas de determinación, la emperatriz quedó sorprendida. 

Junto a la emperatriz, las palabras de Karl resonaron con fuerza y autoridad, como si estuviera declarando el fin de la impunidad de los nobles mundiales. 

En ese momento, la expresión de Karl era clara y decidida. 

"No te preocupes, en el futuro, me encargaré personalmente de esos tenryūbito , eliminaré la vergüenza y el miedo de tu corazón," prometió Karl con determinación. 

Mientras hablaba, Karl extendió su mano y la colocó suavemente sobre la cabeza de la Emperatriz. 

Al sentir el cálido contacto, la emperatriz experimentó una sensación reconfortante que nunca había sentido antes. 

"Nunca dudes, señor Karl. Todo lo que dices es creído incondicionalmente por mí," dijo la Emperatriz con gratitud, secando las lágrimas que asomaban en sus ojos. 

Su rostro se sonrojó ligeramente mientras se levantaba y tomaba el brazo derecho de Karl. 

Aunque la existencia de los tenryūbito aún la llenaba de temor, Karl había logrado calmarla en cierta medida. Ahora, ella confiaba en él y esperaba que cumpliera su promesa. 

La emperatriz nunca había imaginado que Karl haría esto por ella. 

Su corazón, que se estaba descongelando lentamente, se llenó de gratitud y admiración. 

Ya no es solo seguir ciegamente a Karl. 

"Muestra primero la 'Pezuña de Dragon Celestial'. Tal vez pueda ayudarte a deshacerte de ellas," 

Propuso Karl, guiando a la Emperatriz hacia la orilla alta de la playa. 

"¿Puedes realmente ayudar a la concubina a eliminar la marca de la vergüenza?" 

La emperatriz con asombro, mirando a Karl con una mezcla de esperanza e incredulidad. 

Con estas palabras, la emperatriz se sintió conmovida y sorprendida por la posibilidad de liberarse de la marca que la había atormentado durante tanto tiempo. 

La 'pezuña del Dragone Celestial' detrás de ella, también conocidos como la Marca del Esclavo, son la verdadera fuente de miedo dentro de ella. 

¿¡Estas cosas no se pueden borrar en una vida, prueba de que son esclavos!? 

Incluso el grupo pirata gyojin establecido por Fisher Tiger solo puede cambiar a la forma del sol sobre su base y no puede ser eliminado. 

¡En ese momento Karl le dijo que sí podía! ¿Cómo puede esto no ser impactante y crear esperanzas? 

"Si no lo intentas ¿cómo lo sabrás?" Al oír esto, Karl simplemente levantó las cejas y la condujo directamente a la jungla alta, luego se dio la vuelta y le hizo un gesto. 

"No te preocupes, deberías irte ahora mismo. De lo contrario, ¿cómo podré ayudarte?" 

Al ver esto, la Emperatriz, que todavía estaba aturdida, reaccionó repentinamente. Su rostro se volvió a ruborizar, extendiéndose hasta las raíces de sus orejas, mientras su corazón latía inquieto... 

¿Tan pronto llegarían al siguiente paso "franco y directo"? ¿Aún tendrían su primera vez en un lugar como este? 

(N/T: Diablos señorita) 

Sin embargo, la emperatriz comprendió la importancia del momento. Sin más rodeos, se volvió hacia él, desabrochó su vestido y dejó al descubierto su espalda suave, tan blanca como el jade, frente a Karl. 

"Intentémoslo, aunque no estoy segura de sí funcionará." 

Karl se quitó el guante de reparación que llevaba en la cintura, lo ajustó en su mano y presionó suavemente la enorme marca de la 'pezuña celestial' en la espalda de la emperatriz, activando la habilidad de su fruta del diablo para reparar. 

Karl tenía plena confianza en la capacidad de su guante para reparar. Había restaurado extremidades rotas y curado heridas mortales; ¿podría no sanar una simple quemadura? 

No lo decepcionó. 

Después de unos diez minutos, la emperatriz sintió una extraña sensación en su espalda. 

No pudo evitar murmurar en voz alta, en el silencio de aquel momento... 

"Hancock, a partir de ahora, ya no eres esclava de los llamados nobles mundiales. ¡Borre esta marca para ti!" 

La voz firme de Karl resonó y sacudió el corazón de la emperatriz. 

¿Realmente... tuvo éxito? 

¿Podría esta vergonzosa marca, que la había perseguido durante más de veinte años, haber sido finalmente borrada? 

"Señor Karl... Realmente no sé cómo agradecerte," dijo la emperatriz emocionada, lágrimas calientes en sus ojos mientras abrazaba el cuello de un aturdido Karl. 

Su gesto audaz tomó a Karl por sorpresa. Aunque desconcertado, sintió la brisa perfumada que la rodeaba. 

No solo eso, una sensación abultada y suave lo ataco sin previo aviso. 

Un poco aturdido, Karl reaccionó: ¡qué movimiento tan audaz había hecho Hancock! 

Dadas las circunstancias, ¿era posible que una Diosa le hubiera dado el coraje necesario? 

"Hancock, ¿estás... llorando?" 

Maldición... ¿Anesan así de repente? ¿Estás llorando? Este no era el guion 

Antes de que pudiera terminar la pregunta, Karl sintió una leve humedad en su camisa, claramente impregnada de lágrimas. 

"No hice mucho, ¿crees que es apropiado para ti?" 

Karl se quedó sin palabras ante la situación, ¿era correcto que viniera y tocara este tema tan delicado? 

Incluso si borré la 'pezuña celestial' para ti, ¿no podrías... apreciarlo? ¿Por qué no puedes devolver 'el regalo' con otra cosa que no sea llorar? 

"Esta reina. de verdad... no sé cómo agradecerte, Karl." 

"Esta marca... es la mayor pesadilla de mi vida..." 

Justo cuando Karl no había terminado de reflexionar internamente, los sollozos entrecortados de Hancock llegaron a sus oídos. 

Reiterando su gratitud hacia Karl, las lágrimas no cesaban, empapando rápidamente la capa que llevaba puesta. 

La 'pezuña del dragón celestial' es el mayor temor en el corazon de esta reina, como alguien que ha vivido un momento sacado del infierno mismo. 

No importa cuánto intente olvidar, esta experiencia no siempre se desvanecerá lentamente con el tiempo. 

Pero esta marca de esclavo nunca desaparecerá. 

Esta cicatriz siempre le recordará el dolor insoportable que ha soportado. 

Este tipo de tormento ha llenado sus días durante años, pero de repente alguien se ha ofrecido para ayudar a limpiar este recuerdo insoportable... 

La clave de esto, y lo que siempre ha intrigado a la emperatriz, es cómo este gesto puede consolarla. 

Lleno de pesar, en este momento, todo se derrumba. 

Mirando a la emperatriz ante él, Karl, aunque generalmente tranquilo y compuesto, no pudo evitar suspirar suavemente. 

Raramente, este chico sentía una punzada de tristeza en su corazón. 

Incluso conociendo los antecedentes de la emperatriz, como alguien que es un transmigrante, escucharla llorar en persona le causaba una profunda angustia... 

"No digas más, solo recuerda lo que yo dije hoy, un día te llevaré a eliminar esa basura y eliminaré todos los miedos de tu corazón." 

"Así que puedes dejar atrás estos recuerdos y nunca más enfrentarás experiencias dolorosas en el futuro." 

Mientras hablaba, la mano de Karl descansaba suavemente sobre el hombro de la emperatriz, acariciándola con ternura, deseando sacarla de las sombras lo antes posible. 

Su declaración fue como una pequeña poción de "Amor", deteniendo el dolor y trayendo consuelo. 

Pero en ese momento, Karl inclinó su cabeza junto a su oreja, una sonrisa sutil apareció en su rostro y dijo suavemente: "Además, ¿tan impaciente eres?" 

La súbita cambio de enfoque hizo que la emperatriz, que acababa de sumergirse profundamente en la emoción, se sintiera repentinamente aturdida. 

En su rostro delicado con rastros de lágrimas, su expresión pasó instantáneamente a una de confusión. 

No, algo está mal con esta situación. ¿Por qué sigo sintiendo una repentina interrupción? ¿No deberíamos estar avanzando en otro camino? 

La emperatriz aún no había procesado completamente lo que acababa de pasar. 

Pero el calor de la mano en su hombro la sacó de su ensimismamiento, y de repente se dio cuenta de algo, quedando momentáneamente atónita. 

"¿Qué acaba de suceder?" 

El repentino giro de los acontecimientos la dejó sin habla, sintiendo una confusión que la hizo entrar en pánico por un momento. 

Su rostro se sonrojó intensamente, algunas hebras de humo blanco asomando por encima de su cabeza. 

Era como si su mente estuviera en ebullición. 

Y las palabras de Karl seguían resonando en sus oídos. 

"¿Tan impaciente? ¿Cómo es posible?" 

¡Qué desastre! 

A pesar de todo, agradece completamente el cuidado de Karl, incluso si la situación la volvió loca. 

"No... Señor Karl, por favor no me malinterpretes, yo no soy..." 

¡No soy ese tipo de persona! 

Temerosa de que su imagen quedara manchada en el corazón de Karl y de que él malinterpretara que ella era una persona 'tan facil'. 

La emperatriz levantó rápidamente la cabeza, extendió la mano para apartarlo, ¡y estaba a punto de 'escapar'! 

Pero en ese momento, se dio cuenta de que no podía moverse en absoluto. 

"...¿Señor Karl?" 

La reina, aún aturdida, levantó la cabeza y se encontró con la sonrisa de Karl. 

"¿A dónde más quieres ir, Hancock?" 

Karl parecía bromear, mirando a la hermosa mujer frente a él con una sonrisa. Parecía que esta jugada solo había sido para aligerar el ambiente. 

Y funcionó; obligó a la emperatriz a salir de sus profundas emociones. El dolor y el miedo en su corazón se disiparon por razones desconocidas. 

"...Esta reina entiende los esfuerzos de señor Karl." 

"No me iré a ninguna parte, pero... ¿podrías soltarme primero?" 

La reina intentó hablar, pero la situación actual no parecía adecuada para una conversación tan íntima, ¡era demasiado embarazoso! 

"Karl... esta reina... Mi cuerpo... ¡Oh!" 

Estaba a punto de continuar, pero entonces el rostro cercano de Karl se amplió rápidamente, bloqueando cualquier palabra que ella quisiera decir. 

¡Se sobresalto! 

La Emperatriz sintió como si un trueno hubiera estallado en su mente, dejándola sin palabras y con los ojos bien abiertos. 

"Señor Karl, ¿qué estás haciendo?" 

¡¿Podría ser esto la legendaria... propuesta de matrimonio?! 

"Karl....una propuesta de matrimonio para esta reina... ¡Dios!" 

¡Es tan repentino! 

En ese momento, los sentidos de la emperatriz estaban casi paralizados y su mente era un caos. 

¿Cómo podía continuar de la misma manera después de haber llorado como una flor bajo la lluvia? 

Aunque estaba sin palabras, las palabras "propuesta de matrimonio" se repetían en su mente, como si esas fueran las únicas palabras que conociera en ese momento. 

"Tsk, eso es realmente...". 

Mirando el bello rostro que tenía cerca, la expresión cambió rápidamente, Karl se quedó sin palabras, obviamente, sabía lo que ella estaba pensando, sin mediar más beso a la emperatriz. 

Después de un largo tiempo, viendo que la emperatriz estaba a punto de asfixiarse, Karl la soltó, dándole la oportunidad de respirar. 

Oliendo la fragancia que salía constantemente de la punta de su nariz, Karl sonrió, sintiéndose bastante satisfecho en su corazón. 

¡De ninguna manera, quién hace que estos labios sean demasiado tentadores, es ahora el momento, el juego previo tiene que comenzar! 

"Ka...ka... Sr. Karl, deje... deje que la reina... esta reina tome un descanso..." 

Finalmente tuvo la oportunidad de hablar, la emperatriz se sonrojó de vergüenza y siguió jugueteando con sus manos frente a ella. 

Mientras tartamudeaba, giró rápidamente la cabeza e intentó inclinarse mirando a otro lado sin atreverse a mirar a Karl directamente a los ojos. 

 ¿Despacio? 

Al oír esto, Karl lo ignoró. El tren estaba a medio camino. ¿Me dijiste que me bajara del tren? Los juegos previos ya comenzaron, así que ¿por qué no me lo dices lentamente? 

"Shh, silencio..." 

Karl extendió el dedo índice de su mano izquierda y tocó la pequeña boca de la Emperatriz. 

Esto la dejó un poco confusa, pero al momento siguiente, ¡sintió que su cuerpo se vaciaba de repente! 

¡En la exclamación de la emperatriz, Karl la tomo en un carruaje de princesa, luego la levantó las piernas y caminó hacia el bosque frente a él! 

"Hasta este punto has tomado la iniciativa, ¿parece que es mi turno?" 

En el bosque, Karl se quitó la capa y la arrojó al suelo, para luego colocar sobre ella a la todavía desconcertada emperatriz. 

Al observar la confusa pero tierna mirada natural de la emperatriz frente a ella, las comisuras de la boca de Karl no pudieron evitar que se contrajeran varias veces. 

No mucho después, desde este pequeño bosque, se escucharon ráfagas de diferentes sonidos de dos bestias en celo... 

[Se detectó que el Host curó con éxito la herida interna de la emperatriz y completó un 'acto heroico' que conquistó por completo su corazón. Las condiciones de la misión se cumplieron con éxito.] 

[Recompensas de la misión: ¡Haki de Observación Avanzado nivel Enel] 

[¡El Host debe pedir la recompensa para ser cargada en el Host!] 

Aproximadamente a las cuatro de la mañana, el cielo había comenzado a iluminarse levemente y la noche se estaba desvaneciendo poco a poco. 

En ese momento, en la mente de Karl, de repente sonó el sonido de aviso del sistema. 

"¡Recibe y usa!" 

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