—Anthony —Talia llamó su nombre completo, haciéndolo sobresaltarse en su lugar—. ¿Estás de acuerdo con esto?
Tony no tenía idea de qué estaba hablando Talia. Los últimos minutos fueron un completo desastre y Tony se preguntaba si ahora comenzarían una guerra. Ah, si eso sucede, Kalina lo culpará porque a Kalina realmente le gustan Talia y Maya y él quedará atrapado entre los deseos de su padre y todo lo demás, como muchas veces antes.
—¿De acuerdo, con qué? —preguntó Tony cautelosamente.
—¿Estás de acuerdo con permitir que tu padre lastime a su gente y a su familia?
Tony miró nerviosamente hacia Alfa Magnus, confirmando que su padre no se movió un músculo ante esta provocación, aunque sus ojos ardían de ira y... ¿era eso miedo?
—¿Qué puedo hacer? —preguntó Tony con desánimo—. Él es el Alfa. Su palabra es ley en esta manada y a menos que planeemos una sublevación, un asesinato o una guerra, así se mantendrá.
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