La batalla (1)

—Sr. Hemos estado dando vueltas por la ciudad durante un rato. ¿Se le olvidó el camino? —preguntó el conductor.

—¡Sí, olvidé que podía deshacerme de ti! —Puso la punta de su arma en el asiento del hombre desde atrás y lanzó una bala en su corazón.

Una vez que el conductor murió, Hwang Min se inclinó hacia adelante y tomó el volante. Detuvo el auto, sacó al conductor y se subió al asiento e hizo su camino hacia la Villa Presidencial.

Los hombres de Maverick bloqueaban todas las rutas hacia la Villa Presidencial y el aeropuerto, pero no tenían idea de que Hwang Min había escapado por una salida de emergencia que el Presidente había construido en caso de que alguna vez necesitara escapar.

Aunque los hombres de Maverick esperaron hasta el amanecer, Hwang Min no apareció.

Mientras tanto, el hombre podía verse con el Presidente, planeando cuál sería su próximo movimiento.