Un intento fallido de chantaje

Cuando Alex lo pensó, lo que Dan le estaba ofreciendo no era un mal trato. Claro que no podía ser más violento en la jaula. Pero ¿traer de vuelta los torneos significaba luchar más de una vez por noche? Eso sonaba entretenido de una manera muy diferente. Y por esto, cuanto más lo pensaba, más le parecía que era un buen trato.

Después de algún tiempo, Alex finalmente asintió con la cabeza y aceptó los términos de Dan. Aunque agregó una contrapropuesta por su parte.

—Es una buena oferta. No te voy a mentir, muy tentadora. Sin embargo, aún necesitas endulzar la parte, ¿entiendes? —preguntó Alex.

¿Endulzar la parte? ¿Qué más quería este maníaco? Había ofrecido traer de vuelta los torneos para que el loco pudiera pelear más de una vez por noche. ¿Y todavía quería más? ¿Qué demonios estaba planeando? Dan se frustraba cada vez más con la negativa de Alex a firmar el nuevo contrato.