Llámame, Jie

FangSu estaba actualmente en estado de shock. Zhang Junjie acababa de decirle que tenía novia y ahora le estaba pidiendo que fuera su novia; ella no parecía aclarar las cosas.

Zhang Junjie la vio mirándolo como si hubiera perdido la razón y sonrió. —SuSu, siempre te he considerado mi novia, pero es mi culpa no habértelo pedido oficialmente, y esa es la razón por la que lo estoy haciendo ahora. Salgamos juntos.

«SuSu... ¿acaba de llamarme así?», pensó FangSu.

—Tú... ¿tú en serio quieres decir lo que dices? ¿Quieres que sea tu novia? —preguntó FangSu con una felicidad oculta.

—Ya te considero mi novia, así que solo te estoy pidiendo que cumplas con las formalidades. ¿Quieres ser mi novia? —dijo Zhang Junjie con una sonrisa. Le encantaba la expresión facial de FangSu.

—¡Claro que sí! Seré tu novia —respondió FangSu con una gran sonrisa en su rostro que no podía ocultar lo feliz que estaba.