Mezcla de Hierbas Venenosas

Johann sonrió amablemente a Leric. Sabía que en este momento tenía que hacerse amigo de este joven genio. A la edad de veintinueve años, ya era un Alquimista de Nivel 4 y, además, también mostraba un refinado talento en la forja. Sólo que estaba bastante asombrado por la técnica de forja de Leric. Era muy diferente a lo que había visto de otros Herreros. Su habilidad parecía brillante y él parecía estar a gusto mientras trabajaba.

—Realmente me has abierto los ojos, joven amigo. Además de ser Alquimista, también eres Herrero. ¡Respeto! —Johann alabó de todo corazón. Este chico era el genio más monstruoso que jamás había conocido. Incluso el príncipe heredero, conocido como el genio más brillante de los últimos cien años, podría no desarrollar tanto talento como Aethelwolf.

El príncipe heredero del Imperio Leone, el Príncipe Christopher Leone, ahora tiene ocho años. Mostró un potencial aterrador que asombró a todo el Imperio Leone y algunas de sus potencias vecinas. ¡Ahora era un Esper de Nivel 1 en su máximo potencial y también un Alquimista de Nivel 1 recién ascendido!

Johann suspiró en su corazón mientras miraba el rostro de Leric. ¿De dónde vino este joven? Se preguntó.

Leric se rió entre dientes y negó con la cabeza humildemente. —Es solo una habilidad que aprendí cuando estaba en la naturaleza. De todos modos, Señor Johann, hice estas herramientas solo para usted.

Johann mostró una mirada desconcertada y luego un momento después, pareció haber entendido algo. —Lo viste, ¿no? —preguntó con voz tranquila.

Leric asintió con la cabeza. —Cuando te desmayaste antes, revisé tu pulso y noté que algo está mal con tu respiración. Hay un parásito durmiendo dentro de tu corazón. Tengo una manera de sacarlo.

Sus palabras fueron como una bomba que de repente estalló, poniendo a Johann extremadamente agitado. —¿Estás diciendo la verdad? ¿Realmente puedes sacarlo? —El cuerpo del anciano temblaba mientras agarraba los hombros de Leric. El parásito había plagado su cuerpo durante muchos años, pero nadie tenía idea de cómo sacarlo. ¿Cómo podría mantener la calma después de escuchar sus palabras?

—Qué pobre anciano. —Leric pensó al ver lo agitado que estaba Johann.

```

—Por supuesto. Para decirte la verdad, ¡estoy cien por ciento seguro de que puedo sacarlo! —Leric mostró una sonrisa radiante al anciano.

¿Qué dijo? ¿Cien por ciento? ¡Una locura!

Anna y Johann miraron a Leric profundamente. Si no fuera porque este chico era un Alquimista de Nivel 4, habrían pensado que era un lunático. Era un parásito sobre el que incluso el Señor Karman se sentía impotente, pero ahora este chico les decía que podía sacarlo con una certeza del cien por ciento.

Viendo su expresión dudosa, Leric no se ofendió. Sabía que este mundo estaba muy atrasado en términos de avance tecnológico en comparación con el mundo en su vida anterior. Podrían tener muchas plantas espirituales mágicas y frutas mágicas aquí, pero la mayoría de ellos no sabía cómo maximizar adecuadamente las propiedades medicinales de estos excelentes materiales.

—Se atrevió a decir que estaba cien por ciento seguro porque confiaba en sus habilidades técnicas y también debido a la Pantalla de Estado —dijo Leric—. Sé que esto puede sonar una locura, pero si me das una oportunidad, lo demostraré.

Johann miró el rostro sincero de Leric antes de responder.

—En ese caso, la vida de este anciano está en tus manos, joven amigo —respondió Johann.

Incluso si Aethelwolf fallara, Johann sabía que ya no le quedaba mucho tiempo. Podría también dejar su destino en manos de este genio absoluto. Tal vez, solo tal vez, él sería capaz de sacar el parásito.

Anna quería decir algo, pero eligió permanecer en silencio cuando vio la expresión resuelta de su abuelo.

Viendo que el anciano había accedido, Leric le sonrió. Luego movió su mirada hacia Anna y dijo.

—Señorita Anna, necesitaré cuatro hierbas para esta operación: un diente de diez años de Aster Carnívoro, la hoja de una Caléndula Venenosa, una flor de Camelia Púrpura y la semilla de una Solanácea Llameante.

Anna escuchó atentamente sus palabras y asintió con la cabeza después de repetir las cuatro hierbas en su mente, pero se quedó estupefacta porque todas esas hierbas eran venenosas por naturaleza. No pudo evitar mirar a su abuelo solo para verlo asentir con la cabeza. Al ver esto, solo pudo morder la bala.

```

```

Mientras Anna conseguía las hierbas, Leric agarró sus herramientas y ayudó a Johann a levantarse. Luego, le devolvió su bastón al anciano.

—Señor Johann, ¿tiene una habitación que podamos usar para la operación? —preguntó Leric.

—¡Oh, qué tonto soy! ¡Realmente me olvidé de esto! ¡Ven! Sígueme, joven amigo. —Johann lo arrastró a una habitación que estaba llena del olor de las hierbas. Había todo tipo de libros sobre medicina y hierbas dentro de la habitación. Por lo que parece, Johann nunca se dio por vencido en encontrar una manera de sacar el parásito de su corazón.

Pronto, Anna llegó a la habitación con cuatro cajas de jade. Dentro de esas cajas estaban las hierbas que Leric había mencionado antes. También trajo las hierbas que Leric había pedido cuando vino a la tienda.

—Señor Aethelwolf, dentro de estas cajas de jade están las hierbas que necesita para la operación. Y esta caja grande es su pedido reciente —dijo Anna.

Leric agarró la caja grande y la colocó dentro de su espacio de almacenamiento.

—Gracias, señorita Anna —luego miró a Johann y dijo—. Comencemos.

Johann se acostó nerviosamente en la cama. Estaba lleno de anticipación y ansiedad por la operación.

—Tan solo quédate ahí por ahora, señor Johann. Primero prepararé las hierbas. Puede que te preguntes por qué le dije a la señorita Anna que recolectara estas cuatro hierbas venenosas. Déjame contarte el motivo —Leric abrió las cajas de jade una por una mientras explicaba su razón para pedir las hierbas.

Johann y Anna no parpadearon al escucharlo.

—El parásito en tu cuerpo tiene un poder de absorción muy fuerte. No puedo sacarlo si todavía está vivo porque hay una alta probabilidad de que despierte. Si despierta, el parásito comenzará inmediatamente a absorber la vitalidad de la sangre del señor Johann, lo cual es fatal en su condición actual. Para evitar que esto suceda, ¡el parásito debe ser eliminado de un golpe! —explicó Leric con determinación.

—¿Pero no dañaría el veneno también el corazón del abuelo? —Anna preguntó mientras miraba a Leric, quien estaba moliendo las cuatro hierbas venenosas dentro de un vaso de precipitados.

Leric sonrió mientras le respondía.

—Ocurrirá algo mágico si mezclamos estas cuatro hierbas y una cantidad adecuada de esencia mundial líquida —y con esas palabras, dio inicio a su trabajo.

```

```

Anna e incluso Johann, que era un Alquimista de Nivel 3, estaban confundidos.

Las cuatro hierbas eran de alguna manera similares a las cuatro flores en su vida pasada. ¡Él sabía todo sobre ellas! Aunque no estaba seguro si las hierbas de este mundo tenía propiedades similares a las de su vida pasada, en el momento en que tocó las hierbas, su presentimiento le dijo que era posible.

No estaba preocupado de que esto fallara ya que todavía tenía algunas contramedidas en caso de que algo inesperado sucediera.

—Se creará una solución venenosa, pero con la adición de mi esencia mundial líquida, ¡la letalidad del veneno hacia el cuerpo humano será eliminada! —Leric comenzó a verter su esencia mundial dentro del vaso de precipitados y la convirtió en forma líquida usando su habilidad recién aprendida.

—Has aprendido la habilidad [Manipulación de la Esencia del Mundo] —Johann y Anna observaron cómo Leric convertía casualmente la esencia mundial en líquido en solo unos segundos. No podían creer lo que estaban viendo.

Johann también podía hacer lo mismo, ¡pero no sería capaz de manipular la esencia mundial tan hábilmente como lo hizo Leric!

Después de licuar su esencia mundial, Leric sacó una pequeña varilla de metal que parecía un agitador de bebidas. Luego removió la mezcla con la varilla de metal y se detuvo cuando estaba en la consistencia perfecta.

La mezcla resultante fue un líquido púrpura oscuro espeluznante, con una apariencia increíblemente tétrica.

—Bien. Está hecho. Señor Johann, comencemos la operación —dijo Leric sonriendo al anciano, pero Johann estaba aterrorizado al mirar a Leric y el líquido púrpura oscuro dentro del vaso de precipitados.

«Buen Dios todopoderoso, por favor ayúdame a sobrevivir a esta catástrofe» —el anciano rezó en su corazón.

```