Capítulo 24: Alexandria, comienzan las negociaciones.

Fue un viaje de 10 horas para llegar a Washington desde Atlanta, durante todo el camino todo estuvo muy pacifico, solo con uno u otro caminante que había que matar de vez en cuando.

Era algo inquietante, se suponía que debía ser una vía difícil, pero la falta de caminantes solo quería decir una cosa.

Se estaban reuniendo en algún lugar, porque es cierto que, en un principio, todos los caminantes se concentraban en las capitales y ciudades, donde había una gran concentración de ruido y gente.

Pero ahora, con las ciudades habiendo sido convertidas en cementerios, con una cantidad mínima de sobrevivientes, los caminantes comenzaron a abandonar las ciudades, en busca de comida.

El camión militar se encontraba manejando por las vías que rodeaban Washington, mientras era seguido por el camión de carga.

Las planicies eran verdes, los arboles ya mostraban verde normal en las hojas, las carreteras por algún motivo se veían más desgastadas, sorprendentemente, por algún motivo esa es una de las cosas que se deteriora más rápido.

Al menos eso fue lo que pensó Kai, mientras sentía la brisa golpeando contra su cara, moviendo su cabello, desacomodándolo un poco.

"¡Kai! ¡Lo encontramos!" La voz de Rick rebotó en los interiores del camión, esto hizo que todos levantaran la lona que cubría la parte trasera del camión para cubrirse del sol.

Una sonrisa se formó en los labios de Kai, luego de que miró el objetivo de su viaje.

A unos 30 metros, se alzaba la comunidad de Alexandria.

Rodeada por muros hechos de laminas metálicas, dentro había una comunidad "soñada" por así decirlo.

Con una buena cantidad de casas, vegetación, un molino, y paneles solares, junto con pozos de agua.

Pero eso era todo, no había nadie montado ninguna clase de guardia.

Excepto por un hombre que estaba sentado en una silla, en una pequeña torre cerca de la entrada.

Que no los notó, hasta que estuvieron muy cerca de la entrada, y el camión se detuvo en frente de la puerta corrediza que era la única entrada a la comunidad en frente de ellos.

El hombre al verlos, habló ansioso a una radio que tenía.

Kai por pura curiosidad, miró las reacciones de parte de su grupo, después de todo, era su primer contacto con una comunidad que se suponía que no era hostil.

Pero todos estaban frunciendo el ceño, la verdad es que no les gustaba lo que veían, después de todo, han vivido todo este tiempo en EDEN.

Este lugar parecía un basurero.

"¿Cómo pueden dormir con esos muros tan débiles?" Daryl preguntó disgustado, ya se había imaginado como podría entrar fácilmente a la comunidad sin ser descubierto.

"Su vigilancia es una mierda…" Sorprendentemente eso vino de Maggie, quien miraba el lugar con una cara fría.

Y todos tenían opiniones parecidas, incluso el siempre amable Glenn.

La situación era muy irónica, en la historia original, cuando ellos llegaron hasta este lugar luego de vagar por unos meses en la carretera, vieron este lugar como el paraíso.

Ahora que vivían en un paraíso, estos lugares eran una mierda.

Y eso que no han visto el reino, que un futuro, será el primero en caer en unos años cuando la estructura comience a venirse abajo.

En unos momentos todos se bajaron, tenían sus armas en alto, en caso de cualquier respuesta hostil de parte de Alexandria.

Kai quería decirles que no debían preocuparse, después de todo, tenían sus armas encerradas bajo candado.

Pero no podía explicar de donde obtuvo la información, ya que ni siquiera la habilidad de observar, daría una información tan importante como esa.

Al final no los detuvo, ya que los había entrenado de esta manera, cualquier sobreviviente era hostil hasta que se demostrara lo contrario.

Una forma un poco cruel de vivir, pero necesaria para sobrevivir.

Luego de unos minutos, sonó un clic que provenía desde el otro lado de la puerta gigante de Alexandria, eran el golpeteo de cadenas que se estaban moviendo, y golpeándose contra las paredes cercanas.

Unos momentos después, la puerta se abrió hasta la mitad, mientras hacía un ruido estridente mientras se abría.

A esa puerta le faltaba una buena cantidad de grasa, sino llamaría a todos los caminantes en la zona.

Un grupo de personas salió caminando de Alexandria, y no estaban armados…

La incredulidad recorrió las mentes de todo el grupo de EDEN a excepción de Kai.

¿Qué demonios pasaba por las mentes de estas personas? No solo se mostraron ante extraños, también estaban completamente desarmados.

Pero aun así no bajaron sus armas, ¿Quién sabe si solo estaban fingiendo y luego los atacan cuando se confíen?

El grupo de Alexandria al ver que estaban armados y en guardia contra ellos, se asustaron, pero la mujer que lideraba el grupo se calmó rápidamente, y levantó las manos en señal de rendición e incito a todos los demás que hicieran lo mismo.

Si los quisieran muertos, podrían haberles disparado apenas salieron por la puerta, y no esperar hasta que se acercaran, eso fue lo que pensó ella.

"¡Armas abajo!" Todas las armas bajaron sus cañones cuando la voz de Kai sonó.

Kai caminó hasta que se encontró en frente de una pareja de ancianos.

La mujer aparentaba unos 60 años, cabello castaño liso hasta los hombros, ojos azules, piel blanca. Vestida con un pantalón largo negro profesional, con una camisa de color azul claro de botones, y con tacones.

A su lado había un hombre, una persona mayor caucásica de aproximadamente 60 años de edad, de cabello gris y ojos azules el cual usaba unos grandes anteojos de marco negro. Era un hombre alto y formal el cual poseía una actitud serena y confiada. Vestía un pantalón holgado marrón, una camisa azul de botones, y encima de esta tenía un suéter de lana color marrón claro.

Estos al ver a Kai, que parecía ser el líder del grupo, hablaron de inmediato.

"Bienvenidos a Alexandria, mi nombre es Deanna Monroe, este es mi esposo Reg Monroe, somos quienes dirigimos esta hermosa comunidad" Deanna se presentó con confianza, y siendo muy elocuente en su forma de hablar.

Denotaba que era una mujer que se desenvolvía muy bien con las palabras.

"Un placer conocerlos, mi nombre es Kai Santos, y soy el líder de EDEN que se encuentra ubicado en Atlanta" Kai tenía una sonrisa mientras extendía su mano para un apretón en forma de saludo.

Deanna y Reg no se negaron, y correspondieron el saludo de Kai rápidamente.

Pero ambos se extrañaron, no sabían que era EDEN.

"Disculpa mi ignorancia, señor Santos, ¿Qué es EDEN?" Deanna estuvo envuelta en la política, ella conocía muy bien muchas organizaciones importantes, pero nunca había escuchado de una que se llamara EDEN.

"EDEN es un paraíso en el fin del mundo, contamos con murallas altas y gruesas, electricidad, agua potable, cultivos y ganadería a escala masiva, muchas armas, y sobre todo, medicina milagrosa" Kai explicó todo de forma muy elocuente, lo que sorprendió a Deanna y Reg, ya que no sabían de un lugar así.

"Podemos hablar en mi oficina, ¿No le gustaría?" Deanna ofreció, y Kai no se negó.

Hizo una señal con su mano para que metieran el camión dentro, ya era hora de negociar.

Deanna detuvo a su hijo Spencer que se acercó, ella ya supo que quería hacer, decirles que no debían entrar con armas, pero Deanna no era una mujer tonta.

En la política, no llegas lejos si no eres capaz de leer las situaciones que se te presentan.

Algo en su interior le decía que no debía llevarse mal con Kai, llámalo intuición femenina, y planeaba seguirla.

Ella observó bien a Kai y cada uno de los que integraban su grupo, todos los hombres y las mujeres se veían fuertes, bien alimentados, bien descansados, y muy bien entrenados.

Después de todo, todos los que estaban con Kai, habían pasado por un entrenamiento duro que no se detenía, excepto por Michonne.

Rick y los demás ya no parecían débiles para nada, incluso habían ganado musculo, lo que les daba a los hombres en su mayoría una apariencia más atlética, y a las chicas, también.

La ropa a Kai le apretaba mucho, debido a que era quien tenía mayor cantidad de músculos, pero en una proporción perfecta, no tenía apariencia de inyectarse esteroides.

Deanna sabía que el mundo estaba mal, y al ver a Kai y a su gente, vio una oportunidad de oro, un pensamiento cruzó por su mente, se imaginó a todas las personas en Alexandria, con apariencias parecidas a Kai y su grupo, fuertes y capaces de defenderse, a ellos mismos, y a la comunidad.

Deanna abrió el camino, mientras era seguida por Kai, y Maggie que lo siguió de cerca.

Todos los demás ya habían tomado a Maggie como la segunda al mando, después de todo, ella era la más fuerte después de Kai.

Las otras chicas que estaban enamoradas de Kai, vieron esto, pero lo soportaron, ya que tenían una actitud que mantener, y Kai les había dejado, que cualquier problema interno debía resolverse en la base, no afuera.

Ambos camiones entraron a Alexandria, y la puerta se cerró detrás de ellos.

Los demás integrantes de la comunidad de Alexandria al ver esto, no sabían que pensar, ya que ninguno de ellos había estado en el mundo exterior, pero se mantuvieron alejados de Kai y su grupo, que se veían intimidantes a simple vista.

Kai y Maggie fueron guiados a la casa de Deanna y Reg, quienes los recibieron con mucho gusto.

Todos los demás se quedaron sentados en el camión mientras vigilaban el perímetro, en caso de una emergencia.

Esa puerta apenas soportaría una embestida de un juggernaut, fue el pensamiento colectivo de todos los del grupo de Kai.

"Por favor, tomen asiento" Deanna señaló con su mano en frente de su escritorio a un par de sillones vacíos.

La casa de Deanna y Reg, era la clásica casa soñada del sueño americano, un jardín y patio amplios, dos pisos con varias habitaciones, una cocina y sala grandes, y con estudio personal.

Este se encontraba de lleno de fotos de Deanna con su familia, sus diplomas, así como fotos de eventos importantes a los que asistió.

Para sorpresa de Kai, incluso tenía una foto de ella dándole la mano a Obama, lo cual el no recordaba si estaba ahí antes, pero esto era una clara manera de Deanna intentando mostrar que era una mujer influyente.

Al menos, antes de que todo esto comenzara.

Kai se sentó mientras Maggie se quedaba de pie detrás de él, con su arma colgando en frente de ella, y con las manos detrás de su espalda, como si fuera la guardia personal de Kai.

"Creo que será mejor que no demos rodeos" La voz de Kai sonaba muy seria.

"Directo al grano, eso me gusta" Deanna asintió de acuerdo.

Reg no tenía mucho que decir en este momento, así que se paró al lado de su esposa.

"Vine a negociar que se unan a EDEN, el mundo fuera de estos muros esta muy jodido, disculpen por mi lenguaje tan crudo, pero, siento que es la mejor manera para describir la situación actual en la que se encuentra el mundo" Esto no debía ser ocultado, era mejor que fueran mentalizándose para vivir en este mundo.

"¿Unirnos? ¿Cómo una alianza?" Deanna preguntó mientras entrelazaba sus dedos, y colocaba sus manos en su escritorio.

"En un principio, si, planeo que tengamos una alianza de ayuda mutua a largo plazo, o al menos hasta el día en que se sientan seguros con nosotros, luego, podrían dejar este lugar y unirse a nosotros en nuestra base en Atlanta" Kai dijo su idea.

"Lo de la alianza de ayuda mutua me gusta, pero lo de unirnos a ustedes en el futuro, no lo sé" Deanna estaba siendo sincera, no sabía como iban a reaccionar las personas de su comunidad si les decía que tenían que abandonar sus casas.

"Por favor Deanna, no se precipite, primero, vea estas fotos que traje conmigo" Kai fingió buscar algo en su mochila vacía, y luego le entregó unas fotos a Deanna: "En ellas podrás ver los mejores lugares de EDEN, así como también, puedes ver nuestros muros"

Deanna observó las fotos, y Reg tampoco perdió el tiempo, tenía curiosidad de como sería el lugar de donde venían Kai y su gente.

Kai tenía una cara seria, pero se estaba divirtiendo con esta situación, ya que le recordaba que era la misma estrategia que usaba Aaron cuando comenzó a reclutar sobrevivientes.

Las caras de Deanna y Reg se sorprendieron, EDEN parecía un paraíso, haciéndole honor a su nombre, vieron la muralla que se alzaba majestuosa, y una persona caminando como si nada por encima de ella. Vieron los campos verdes y lagos, así como los sembradíos de una infinidad de granos y vegetales, en ese lugar se veía a Hershel y Beth ambos con trajes de granjeros, luego vieron los animales, tantas vacas, cerdos, caballos.

Que se puede decir, no es como si hubieran estado perdiendo el tiempo, y hubo mucha ayuda de parte de la habilidad de control del territorio de Kai, después de todo, incluso podía manejar los relieves.

Poco a poco, EDEN estaba siendo más parecido a un reino, haciendo que el reino de verdad pareciera una basura.

Bueno, el reino ya parecía basura, ojalá Ezekiel no se ofenda.

"Y bueno… ¿Qué les parece?" Kai tenía una sonrisa muy amable en su cara, pero es este momento se imaginaba así mismo como un demonio, tentando a Deanna y a Reg, él sabe que todos en Alexandria son buenos, y lo importante, útiles, excepto por los hijos de Deanna y Reg, y el esposo de Jessie, Pete, que era un idiota parecido al esposo de Carol.

Pero a Kai esto no le importaba, ya que los "accidentes" podían ocurrir.

Deanna y Reg se miraron entre sí, ambos parecían estar hablando solo con sus miradas, y Kai no los detuvo, incluso si lo pedían, podía darles tiempo para pensar, ya después de todo, ya era muy tarde, y necesitaban un lugar para quedarse.

El tiempo comenzó a pasar, y Kai siguió hablando y negociando con Deanna.

Fin aquí.