Es hora de terminarlo!

En este momento.

El teléfono de Yun Feng sonó.

Ella contestó rápidamente la llamada.

Después de la llamada...

—Rey Supresor del Sur, justo ahora, ¡las cámaras de comercio de las diferentes ciudades en el sur también han empezado a pelear! —dijo apresuradamente.

—¿Qué está pasando?

El Rey Supresor del Sur frunció el ceño y preguntó.

—Se dice que los presidentes de esas cámaras de comercio ya se habían unido a Nie Changkong desde hace tiempo. Ahora que Nie Changkong está iniciando una guerra contra nosotros, ¡esos tipos no pueden esperar para saltar al ruedo! —Yun Feng dijo.

—Malditos, ¡todos son traidores!

—¿Esos tipos creen que Nie Changkong definitivamente ganará?

—El ganador final de esta batalla seremos definitivamente nosotros. ¡Esos tipos lamentarán su elección!

Los diversos Reyes de la Batalla estaban furiosos. La batalla acababa de comenzar, pero ya habían aparecido traidores. Esto los hizo enojar mucho.