Capitulo 6: (Alf)e2-(Ca)f6

"Tu destino no puede ser cambiado, pero puede ser desafiado. Cada hombre nace como los demás pero muere como uno solo."

—. Martin Heidegger

—¿Por qué no usamos las manos para matar pero si armas ajenas a nuestro cuerpo para hacerlo?

—Por que desconfiamos de nuestras propias capacidades, los animales que caminan en cuatro patas pueden correr y cazar como nunca, pero quienes pueden escalar hacen lo que sea por conseguir comida de lugares donde los primeros no pueden hacerlo y tienen que cuidarse de esos primeros, por qué ellos (algunos) pueden escalar— dijo—, es más, los humanos son los segundos animales, hay quienes pueden pelear a mano pero necesitan un arma, siempre y para todo la necesitaran, incluso para las cosas más fáciles, por qué son así, es su naturaleza usar todo su alrededor no importando si lo destruyen para conseguirlo

—Los escuché una vez hablar de eso, uno lo dijo de una manera rara, dijo, "Hasta un enano con un AK-47 da miedo, no te respetan a ti, respetan el arma, cuando quien de miedo seas tu y no tu arma, entonces, sabrás quien eres"

—¿Y tiene razón?

—No entiendo ese código de AK-47, pero si, las capacidades de los herreros enanos son grandiosas y si, son respetados por la creación de armaduras y armas… pero nunca he escuchado de un enano que sea respetado por ser el mismo

—Por que como dije, es su naturaleza, incluso aquí, ellos son excelentes herreros, los elfos son excelentes cazadores, los hombres lobo, los demonios y demás son excelentes en sus ramas y los humanos solo son excelentes en tratar de no matarse entre ellos, esa es su capacidad por qué cuando hay alguien que necesita estar muerto, ellos olvidan sus diferencias por el tiempo que sea necesario e irán tras él como sea

—Osea usted

—Sep, pero con lo que está pasando el estandarte está en otro lado, así que las armas no matan, quien tiene el arma es el peligroso, pero aún así, el arma no dejará de ser lo que es, el verdugo contra quién sea usado, incluso si son las manos, toda capacidad posible de quién quiera matar a alguien sea o no en defensa propia, recae en las acciones de quién hace eso… sea o no en defensa propia

—¿Por qué repite lo último?

—Por que si no, no quedaría claro

—Ok

Sarina despertó nuevamente, pero ahora el lugar era un sitio diferente, una casa de campaña grande, con una cama, una mesa y alguien a un lado de ahí. Ella abrió los ojos y se dió cuenta que ese extraño estaba de espaldas, trató de encontrar un arma o algo, pero…

—No te muevas, aún no estás recuperada

Eso la detuvo, pero aún así no confiaba en él

—¿Por qué me salvaron?— preguntó deteniéndose y tocando donde estaba su herida

—Necesidades, ¿Algo más?— respondió demasiado rápido ese sujeto

—... ¿Qué?

—¿Qué? ¿No te lo dijeron allá arriba?

Y los dos se miraron, quien la curó fue un enano, estaba sentado en una silla y sus pies apenas podían llegar al suelo, ella nunca había visto uno pero había escuchado de ellos.

»¿Esa expresión que significa señorita?

—Nunca he visto un enano, menos uno que sea doctor

—Cosas de la vida… ¿En serio no le dijeron nada?

Quería decirle la verdad pero eso sería peor y posiblemente más problemático.

—Ellos me hirieron casi de muerte mientras llegaba aquí, ¿Usted qué cree señor…

—Fligli Ulbart Embert, llámame Dlig

—Sarina, a secas…

—Ya veo, la encontramos encima de la otra reina, pensé que la habían herido los soldados

—No, me asusté y cuando sentí, ellos me hicieron esto

—Ya veo, ya veo, lamento mucho eso pero se ve más tranquila de lo que esperaba

—Como usted dijo, no me explicaron nada, ¿No sé asustaría de ver un cuerpo caer de golpe frente a usted?

—...

—¿Verdad?

Sabía que él estaba buscando la razón real por la herida y ella sabía cómo responder para salvarse de cualquier problema por si no era lo que quería escuchar.

»Otra cosa, ¿Cuántos días quedé inconsciente?

—Cuatro, su recuperación fue rápida la verdad

—No es mi primer rodeo…

Y eso se me escapó decir, sabía que querían novatos y decir eso era básicamente descubrirse.

—Eso será de gran ayuda

Y ella al escuchar eso lo entendió casi por completo.

—Hijos de perra

—¿Disculpe?

—No, me estoy quejando de esos imbéciles, nada más, no voy a ofender a quien me salvó la vida, ni loca

Siguió recostada mientras se recuperaba, pero igual su mente no se detuvo.

—Así que los engañaron, enviaban a novatos a ellos en vez de gente experimentada— dijo Carmilla

—Si, no suena tan mal si tomas en cuenta que si algún día se les acaban los experimentados, cuando ocurra un desastre no podrán defenderse— dijo el héroe

—Honestamente yo también haría lo mismo, no gastaría grandes fuerzas en un lugar como este— respondió Jezabel

Dos días pasaron y las pláticas entre ella y el enano doctor siguieron su curso, ahí ella aprendió todo lo del lugar.

Literalmente era como una zona de guerra interminable, no sabe cómo empezó a pesar de llevar casi toda su vida ahí, pero lo que sí sabía era la razón por la que enviaban a gente con ellos, posiblemente también los demás lugares del gran árbol de metal.

—Reyes… ¿Por qué?

—Elegir a un extranjero de entre todos los que estamos aquí hace más cosas más fáciles para nosotros, ¿No crees que sería un desastre total el que alguien sea más preferido que los demás?

—... Si, pero… vaya, más aún así, ¿Es un todos contra todos?

—Sep, no creo que esto tenga final hasta que la magia se acabe, pero uno debe seguir por el bien de los demás

—...

Esas palabras y las del otro sujeto le resonaron en la mente.

»Si pero… ¿No es algo cruel el que vayan a la guerra de una manera que saben que no volverán?

—Lo saben, realmente lo saben, pero no pueden hacer nada— respondió el enano—, si flaquean un poco, serán y seremos devorados por los otros lados y posiblemente los que estén más allá

Era otra guerra de resistencia pero más larga y posiblemente infinita… ¿Infinita?

—Dijiste que esto duraría hasta que se acabará la magia, ¿Que clase de magia es?

Ver a tantos soldados como hormigas y no ver casi ningún cuerpo rellenar incluso desde su hogar hasta ahí era demasiado raro.

—Eso es lo importante de esto, es una magia llamada [Cordyposttum] revive los cuerpos de los soldados, todos sin excepción

—Salvo la Reina

—Y los Reyes

—...

Eso le hizo doler el estómago, pero lo contuvo con todo lo que tenía.

—Y nadie sabe dónde se encuentra el núcleo, pero siento que todo empezó con eso mismo

—Si alguien se hace con esa magia puede cambiarla… si, me doy una idea

—Más nadie defiende, solo atacan para conseguirla

Lo que significa que cualquier soldado que vea, ha estado ahí desde el principio de todo, poco a poco llenándose hasta ver esas mareas casi interminables.

—Cosas de la vida y para que te preguntes, tu trabajo de ser Reina es solo subir la moral en la guerra, así no habría problemas con los soldados, no hay problema con ellos pues sirven de placebo cuando asesinan a una o un Rey y mantienen vivo al suyo

—Que fácil lo haces decir eso

—Lo lamento, pero es mejor escucharlo de una vez que descubrirlo a la mala

—Cierto, gracias por tu honestidad

Ella se levantó y el enano bajó de su silla.

»Es mejor empezar de una vez, siento que si me tardo más, será problemático y malo para ellos

El enano estaba complacido pero ella tenía otros planes.

«[Cordyposttum]... Ese anciano… ¿Cómo consiguió saber dónde estaba?» pensó

No tenía el mapa, pero sabía dónde podría estar, más solo decidió dejar las cosas y esperar el momento adecuado para hacer su movimiento.

Cuando salió de ahí, lo que vió no la sorprendió tanto como antes, era un castillo medieval, como los que podrías ver representados en cualquier película sobre caballeros, el color de los soldados era el que conocía, lo que le dió ánimos de seguir.

Personas del tipo sirvientas la llevaron a una habitación muy grande, era el guardarropa del castillo donde estaba toda la vestimenta a usar, incluso para hombres, más había algo en las sirvientas que le llamó la atención.

Ellas solo estaban haciendo su trabajo sin hablar, como una máquina automática que solo está ahí para hacer lo que le mandaron a hacer, más Sarina sabía que no podía entablar conversación con ellas, literalmente podía verse en su cara la expresión de ver demasiados muertos como para congeniar con alguien.

Quería disculparse o algo pero mantuvo su silencio obedeciendo mientras le colocaban su ropa, el arma preferida de ella era una espada más grande y mejor que la que tenía y extrañaba, pero el momento requería algo mejor y nuevo.

«Si la vuelvo a ver, me disculpare con mi arma»

Después de mirarse en un gran espejo, quedó complacida, verse de una manera tan linda y a la vez rebelde decía que quería ese estilo, su sonrisa lo decía pero la tranquilidad y seriedad llamaban a la puerta, así que ella se retiró de ahí, no sin antes decir.

—Gracias por todo su trabajo

Y cerró la puerta.

Después se dirigió a la entrada principal y sin esperar nada solo avanzó, ya tenía que hacer y más que nada, sabía que sería complicado, pero a su vez satisfactorio.

Lo primero que hizo antes de todo fue ir a dónde estaba Rosi, aún la encontró ahí y buscó el mapa.

—Lamento esto, pero, no hay tiempo, perdóname, vendré por ti cuando pueda y trataré de encontrar a los demás

Dejó el cuerpo y fue directo a primeramente destrozar todo.

—¿A quien te recuerda?— preguntó Jezabel

—No, lo de él fue por qué ya no hubo héroes y ese sitio empezó su cagadero, que ella hizo esto solo fue hecho casi de la misma forma pero más personal y vengativo

—Y le resultó

—Tenemos que adelantar esto— dijo el héroe

—¿Qué tanto?

—... Once años

—... Vaya, házlo

Al hacerlo todo estaba más tranquilo que de costumbre, incluso el enano doctor estaba ante ella.

—Mi Reina… todo lo que ha pasado…

—Si, ¿Que se siente ser engañado?— respondió una Sarina más adulta y seria de lo normal con los ojos grises y de pupila negra, un cuerpo marcado por las batallas y tres espadas grandes en su costado, representantes de su poder sobre las tres líneas que se han enfrentado—, tardé un tiempo pero he comprobado mi punto que dije en el principio y más que nada, he hecho hablar a esos falsos reyes, yo también soy una falsa Reina por qué no soy una novata

Al parecer todo había sido soltado de una manera muy fuerte y más que nada, larga.

»Además, todos ya no tienen posibilidad de volver, solo son cuerpos sin voluntad propia, sin memorias

Dijo y mostró un disco, este centelleaba como si estuviera enviando señales en código morse, todo el disco tenía inscripciones en un idioma desconocido, era claro que contenía el hechizo [Cordyposttum] el magna hechizo que hacía revivir a quien estuviera en su radio, un radio que se pudo descubrir abarcaba a todo el mundo y la noticia que alguien lo tenía, no se hizo esperar.

—¿Y ahora? ¿Qué hará con eso?

Sarina miró al doctor enano y sonrió.

—Solo digamos, que cosas cambiarán… muchas, muchas cosas cambiarán

El grupo de tres miró eso y sabían que iba a pasar, así que rápidamente fueron al otro lado.

Cómo dije, la noticia que se había encontrado el hechizo [Cordyposttum] revoloteó lo más rápido que podía entre los altos mandos, más en especial en la clase que quería mantener su orden.

—!Tenemos que hacer algo¡

—¿Cómo que? Esa tipa o quien sea que sea hizo lo que nosotros hemos estado haciendo durante años ¡y lo hizo de una sentada!

—Todos los presentes, así como sus antepasados hicieron lo que pudieron al intentarlo, ahora que sabemos quién la tiene, debemos liberar los protocolos y proyectos que hemos estado guardando, nadie podía saber que algo así pasaría, pero se hizo lo posible por evitarlo

—Mantener a la gente bajo nuestro control ha costado tanto así como lidiar con los otros lados, perder eso en este momento será lo peor que podríamos hacer y deshonrar a nuestros antepasados

—Menos mal que esto no ha llegado a la gente

Pero eso sería totalmente cambiado tan de golpe como un balde de agua fría con hielos de nitrógeno.

**¡AAAHH aahh! ¿Esto está encendido?...**

—Se parece a alguien — dijo Jezabel

Una gran pantalla apareció en el cielo de toda la ciudad así como en el bajo e intermedio mundo de ahí.

*Posiblemente algunos no me conozcan o se hayan olvidado de mi y, o no me reconozcan, pero soy Sarina, ¡hola a todos!*

Todos se alarmaron, más quienes la vieron y si se les figuró ella, pero su cuerpo y rostro ya no era el que conocían.

*Sea que quienes me conozcan se pregunten, ¿Dónde he estado todo este tiempo? Pues déjenme decirles que fui a resolver el por qué durante tantos años, han desaparecido los novatos de nuestro hogar y en serio, no creerán dónde fueron a parar*

Y claro que los altos mandos querían detenerla.

*Ah miren, ahí están los que estuvieron durante años mandando a niños a hacer el trabajo de adultos, quienes querían la magia que revive a los soldados que hemos estado evitando durante nosecuantos años*

—!NO LE HAGAN CASO, ELLA SE HA CONVERTIDO EN ENEMIGA¡

Toda la gente estaba dividida, saber eso y después lo que ellos decían los mantenía atentos.

*¿Enemiga? ¿Si fuera enemiga podría hacer esto?*

Y de un chasquido hizo aparecer a soldados de los tres ejércitos entre la gente, todos corrieron despavoridos, incluso los cazadores entre la gente fue tomada por sorpresa, todo ante la mirada de Sarina y ese sujeto.

—¿¡LO VEN¡? !ES ENEMIGA¡ ¡MANTÉNLOS!

Pero los cazadores no se movieron pues quienes aparecieron fueron los Custodios, sabían perfectamente que enfrentarse a uno significa la muerte segura.

*¿Chicos? ¿Pueden ponerse de cabeza y caminar en círculos con más manos?*

—!SI MI REINA¡— gritaron todos los custodios

Y todos lo hicieron como si fuera algo normal.

*¿Algo más?, se ve como una trampa, pero hablo en serio, ¿Quieren saber el contexto de todo lo que ha estado ocurriendo o que?*

La gente miró eso asombrada, pero algo desconfiada, todo mientras aquel que estaba gritando en el principio, seguía advirtiendo que eso era malo y que era su oportunidad… hasta que un niño se acercó.

*Alto, ya, vuelvan a sus posiciones*

—SI MI REINA

El niño esperó a que se acomodaran y después se puso alrededor de uno de los Custodios, este no se movió para nada.

*Tengo algo que advertir y más que nada espera que no lo hicieran, si ellos no son atacados, no atacarán y lo tienen muy presente sin que yo diga esa orden*

El niño tocó la armadura y el Custodio seguía sin moverse.

—!Mira mamá¡ ¡Es cierto!

Pasó la mano por el pie de ese Custodio y después corrió hacia otro y hacia otro, mirándolos y divirtiéndose, los demás niños y personas miraron eso. Aquel sujeto ya no sabía que hacer, más Sarina lo miró.

*Así que, arriesguese, diga la orden de atacar y arruine por completo esto, vamos, se que se muere por decirlo, entonces lo primero que haré es que lo torturen hasta el mero aburrimiento y lo diré en serio, ellos nunca se han aburrido de nada, vamos, vamos, ¿Que espera?*

Pero hubo un silencio entre la gente que se acercó a ellos, los miró y observó tocándoles la armadura y siendo fascinados por los mismos, incluso los herreros de ahí se acercaron así como los armeros para revisar el tipo de arma que tenían.

*¿Entonces cuento lo que sé?... Ok, empezaré de una vez y espero estén muy atentos, por qué lo que diré después de esto decidirá su futuro, el mío y posiblemente de todo el mundo, ¿Ok?*

Completando lo que de ella, se añadió lo que ese sujeto sabía, así como los demás. Tampoco sabían el por qué debían hacer eso, pero últimamente los sacrificios para los novatos iban en aumento en varios lugares, más en ese sitio, pero ella sabía por qué.

Los demás lugares estaban empezando a hacer lo de ella, usar a expertos en combate para dominar a los soldados, hacer que buscasen el hechizo y hacerse con él, pero no esperaban que alguien de aquel lugar pudiera saber dónde estaba, ¿Cómo lo supo?

—Artiom, sabía que fuiste tú, esas dos veces que casi la matas… no fueron fallidos naturalmente

—Debiste dudar de mi en todo momento y más que nada… es mi padre quién confió en ella, yo solo la ayudé un poco

La Reina Sarina estaba a un lado de esos tipos, los altos mandos así como los demás encargados de su protección, pero que ahora estaban acorralados.

—Toda la gente ya sabe la verdad, así que es mejor que se vayan de una vez, no tienen poder aquí pero eso no significa que sea realmente mala, haré lo mismo que ustedes, les daré ventaja y si los encuentro, los mato, ¿Ook?

Así que continuando con lo anterior, las cosas fueron cambiadas de golpe, ella iba a destruir el tronco principal y toda la gente debía bajar de ahí mientras podía, algunos incluso se les concedió ir a otros lugares a advertir pero ella sabía que no harían caso, eso era lo divertido.

—Sarina

—Hola aquí, ¿Cómo has estado?

—... Eso debería preguntar yo, te vez… y luego lo que dijiste… dios mío, fue un shock total verte de nuevo, creí que…

—Si, la verdad es que yo también, ¿Y Lilimo?

El alquimista ya con algo de barba y picas arrugas miró y señaló a un lado, ahí estaba una especie rara de humanoide gelatinoso digno de un anime porno japonés.

»… y yo que pensé ser la que avanzó en algo

—Si, además de otras cosas

—¿Y la usas para masturbarte?

—...

—¿En se-… pero no te juzgare, cada quien hace con su cuerpo lo que quiere, como sea, quiero pedirte el más grande favor que le puedo decir a alguien

—Dime, pero a su vez deseo estudiar los materiales de una armadura y tú cambio corporal

—Hecho

Las cosas siguieron su curso de una manera algo intensa y normal, las personas ya estaban abajo y si, ya no estaban las interminables filas de soldados corriendo o peleando con monstruos.

—¿Y cómo se supone que sobreviviremos? ¿Cómo viviremos?

Eran las preguntas de algunas personas ahí abajo.

—Dejaré a un grupo de Custodios a vigilar, enseñar a cazar, construir y todo lo referente a la creación de una nueva ciudad, costará, si, pero en serio que quedarse arriba será un error

—Pero sigo sin entender, ¿Por qué harás esto? Estábamos bien allá arriba

Y Sarina señaló a un grupo en especial, ellos estaban mirando el cielo, las plantas, los niños jugaban entre los árboles y más cosas como si fuera la primera vez que lo veían y así era.

—La mitad de toda la gente que tuvo que vivir toda su vida debajo del suelo y los trabajadores que mantenían la estructura no piensan lo mismo, ¿Algo más?

—...

—Eso creí, ellos se irán cuando vean que ya pueden valerse por sí mismos, así que no habrá problema

Después decidió ya irse, pero no sin antes.

»Algo último, un pago especial por esto, espero y lo hagan, así que… ¿Pueden hacer como si yo no existiera más?

Y toda la gente no entendió eso.

»Todo lo que seguiría de aquí en adelante es cosa totalmente mía, de nadie más y si los relacionan conmigo solo sufrirán, así que… hagan como si hubiera sido lo peor que les haya pasado y no quieren hablar de eso, cuentan historias inventadas o algo así, necesito saber que estarán bien con eso, por favor, si alguien dice algo que no, bueno no podré venir a salvarlos

Todos lo sabían, era alguien buena, pero necesitaba eso para cortar todo tipo de relación con ellos.

—Yo me encargo de eso — dijo Artiom —, si alguien pregunta, no sabemos nada o hiciste cosas aberrantes

—Por favor… adiós

Y avanzó con todo el ejército sin dejar ya nada atrás.

—¿Cuánto?— preguntó Jezabel

—30 años

—Uy… no es mucho

—Callate, Jezabel

Avanzando más, podía verse toda la destrucción del gran árbol, todos los cuerpos muertos como una alfombra de flores siendo los mismos cadáveres los pétalos del tapiz.

El cielo estaba tan rojo de humo y fuego que era como ver el atardecer en pleno día, los campos destruidos, la gente asustada y escondida, los cazadores y soldados que quedaban para romper el tronco principal y solo el último bastión de ellos al frente de todo un ejército de Custodios con apenas soldados del otro lado.

—Dejame ver si entendí, lo que tengo es una única semilla del gran poder del mundo que se supone, debía ser repartido alrededor de todos lugares

—Si

—La razón por la que había tanto caos y desastre era por qué el que la robó le lanzó un hechizo transformando su propósito en algo para destruir o cambiar la energía del árbol para arreglarlo

—Si

—¿Y lo que yo hice es todo lo que se supone debe ser?

—Sep, ¿Algo más?

—... Dime qué tengo que hacer, esto me encanta, hace que toda la muerte, destrucción y caos que he provocado al fin tenga sentido

—... Sabía que los mortales eran raros, pero no qué tanto

Quien estaba frente a la Gran Reina Sarina, era un ser extraño, con traje de mayordomo, sombrero de bombín, un monóculo y un bastón en la mano, además de un reloj de bolsillo.

»Tengo planes para cuando esto termine pero… se que quieres saber el por qué no hice esto… no lo tengo permitido

—Ah, vaya forma de excusa

—Si, acepto que es eso, pero es verdad, no puedo hacer nada que interrumpa el flujo de las cosas, me iría de una manera tan inimaginable que con solo escuchar el nombre del castigo te volverías loca— dijo ese sujeto—, solo tengo permitido observar y esperar, suerte para mí que todo ese tiempo pasa como un pestañear… lamento su fuí duro

—Nah, sin problema, ¿Sabes cuál es el propósito de esos tipos?

—¿Qué más? Poder, dominio, la cosa humana y natural de cualquier animal en ese y cualquier mundo, no tengo problemas con eso, pero cuando se meten con algo como esto, pues…

—¿Te la robaron?

—No, más bien, alguien que estoy cazando está haciendo un mal chiste y quiere que todos se rían con él… he estado esperando por estrujarlo fuertemente del cuello, pero siempre se me escapa, así que espero y puedas ayudarme a atraparlo, él fue quién hizo esto

—Pues si es así, con todo gusto

Y enseguida ordenó a todas sus fuerzas avanzar, más algo le llamó la atención, varias sombras aparecieron a la lejanía, justo entre el árbol gigante como abejas saliendo de algún panal.

—¿Qué son?— preguntó ella

—Ah… eso… ese imbécil lo hizo

Cuando se hicieron presentes, lanzaron fuego de sus bocas y arrasaron con sus garras las filas de soldados Custodios de Sarina, no había arma alguna preparada para eso… más bien, esas criaturas, eran nuevas, nunca antes vistas, alas grandes cuellos largos, escamas y ganas enfermas de matar a quién se les pusiera enfrente.

—¡¿Qué son esas cosas?¡

—Hijo de perra, con esto solo aumentará más su tormento, pero me dió la excusa perfecta para intervenir

Y aquel sujeto como un mago, hizo aparecer un gran huevo de su sombrero.

»Esto te ayudará, pero te lo advierto de una vez, una vez sueltos, primero te obedecerán y cuando todo termine, se irán por su lado, en serio que no serán peor que soldados, pero un día harán un desastre tan grande que casi destruirán el mundo, ¿Te arriesga-

Y ella lo tomó y rompió en el suelo, como si fuera el auto-sardina de algún truco de circo, salieron disparados muchas bestias como las anteriores, pero en color negro y escupiendo fuego azul, llendo contra las otras bestias contrarias a ellas y peleando como gallos de pelea en el cielo y tierra entre los soldados y cazadores.

»En serio que los mortales son tan raros, ¿Por qué ese sujeto los quiere destruir? Son interesantes, ha, mejor les pongo un seguro a esos "Dragones"

—Pharmagon y posiblemente sus padres además de su línea de sangre

—Si

Y Carmilla se rió.

—!ATAQUEN CON TODO¡ HASTA QUE NO QUEDE NADA¡— gritó Sarina con todas sus fuerzas

—¡SI, MI REINA SARINA¡

Y todo como en cada gran guerra, se puso tan enfermamente serio, crudo, visceral y bélico a un nivel que era como si la muerte estuviera jugando un videojuego manejando cada aspecto de esa pelea como una misión secundaria.

Más dentro del tronco, más bestias estaban siendo liberadas del subterráneo.

—Ese maldito, ese imbécil, me ha encontrado, pero… estoy cerca, cerca cerca cerca, solo, necesito más tiempo

—!Estamos perdiendo gente, soldados, esa cosas están aplastando nuestras fuerzas¡ ¡Dios, dios, sálvanos¡

Y ese sujeto mató sin misericordia a quien rogaba.

—Lo envié al cielo, no se preocupen, ya ha hecho lo que debía hacer — dijo como una excusa barata—, solo sigan así, ganaremos, se que ganaremos

—!SI, COMO USTED DIGA¡

Estaba vestido justamente como el otro tipo, pero su cara y porte no iban a como era la costumbre.

»Piensa, piensa, ¿Que puede retrasarlos?... Algo, algo… !ESO ES¡

Y desapareció sin media palabra.

—No, no podemos seguirlo, ni observar, ya es mucho que el otro tipo sepa que estamos aquí

—Vaya, al menos entiendes eso

Y eso asustó a los tres, aquel primer tipo apareció detrás de ellos.

—¿Jezabel, cierto? ¿Cuando pensabas hacerlo?

—Nah, quería darle más alas

Pero ni Carmilla ni el héroe sabían de lo que estaban hablando esos dos.

—Hazlo de una vez— dijo aquel tipo de bombín con un tono tranquilo y una pizca de enojo

—Ok, ok

Y chasqueo los dedos, todos esperaron algo y después frente al héroe, apareció un sujeto delgado, flácido hasta los huesos, pelo blanco y arrugas con ojos hundidos, todo lo que sería un drogadicto pasado de su límite posible.

—Vete

Y desapareció al héroe normal, no sin antes pegarle un sello en la frente. Después de eso, miró a ese tipo del bombín y parecía querer disculparse pero el otro no lo dejó.

—El hecho que no pueda intervenir con ustedes no significa que podían ir a sus anchas, por algo creé a los dioses para que pudieran tener una correa, pero veo que uno hizo lo que quiso

—...

—No te preocupes, al menos lograste conseguir algo para todos y para ti, con solo ver que te has arrepentido y tratado de arreglarlo, es suficiente para mí, vete, él te está esperando, ya terminaste

—Muchas gracias

Y él desapareció. Jezabel miró al otro tipo.

—Hacen algo…

—Si, si, lo sabemos

Y volvió a su lugar, no sin antes decirlo.

—Azrael tenía razón, los viajes en el tiempo son una puta mierda— dijo y acomodó su sombrero para despedirse

Ellos dos se quedaron solos después.

—¿Quién es ese?

—****

—... ¿Quién?

—Exacto

Ella no comprendió y era lo mejor, siguieron observando todo y en un pestañear, aquel sujeto volvió, pero los soldados ya habían logrado pasar la muralla, haciendo y matando a todos los que podían, aquel tipo solo dejó un libro y miró a un grupo de gente mirarle.

—Ganaremos, sin importar qué, se los dejo a ustedes

Y desapareció lentamente, aquellos tipos tomaron el libro y huyeron.

—Ni siquiera nos notó, vaya diferencia de poder

—Y aún así es escurridizo— dijo Carmilla

Ese día durante mucho tiempo sería conocido como la "Quema Sagrada" por todo el caos y cenizas que quedaron por todo el mundo en cuanto al paso de la Reina Sarina, Sarina "la Sádica" una de tantas reinas después de ella conocidas después como Reinas Demonio y después Reyes Demonio, para que decir que los segundos fueron más famosos por su sadismo y poder militar, pero, ¿Dónde aparecen los héroes entre todo esto?

La razón de esto viene del mismo segundo tipo, ese momento cuando desapareció, fue a instalar los sitios de invocación, justo en lugares especiales y específicos, dando los libros y hechizos/conjuros necesarios para traer a ese mundo a quienes vencerian a Sarina… la cosa es que ella como era de esperarse, hizo algo que incluso lo dejó a él como un tonto y a el otro, riéndose a la distancia por ello.

—¿!FUE TU IDEA¡? !!ESO ES INTERVENCIÓN¡¡

—Si claro, culpa a quien deja que todo fluya como es y no a la naturaleza humana, claro, hechame la culpa de tu propia ignorancia, vamos, sigue, sigue, me encanta esa cara estúpida que tienes

Estuvieron en el momento donde una espada atravesó el corazón de Sarina.

—Así que ustedes… son lo que he escuchado, los llamados, Héroes de otro mundo…— dijo ella con los últimos respiros de su ser

—Si, y al fin hemos librado al mundo de ti… al fin…

Pero algo cambió, una baba salió del suelo y subió por su pie, aquel héroe solo, pues sus compañeros murieron y quedaron atrás, así que rico que hacerlo, peleó contra él Slime que empezaba a cubrirlo.

—¿El mundo está librado de eso? Claro que no… aún falta… falta atrapar a ese idiota… pero yo ya estoy muy vieja para eso

—¿Qu-e? ¿¡Qué es esto!? !LIBÉRAME, TE HE MATADO¡

—Solo mataste el cuerpo, no la voluntad… sabrás que serás parte de algo más grande y el siguiente hará lo mismo… espero y como… me dijo… valga la pena

Y antes de cerrar los ojos, aquel sujeto extraño de bombín la miró a un lado del héroe en su transformación y asintió mientras le agradeció con un gesto cordial sus esfuerzos.

»Bien… al menos algo importa

Y murió tranquilamente.

El héroe quedó transformado mientras tomaba posesión de todo y Lilimo hacia su trabajo dentro de él con ayuda del gran hechizo [Cordyposttum] modificado nuevamente.

—Y me dan una excusa más para lo mío— dijo ese sujeto y creó a los dioses de distintas ramas, conectando su ser con los héroes, como dijo, un seguro para ellos

Todo mientras los sobrevivientes de aquel grupo hacían lo que podían en recuperarse de eso, su voluntad así como la de Sarina traspasó el tiempo y situaciones inesperadas, todos con la finalidad de volver y hacer la voluntad de ese dios… salvó unos cuántos inconvenientes, desde enfermedades, hasta el inesperado cambio de realeza, en especial en el país más frío de ese mundo, así como el que prefiere la fuerza.

Todo por qué habían aguantado como fuera posible sin importar nada, nadie y justo como era de esperarse, volver a empezar. Ese grupo quedó con esa idea para volver a hacer lo mismo y unirse un día necesario para poder hacer lo que tenían que hacer… hasta claro, las cosas anteriores así como los demonios (que en todo ese tiempo estaban en sus asuntos como para meterse con los dioses ajenos) los mismos dragones y todo lo demás antes de ellos. Incluso una guerra por las armaduras, lo que dió inicio a que algunos héroes pudieran hacerse con alguna ya sea hecha de sus armas rotas o encontrar la de los Custodios creyendo que eran de ángeles y demonios, esa fue mucho antes incluso de lo que provocaron los dragones.

—Sabía que era buena idea quedarnos con el alquimista, pero creo que esa chica se llevó todo el crédito

Cada país y cada parte de esa fracción fue perdiendo fuerza, salvó uno, ese lugar donde sería Arcaida, no importando qué, no importando como, aquel mensaje de sus antepasados seguía vigente sin importar el tiempo que había pasado, no importaba incluso ser destruido casi hasta los cimientos, solo importaba la meta de todo el principio.

—Entonces, los sitios de invocación eran los lugares donde estos sujetos estaban antes — dijo Carmilla —, ¿Pero y Abbylion? ¿Qué es lo que pasa con esos?

—¿Qué más? Sí antes incluso en lo mío hubo quienes estuvieron en contra de lo que pasaba, Abbylion es lo que ahora está en contra de ellos, como país y como aliado de los demás, es el punto central de todo ya su vez lo último que podría detenerlos, los atisbos de la Reina

—La autodestrucción natural es interesante, a su vez algo complejo si sabes cómo empezó todo

Pero había algo más, algo en el asunto que no podía dejarse de lado.

—Al fin entendí también, que es lo que soy— dijo Jezabel—, el por qué soy como soy y también él… no me esperaba algo como eso o simplemente quise olvidarlo

—¿Y cómo te hace sentir eso?

—¿Satisfecho tal vez? No del todo feliz por saberlo, claro… pero, también hay algo que me llama la atención…

—¿Qué?

—No saben nada de él

—¿De quién?

—Alguien muy aparte de esos dos… pero siento que pronto lo volveré a ver en persona, regresemos, ahora por lo menos, nosotros sabemos que hacer, aún si eso significa hacer nada.

—¿Seguro?

—Hacemos justo lo que los otros tipos han hecho e hicieron para hacer menor desastre, no meternos hasta que no sea necesario, además, nadie ya confiaría en ti después de tu cagadero, no importa ya que hagas o digas, no importará

—...

—¿Si o no?

—Si

Y regresaron al presente, justo donde lo dejaron.

—Eso, me encanta esa honestidad, así que yo seguiré en lo mío, tú dedícate a solo disfrutar lo que puedas y en serio, ve con todo cuando te toque, yo haré lo mismo, es la maldita idea, ¿No?

—Si… hasta luego

Él desapareció y ella se quedó pensando en todo lo que había visto.

»Creo que entiendo algo… al menos alguien debía saber el por qué de las cosas, la verdadera razón de todo esto

Un juego del gato y el ratón, además de caprichos de un dios primordial extranjero… lo de siempre.

Sintió un movimiento en su cadera y el príncipe se había movido aún en sueños. Ella lo vió y sabía que de alguna manera, este tipo también era un seguro de alguien, posiblemente de otro antepasado que quería cambiar las cosas o simplemente, el primero de todos que quería terminar con todo aún si eso significa morir por ello.

»Si, realmente lo entiendo— dijo y volvió a acostarse mientras le abrazaba por el frente—, pero qué importa, nada importa… más sin embargo lo que no entiendo es la caja… como sea

Empezó a dormir otra vez o al menos intentarlo pero seguía pensando en esa caja.