Su vida nunca fue fácil, desde que nació su madre le a recordado día tras día que ella es un estorbo. Creció bajo la violencia y el sometimiento impuesto por la iglesia. Sus días eran grises, amargos y dolorosos pero gracias a que hombre encontró una motivación para vivir. El le enseñó lo que es el amor, le hizo ver lo hermosa y maravillosa que era, le ayudó a sanar aquellas heridas que gracias al maltrato calaban hondo en su corazón. Ella sin dudarlo se enamoró y sucumbió ante el deseo, se entregó a él y experimento los placeres de la carne. Por desgracia el amor que ambos sentían estaba destinado al fracaso. Nadie podía descubrír lo que entre cuatro paredes aquellos amantes protegían con reselo, de lo contrario la iglesia se encargaría de hacerles pagar muy caro sus pecados. Sin embargo el compromiso arreglado que su madre kuchel le había impuesto cada vez estaba más cerca y Mikasa hace mucho ya no era virgen. ¿Que pasaría si descubrieran su secreto?
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🌟NOTA DE AUTOR🌟
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⚠HABRA SEXO EXPLÍCITO Y VIOLENCIA CONTRA LA MUJER ENTRE OTROS TIPOS, ESPERO NO OFENDER A NADIE EN SUS CREENCIAS TODOS SOMOS LIBRES DE ADORAR Y CREER EN DIOS O EN LO QUE QUERAMOS⚠
AQUÍ SE RESPETA CUALQUIER TIPO DE RELIGIÓN, NO SE BUSCA FOMENTAR EL ATEÍSMO POR SÍ LAS DUDAS.
🌟Autora de la obra : Mikaazumabito
Cualquier intento de plagio será denunciado inmediatamente.
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Aún recuerdo cómo si esto hubiese pasado solamente ayer.... Año 1184...Las campanas sonaban fuerte en la parroquia eran las ocho en punto. Mi madre como cada peregrino no faltaba a la misa, era el único momento de paz que tenía en esa casa.
Una pequeña instancia donde al fín podía sentirme libre bajo esas cuatro paredes que ocultaban mi terrible pecado, donde dos amantes podían amarse libremente sin temor a ser descubiertos ni juzgados por la maldita Santa inquisición....
—¿Ya se fue la tía kutchel cariño? —Preguntó Levi apenas mi madre se fue entrando velozmente por la puerta principal, llevábamos dos años y medio viéndonos a escondidas en mi casa. Era el único lugar donde podíamos darle riendas sueltas a nuestras fantasias sin temor a ser descubiertos
—Si estamos solos no hay nada de que preocuparse, mi madre recién se fue a misa de seguro va a demorar— Le dije mientras me lanzaba hacia sus brazos quitandome la ropa. Había poco tiempo y quería aprovecharlo al máximo- Vamos que esperas cariño, ¿Acaso no me extrañas? hazme tuya, te necesito Levi- Le dije dejándome llevar, consumiendome lento en el placer. Ese mismo que se me estaba negando desde la adolescencia, tener a ese hombre frente era como despertar una caldera en mi interior, era imposible no dejarme quemar con el fuego de sus labios y la de su adictiva lujuria. Lo deseaba tanto que mi mente solo añoraba fornicar una y otra y otra vez con él.
—Agh preciosa me vuelves loco, cuando me hablas sucio— Me dijo mientras me subía a la mesa, mis pezones endurecidos se mostraban dignos ante él , Levi los rozó levemente y coló sus manos por debajo de mi vestido, acaricio mis muslos mientras besaba mi cuello. No pude evitar gemir mientras mi vagina cada vez se tornaba más húmeda , mas caliente y mas ansiosa por resivir aquello que traía bajo sus pantalones.
—Agh...te heche tanto de menos—Le dije Jadiante aferrandome a su fuerte espalda, su miembro estaba tan erecto que ya lo sentía por sobre la tela, un calor abrazador se apodero de mi vientre mientras mi centro pedía gritos ser invadido por ese grosor que tanto deseaba sentir adentro de mi, rayos... ese hombre me tenía tan exitada que por poco no resisto a montarmele como una desquiciada encima.
—Yo también preciosa, estos días sin ti fueron un infierno—Me respondió con voz ronca mientras sus manos seguian acariciando cada centímetro de mi piel— Tu coño esta húmedo, se nota que me extrañaste demasiado ¡Delicioso! - Sin más bajó hasta mis piernas y hundió su cabeza en mi clitoris.
—Te comeré ese coño como tanto te gusta...— Despacio pasó su lengua por mis labios, al sentir tan magnífica sensación no pude evitar jalar su cabello. restregue toda mi hambrienta vagina en su lengua, lo único que deseaba era buscar mi propio placer- Eso es ... Mueve ese coño en mi boca Mikasa ,vamos no pares te lo prohibo- Exigió mientras aumentaba aún más la velocidad de su lengua.
—Cariño... Me estas matando Agh.....— Le dije enredando mis dedos en su cabello para agarrarlo con aun más firmeza. mordí labios que con mi otra mano libre manoseaba sin descaro mis pechos, esas descargas se duplicaron en mi clitoris eran tan deliciosas que pronto llegaría al orgasmo.
— Dios, Levi... Más , más rápido—Le suplique con mi voz entrecortada mi vagina ardía por recibir las embestidas de su tentador miembro, llevábamos más de tres meses sin vernos y la abstinencia se había vuelto meramente insoportable.
—¿Quieres que te de mi pene mocosa? ¿Acaso quieres correrte bien rico en él? Vamos dímelo... Quiero escucharlo de tu propia boca. — Me respondió sin vergüenza mientras mordía y estiraba mi hinchado clitoris.
—Agh...Malvado.... ¿Cómo puedes pedir que hable si sabes que a duras penas logró controlarme? —Exclame entre gemidos, la inquietud era tan grande que me sentía desfallecer mis pezones cada vez estaban mas duros y de solo imaginar su polla entrar dentro de mi me volvía loca pero de la pura maldita ansiedad.
—Dímelo mocosa, vamos... Sabes que no te daré nada si no me lo pides—Volvió a pasar la lengua en circulos bebiendose todos mis jugos- Bien, si tanto te cuesta hablar entonces parare - Señaló mientras comenzaba a introducir sus dedos sin descanso. Por poco y me corro con ese maldito movimiento. ¡Demonios! cómo era posible que un hombre tuviera tanto control sobre mi
—Espera Agh.... quiero tu polla- Le dije mientras jadeaba sin sesar, la tensión ahí abajo era insoportable. Necesitaba más y lo necesitaba con urgencia, sentir el grosor de su verga era algo de vida o muerte—Levi .... AGH..... PENETRAME POR FAVOR-Le pedí suplicando mientras mis muslos se retorcían encima de la mesa.
—Vez que no era tan difícil decirlo—Me miró con petulancia mientras sonreía de soslayo... Mierda que hombre más atractivo, me tenía perdidamente enamorada de él y no me importaba que fuese mi primo.
Idiota... —Suspiré profundamente — Eres un maldito arrogante- Le dije mientras mis piernas tiritaban, mi orgasmo estaba a punto de venir, sin más seguí acariciando mis pechos mientras que Levi sonreía victorioso y se bajaba de lleno sus pantalones y para poner en mi entrada su duro miembro.
-—Podré ser todo lo que tu digas pero bien sabes que eres mía y que siempre lo serás - Volvio a sonreir mientras su rostro se apegaba el mío, rozó sus labios lentamente y busco el calor de mi lengua, me dio un beso tan cálido que por poco creí que me hiba a fundir con él—Te vez preciosa ruborizada y caliente... Demonios que afortunado me siento por tenerte en piernas abiertas— Exclamo mientras se introducía dentro de mi y arrancaba mi vestido por sobre mis brazos. Acarició mi espalda lento mientras sus manos se clavaban en mi trasero.
El sonido de la mesa, sus gemidos que se integraban con los míos, el sabor de mis fluidos invadir mi boca mientras que su polla entraba y salía de mi coño como si tuviera hambre.
Si esto era el cielo ya quería morirme para estar en él. Levi era lo único que necesitaba en mi vida. Era mi razón de despertar cada mañana.
—Agh... Esto querías ¿no? mocosa caliente ¿Dime a quién le perteneces? ¿Quién es el hombre que te hace el amor bien rico?— Exclamo con voz ronca mientras apretaba con fuerza mi trasero.
—Agh... Maldita sea Levi, sabes que eres tú... Solo tu mi amor— Le dije mientras dejaba de embriagarme con él aroma de su cuello para clavar mis uñas en su espalda, alcanze el orgasmo, fue glorioso, fue exquisito.... Arquie mi espalda disfrutando de la vista panorámica del placer que me provocaba enseñarle la desnudez de mi cuerpo, pero.....
De pronto.... el sonido de la puerta abriendose arruinó por completó todo lo mágico e irreal que había vivido en ese maravilloso momento.
—¡QUE MIERDA SIGNIFICA ESTO! —Gritó mi madre impactada mientras entraba por la puerta, vi como su rostro se deformo de puro espanto al descubrirnos en pleno acto sexual. ¿Como podía ser tan hipócrita? ¿como podía mirarme con repudio si ella hacía cosas peores por las noches a puertas cerradas?
—Tia Kuchel... Todo tiene una explicación... Tranquilicese tome asiento y le explicó.... Verá yo y Mikasa... - Argumentó levi saliendo de mi interior rápidamente mientras se subía con rapidez el pantalón .
—¡Cállate degenerado, largate de mi hogar maldita abominación del demonio! Mira en lo que has convertido a Mikasa , Ahora no es más que una triste zorra—Gritó enfurecida mientras nos miraba con su cara llena de desprecio– ¡Mira lo que has hecho!¡Por tu culpa será juzgada como una vagabunda!, ¡No se en que momento lo hiciste pero has traído el pecado a nuestro hogar debería exponerte ante la iglesia! ¡De seguro has pactado con el demonio! ¡vete ahora escoria y no vuelvas nunca más si no quieres que cumpla mi amenaza o peor aun que Mikasa asuma las consecuencias!— Advirtió decidida mientras le miraba cegada por el odio .
—No te atrevas a denunciarlo o también tendrás que denunciame a mi -De tan solo imaginar el peligro que el corría mi corazón se apretaba de la angunstia, no me podía conformar a llevar una vida sin él . prefería la muerte que perderlo para siempre o peor aún verlo mutilado como exhibición en la calle.
— Cállate Mikasa, yo soy la que mando en tu vida. No eres nadie para responderme y muchos para querer desafiar mis ordenes... Es mas vístete, me das asco... ¿Cómo pudiste entregarte a este hombre tan fácilmente mujerzuela?—Exclamó mientras me agarraba del cabello para luego botarme contra el piso, inmediatamente Levi se interpuso. Su rostro preocupado me indicó que el estaba conmigo pese a la situación mi corazón salto del pecho tenía tantas ganas de correr a sus brazos y buscar la protección en el pero se me era imposible.... Ya no.
—En en el nombre del altísimo por favor no le pegue.... Estamos enamorados, si pecamos fue solo por amor... Amo a Mikasa más que a mi propia vida, se lo pido en el nombre de Dios... Por favor no me aleje de ella—Ambos no podíamos aceptar no vernos nunca más, pero mi madre era inflexible y pese a sus ruegos no nos perdonó ni tuvo benevolencia, se cegó en su odio, en su pecado, en esas malditas creencias divinas que nos condenaban. Si Dios amo al prójimo más que su propia carne entonces ¿En donde fue que peque? El amor es uno y es libre de albedrío no deberíamos de avergonzarnos por entregarnos libremente y amar. Pecador es el que empuña un arma y de esa forma le quita la vida al otro. El que traiciona, el que hace daño sin motivo alguno. Pecador el que miente, el que roba. Nosotros somos víctimas, solo víctimas de la iglesia... Solo eso.
—No te atrevas a decir que soy tu tía maldito, ni pretendas dirigirme la palabra, entiende... Lo que ustedes han hecho es una aberración, es una vergüenza a las buenas costumbres.... ¿como pueden siquiera llamarle amor a esto? son unos degenerados unos pervertidos. Son la escoria más putrefacta que pisa nuestra tierra. - Le gritó quitándose lo de encima -Y creeme que no miento al decir que si no te vas a Mikasa le irá peor... Recuerda que en el pueblo apedrean a las adúlteras y ninfomanas hasta morir, mientras que tu posiblemente sólo recibas tortura.... Bueno si es que tienes suerte- Resignado y con el corazón hecho pedazos a Levi no le quedo otra opción que irse, me miro por última vez a los ojos demostrandome todo su dolor por dejarme y luego camino hasta la puerta sin volver a mirar atrás.
Está era nuestra cruel despedida, después de tantos años de felicidad que vivimos juntos no pude evitar quebrarme, sus profundos azules me habían destruido el alma por completo. Sabia que lo que se me vendría encima sería un infierno, simplemente no me importó... Nada me dolía más que su perdida. Apenas el hombre que más ame puso un pie fuera de la puerta mi madre me lanzó contra una de las paredes y con una fusta que estaba en el cajón de la cocina me golpeó sin compasión a carne desnuda marcando mi cuerpo con interminables heridas que radicaban en mi espalda.
—Zorra, Puta, meretriz- Exhalo una y otra vez arremetiendo esa maldita fuzta con violencia—¡Cuantas veces te dije que tenías que ser diferente a mi! ¡Eres una desgraciada!, ¡una sucia una cochina! ¡Por qué Mikasa! ¡Por que no pudiste esperar un poco si estabas a un paso de tu matrimonio con los Jeager! ¡Eres una sucia perra! — Gritó mientras descargaba su furia con aquella fusta en mi piel.
—¡No más, no más por favor!- Le rogue mientras me retorcía arrodillada a sus pies del dolor—¡ Por favor piedad! ¿ Por qué debo pagar por tus malditos errores? ¡Que culpa tuve yo de venir al mundo! ¡Yo no lo pedí! — Le grité desesperada quitándole la maldita fusta que yacía ensangrentada en sus manos, mi cuerpo ardía horrible pero no mostré mi debilidad, dejé que viera toda mi impotencia ,mi dolor esa molestia que tanto reprimi por años guardada en mi pecho al ser un hijo no deseado—Se que te falle, lo se madre.... Perdóname, cometí los mismos errores que tú y sin embargo no me arrepiento.... Si me acosté con Levi fue por amor, por amor verdadero. Por que mi cuerpo lo necesitaba, por que mi corazón lo pedía... No soy vagabunda no me vendí por unas cuantas monedas como lo haces tú... No te criticó se que era la única forma que encontraste para sobrevivir cuando mi padre te abandonó conmigo en tu vientre.... Perdóname si esto que hice te hizo daño pero soy mujer al igual que tú. No lo digo para excusarme solo entiéndeme y no me juzgues que ninguna de las dos tiene derecho a hacerlo, ni una ni la otra— Me dolía decírselo pero quien era ella para juzgarme si era tan pecadora como yo. Una vez dios dijo el que este libre de pecado que tire la primera piedra... Nadie se atrevió a tirarla y está vez tampoco podría hacerlo ella.
—Desagradecida, supieras todas las humillaciones que tuve que pasar por tu maldita existencia...- Abofeteó mi rostro mis palabras la habían herido—Hambre, frío, caminar embarazada y sola entre la penumbra de la noche.... ¿Sabes acaso todo lo que sufrí? ¡Como te atreves a juzgarme si lo que hice fue por necesidad! ¡Si tu hubieses estado en mi lugar también lo hubieras hecho! ¡No tienes ni un derecho a sacármelo en cara gracias a ese par de monedas es que hoy en día comes y sigues comiendo!
—Lo sé madre... Pero en el fondo hay algo en que mientes-Le dije llorando.- Yo jamás a ti te importe nada... nunca me distes cariño, ni me formaste como persona, gracias a ti soy lo que soy y si te acuestas con una enemidad de casados noche tras noche hoy en día no es mi problema. ¿Crees que no descubrí que tienes un nuevo amante? por favor las paredes no son de fierro. Se que te acuestas con el esposo de Carla y es por que quieres casarme con su hijo... Ya basta de mentiras yo no tengo la culpa de que tu nunca puedas ser feliz con el—Vi como sus ojos se abrían como platos, se que jamás espero que yo me revelara de esta manera, tal vez mis palabras eran en demasía hirientes pero ya estaba cansada de esa misma cantaleta, de oír tantas cosas y tener que callarlas por más de 3 años.
—¡No hables ni una maldita palabra mas! Independientemente de lo que paso hoy mañana irás a confesar tus pecados y de esa forma solucionar este maldito problemita! ¡Oíste! ¡Quieras o no te casaras con Jeager!
ESTA ES MI ÚLTIMA PALABRA, haz sido una cruz en mi vida y yo estoy harta de hacerme responsable de ti. Si no fuera pecado desearía que nunca hubieras nacido, ojalá nunca te hubiera parido no te lo mereces. -Me miró con odio y sin una pizca de arrepentimiento por lo que había dicho. Sin embargo yo me sentía totalmente destruida aunque intente no demostrárselo jamás ni en mis sueños más locos creí que mi madre me diría esas palabras.
—¿Por que no me abandonaste o me dejaste morir si tanto me odiabas madre? -Le dije aguantando mis ganas de llorar, respire hondo mientras mis puños se cerraban por la impotencia.
— Por qué no era lo correcto.... Por qué creí que tu maldito padre algún día volvería a mi y se arrepentiria de su error, claro que eso nunca sucedió, por más que le espere y le rogué a Dios por misericordia jamás volvió. Como resultado me quedé contigo y te convertiste en un estorbo, en una piedra en mi maldito zapato.
Continuará ...