LAS CRONICAS DE SAKURA HIROSHI VOLUMEN I: EL DESAFIO DE ARISTOTELES
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El camino a la redención se da en un solo paso, si quieres saber cómo Sakura se convirtió en una agente de la ley o se enamoró de Knight Mask y qué relación tiene con los Asesinos de Alquiler. Acompáñame a conocer esta historia. Nota: Este arco se desarrolla entre los capítulos 2 y 3 del Volumen I Espías con Máscaras.
Advertencia: "Esta aventura inicia inmediatamente después de los eventos narrados en el capítulo II del volumen I de la saga Espías con Máscaras: La Noche de la Antorcha Humana".
Sakura observa escondida en un callejón directamente a las oficinas de D.I.E.F. Hablar a los agentes y su Comandante sobre la última misión en la que se involucró.
—No escucho bien lo que dicen, tampoco puedo leer sus labios. Bueno ese no es mi asunto ahora me retiraré. No entiendo por qué quería salvarme jamás entenderé a los occidentales.
En ese preciso momento, un vagabundo que pasaba por ahí, de piel bronceada, cara demacrada y arrugada con una barba larga y viste pantalón roto y sucio de color beige, usa camisa negra y chaqueta sucia de color verde oscuro con capucha. Enciende un bote de basura y lo utiliza para calentarse. Esta acción asusta a Sakura ya que el trauma que Prometeo le hizo pasar provocó que con el tiempo desarrollara: "Pirofobia". El vagabundo trata de acercase a ella, pero la kunoichi trata de alejarse de él y en su intento de huir, se tropieza con un bote de basura y cae al suelo. El vagabundo se acerca y solo se limita a ofrecerle una mano para ayudarla a levantarse.
—Tranquila, no voy a hacerte daño.
Dice el vagabundo
—Tú ¿un pobre anciano? ¿un pobre diablo como tú? no me hagas reír.
—Te sientes bien.
—¡Aléjate de mí! si no quieres que te haga daño.
—De acuerdo, sólo quería ayudar.
Mientras tanto, un par de hombres desde otro lugar del callejón empiezan a hablar:
—Ese vagabundo, me es familiar.
Dice el hombre de cabello largo color verde recogido con una cola de caballo, piel morena y viste un juego de pantalón y camisa sin mangas de color negro.
—Déjalo, no es nuestro blanco, sólo la mujer entendido.
Dice un hombre de contextura gruesa, cabello churco y desordenado, tuerto del ojo izquierdo y utiliza un traje de batalla que se compone de un chaleco y uniforme de color verde.
—De acuerdo no tienes que enojarte.
—Si no cumplimos esta misión, El Cardenal nos volará la cabeza.
La Kunoichi recorre los callejones de la ciudad, hasta que una bomba de humo le estalla en la cara.
—Pero, qué demonios ocurre aquí.
—Acaso te atreviste a olvidarnos.
—Por supuesto que no pero no me explico por qué mis antiguos maestros: Cazador y Gorgón. Están aquí.
—Veo que, si nos recuerdas, entonces debes recordar que tan poderosos somos.
—Si vienes con nosotros por las buenas seguramente evitarás una paliza. El Cardenal desea que vuelvas a trabajar con nosotros.
—Y piensan que les haré caso, por un motivo me fui y no deseo volver.
—Bueno es una lástima ya que El Cardenal nos dio la orden de eliminarte si te negabas.
—Eso era lo que esperaba: Danza de Botones de Cerezo.
Y dando giros de talón se acerca rápidamente a sus enemigos para atacarlos no obstante ambos enemigos consiguen eludir su ataque.
—Pero ¿Cómo?
—Acaso se te olvidó que tengo la habilidad de leer la mente ex - discípula recuerda que puedo anticipar tus movimientos cuándo lo desee.
Y en un descuido es atrapada por Gorgón que le aplica un abrazo de Oso.
—Te has descuidado con los años niña tonta debiste haber aceptado nuestra oferta, pero no importa servirás como adorno para el jardín privado del cardenal.
Y de su ojo derecho sale un rayo de color verde y transforma a la Kunoichi en una estatua de piedra.
—Nos ocasionó muchos problemas.
—Lo importante es que cumplimos con nuestra misión, ahora debemos encontrarnos con nuestro jefe para que le informe al Cardenal de nuestra hazaña.
—Me temo que no puedo permitirlo Cazador.
Y tú ¿quién eres?
—Es el vagabundo que vimos junto a Sakura, sabía que se trataba de alguien sospechoso.
—Debiste haberle hecho caso a tu compañero, y por su ingenuidad ambos irán al infierno.
Y el vagabundo se transforma revelando ser: "El Comepecados".
FIN
