Capitulo 15: Dos mismas Rutas

—¿Qué opina, profesor Axtarot?— preguntó Gabriele

Un pequeño grupo estaba con el ángel caído mientras este revisaba la armadura ya en control.

—Mmmhm, no es un hechizo muy fuerte, pero aunque logre quitarlo, siento que el tiempo en el que estuvo lo hará volver— respondió el ángel caído —, algo así como que ya está en todo el cuerpo, aunque lo limpie, hay seguridad que aunque sea un poco estará ahí para volver, como un germen, solo el que la puso, podría quitarla

—Pues quien lo hizo aún no recuerda como quitarlo— reclamó Marcus

Axtarot se rió un poco, después chasqueo los dedos y un cofre apareció a un lado, empezó a buscar algo dentro de ahí.

—Pues creo que tengo algo para al menos mantener a raya esto… debe estar por aquí…, !ah¡ aquí está

Sacó un anillo dorado demasiado simple y se lo dió a Lucio.

»A ver, prueba

Se lo puso y al instante toda la armadura fue absorbida por eso mismo como si fuera un muy pequeño agujero negro, quedando solamente Lucio con su ropa y el color dorado del anillo desaparecido, solo dejando un color oxidado.

»Woa, realmente ya era parte de la armadura, solo es cosa que Azrael pueda recordar cómo quitar eso

Lucio se quitó el anillo y suspiró profundamente de alivio.

—Yo no quiero esto, es demasiado para mí

—Te lo dije, dámelo, lo cuidaré… no de hecho, déjaselo a Axtarot— dijo Gabriele al tomarlo y después dárselo a ese profesor

—¿Eh?

—¿Segura?— preguntó el ángel igual de confundido

—Se lo pediremos si es una emergencia, además que si alguien de aquí tiene esto y lo sabemos, sería más incómodo por lo que pasó, más a quien mi hermano les hizo eso

—Es cierto — dijeron todos

—Lo guardaré entonces, gracias por depositar tu confianza conmigo

Y todo estaba bien, hasta que…

—No puedo creer que le desgarraras la entrepierna a tu cuñada— dijo Marcus queriendose reír para añadir más lastima de la situación

Lucio se sintió horrible de solo pensarlo y recordarlo, fue indirectamente, pero aún así se sentía culpable.

—Callate Marcus, no es gracioso— regaño Ritsumary con media normalidad en su voz

—Lo sé, lo sé, disculpa pero tenía que sacarlo de mi sistema

—Pobre Shiraishi— dijo Axtarot

—Ni tanto, se veía algo molesta de hecho cuando supo quién era la otra armadura— dijo Gabriele

Mientras tanto, la misma señorita Shiraishi estaba mirando tanto enojada como molesta a su hermana, ella por su parte tenía dos bolsas de hielo entre las piernas, si, así de fuerte fue el asunto.

—Y di que aún eres virgen

—!HERMANA¡

—Nononono, no, nada de "hermana" por el momento— replicó Shiraishi—, no me cabe en la cabeza el por qué usas algo que para nada, en absoluto y por ningún motivo tu usas, ¿Que esperabas que pasara? ¿Que fuera fácil? ¿que usando esto conquistarías el mundo?

Akatsuki estaba acostada, conciente y avergonzada por lo que pasó, ya no tenía la armadura, pero el recuerdo de lo que pasó, seguía fresco.

»Pero tampoco soy nadie para replicar o regañarte así, también lo hice…

—No trates de reconfortarme— dijo Akatsuki mirándola

—Es cierto— dijo Azrael apareciendo a un lado de Shiraishi

— Tío…

—¿Tío?

—Historia para después, pero si, aquí la señorita blanca no se que quería cuando nos conocimos y una amiga la golpeó a un punto que chocó contra una pared cercana

—Sigo arrepintiendome de eso, ya aprendí la lección…— dijo sintiéndose mal por recordarlo

—Como sea… verlas a ustedes es como ver dos gotas de agua, solo por el lunar de ella…

Akatsuki aún tenía ganas de preguntarle sobre lo de "Tío" pero por el momento solo empezó con...

—¿Eres el Rey Demonio?

—¿Cuestionas eso?

—Me han contado mucho de ti y todo lo que has hecho aquí… pensé que era una broma

—Bueno, todo depende de que tanto te quieras reír… ¿No?

—Ya veo, entonces dejémoslo así… ¿También debo llamarte tío?

—No, solo a ella se lo permito— dijo señalando a Shiraishi—, nadie, ni a su hermana puedo dejarle hacer eso

Shiraishi estaba más que complacida de escuchar eso.

—Entendido… profesor… por otro lado… ¿que paso con ellos?

—¿Tus guardias? Están en arresto domiciliario, de verdad tuvieron suerte, los Hundrest querían más diversión pero un intercambio de rehenes tampoco es tan malo

Shiraishi miró a su hermana y ella evitó eso.

»Como sea, le enviamos un informe a tu gente sobre lo que pasó, lo siento pero tuvimos que decir la verdad sobre el incidente, además que les regresamos la armadura por qué si la tenemos sería aún más problemático como ahora y más con Ritsumary

Akatsuki miro enojada a Azrael, pero este seguía indiferente.

»¿Que? De alguna forma se van a enterar, además, debiste prepararte más para eso, así que no es nuestra culpa

Y eso no podía negarse.

»¿Quieres irte de una vez?— preguntó el profesor

Akatsuki estaba pensando en eso, claro que le había preguntado, no había ordenado y si lo que escucho era verdad…

—Quiero ver lo que hay aquí

—Ok, me dices cuando sea suficiente y tú — dijo apuntando a Shiraishi—, eres responsable de ella mientras esté aquí

—Entendido, tío

—No soy tu tío

Y desapareció.

—Que sujeto más extraño

—Lo sé, todos lo saben…

Y su sonrisa se volvió algo melancólica. Akatsuki presionó más el hielo sin importarle que le empezara a quemar, había algo que quería decirle, pero no sabía cómo, no sabía cómo abordar el tema que las unia lo quisieran o no…

—Hermana… yo…

Shiraishi le extendió la mano en señal de detenerse.

—No tienes que decirlo, no hay manera en que podamos hablar de eso sin lastimar a la otra, no te fuerces, solo, vamos a seguir adelante, ¿si?

Y Akatsuki entendió que ella también se sentía igual, por mucho que ya había pasado algo de tiempo, tanto ella como su hermana aún les dolía lo que pasó, también comprendió que solo era cosa de lo que justo como sus padres habían querido, continuar ahora por ellas mismas.

—Gracias

Shiraishi le sonrió, era una situación de total empate y estancamiento, algo que jamás debería ser tocado entre ellas, claro que a medias, pero nunca directamente, siendo dejado como está.

»Entonces… ¿Puedo ver los alrededores?

—Dejame ir por una silla de ruedas

Momentos después, los curiosos no podían evitar mirar eso.

—Este es el salón de magia, la mayoría de veces pasan cosas explosivas pero que ayudan a comprender entre experimentos lo que debe y no debe combinarse— dijo al abrir la puerta y pasar a su hermana primero y después ella

—Dahert, suelta ese peróxido— dijo una alumna ahí dentro

—¿No Kabloom?

—Hay personas sin trajes protectores

—Ah, lo siento

Y si, hasta parecían del grupo Anti-bombas de algún escuadrón moderno.

—Mejor nos vamos, disculpa por interrumpir, Dahert, Nina

—Sin problema

Cerró la puerta y solo segundos después, la explosión cimbró ese espacio, increíblemente las ventanas no se rompieron y nadie parecía alarmado, se podría decir que era normal.

—Continuamos

—D-de acuerdo…

Akatsuki seguía mirando a su alrededor, los salones y a quienes las miraban.

—Es como ver una especie de trama de novela de suspenso— dijo uno

—Callate, nos pueden escuchar… pero tampoco lo niego

Y no podían ser molestos, ver a dos gemelas paseando por ahí y una ser apenas conocida era como para no hacer conjeturas hasta de ese tipo.

—Este es mi salón, el principal donde tomamos clases, los demás son suplementarios, aquí es donde principalmente se estudia todo lo referente a varios temas, los demás son el apoyo para eso

—¿Y dónde entrenan y todo eso?

—... ¿Enserio quieres ver?

—Solo es curiosidad

—Bueno, no es como si te negara eso, pero antes, quiero mostrarte algo

—Ok… ¿no va a ser desastroso?

—Mmh, digamos que es la versión pequeña

—No confío del todo en tus palabras, pero si me llevas ahí en confianza, creo que lo haré

Shiraishi se rió un poco por ver así a su hermana, Akatsuki solo evitó mirarla.

—!GUERRA DE COMIDA¡

Y antes que siquiera alguien lograra lanzar algo, involuntariamente con la mano aún con comida, la puso en su boca y mastico lo más rápido pero con cuidado que podía.

—Al siguiente que se le ocurra eso le haré comer las verduras más lentamente hasta que me diga que saben bien

La maestra Kyle comandaba a un salón entero de niños y niñas menores de edad en nivel escolar de primaria, todos estando a la hora del almuerzo, todos haciendo lo de niños pequeños y uno que otro intentando ser salvaje por su cuenta, pero todos controlados sin siquiera verlos.

—Deja de intentarlo Brawl— dijo una niña a lado de él que comía plácidamente

Los demás también pues nadie parecía molesto o animado como se esperaba.

—!Lo intentaré hasta que ella admita que es mala¡— grito el niño señalando a Kyle

—Lo soy, ¿contento?— respondió ella igual almorzando

—!Pero que lo demuestre¡— grito el niño

—Eso es tonto, ¿Por qué esa fascinación por qué tenga que admitir eso?— preguntó otra niña que comía una manzana como si nada

Y el niño se levantó, se fue hacia alguien más y la señaló con las dos manos.

—!Por esto…

Después avanzó a un lado donde había un adulto(?) más en el salón, pero este recargado en la pared, solo esperando algo.

»!Y esto!

—¿Y eso qué?— preguntó la misma niña—, ¿nos vas a decir que solo por qué trae eso y tiene a alguien cuidandola es mala?

Claro, desde que Cristel se presentó siempre traía una capucha que le cubría el rostro, ni que decir que el fortachon que siempre la acompañaba y que incluso jugaba con algunos de ellos.

—!Sabes los rumores sobre ella y que es hija del Azrael¡

La niña suspiró de molestia y cansancio y podía sentirse que no era la única, gritar eso ya era clásico y un disco rayado.

—Sé de rumores que mojas la cama, ¿me vas a decir que son verdad?— preguntó otro niño que sorbía un jugo.

Algunos niños escupieron comida y otros se rieron.

—!C-C-CLARO QUE NO¡

—¿Entonces? Además, si te quejas de que ella es mala y no se qué, ¿por qué seguimos vivos?

El niño se quedó pensando…

—Bueno… eso...

—Callate si no sabes y come, ya casi termina el almuerzo— respondió Kyle para terminar el asunto y posiblemente que no lo molestaran más

El niño regresó a su lugar, vencido y en silencio, claro que no sería lo último.

Cristel miró a la niña y al otro niño y asintió en agradecimiento, incluso Krampus lo hizo con una seña de pulgar arriba.

Después de eso y entre clases Shiraishi llegó con Akatsuki que pudo levantarse. La clase estaba a medio camino cuando las gemelas tocaron la puerta.

—Y mira que cosas, las molestias si se pueden multiplicar— dijo Kyle al verlas en la entrada

—¿Cállate, quieres?

—... es Kyle una Lord Demonio

—¿Lord Demonio?... entonces… mi país hizo tratos con un demonio

Akatsuki sentía que su cabeza le estaba empezando a doler.

—Kabloom… como sea, ¿que quieres, Shiraishi?— preguntó Kyle

—Solo le estoy dando un recorrido, además que Silver está fuera de combate

—Ah, si, otra vez ese idiota… luego me burlare, como sea

Se levantó de la silla junto a su escritorio y caminó hacia ellas.

—Hola, soy Kyle… ya dejé de ser condesa así que solo es Kyle la Lord Demonio, así que perdí mi demás nombre, puedes llamarme así si quieres

—Es mi hermana, Akatsuki…

Y Shiraishi miró a su hermana, más intensamente que nunca lo haría.

—¿Que?

—Nunca supe tu apellido

—¡¿QUÉ¡? ¿!ES UNA BROMA!?

—Nunca me lo dijiste a parte de solo tu nombre, además que lo escuché de los cuchicheos entre los soldados de tu país— respondió Shiraishi con un dedo en el oído por ese grito

Los niños se rieron de la situación, incluso Kyle lo hizo.

»Fuiste criada por alguien más, soy de apellido Kuromo de parte de mi padre, no me interesa del todo mi apellido o nombre original, más nunca escuché el tuyo

—Es Hiyori, nuestra madre se llamaba así… no lo olvides— dijo ella sería y no molesta solo no queriendo decir que era también su culpa

—No lo haré… entonces sonaría, Shiraishi Hiyori, me gusta, como sea, volviendo al tema, entonces, ella es mi hermana…

—Akatsuki Hiyori, mucho gusto, maestra Kyle

—Igualmente… dime, ¿que se siente ser su hermana?

—Perturbador

—¿Y ya te dijo sobre su no-novio?

Y el rostro de Akatsuki se volvió demasiado en poker face, hasta los niños se habían dado cuenta que ella no lo sabía.

—Uy, esto va a estar bueno

—¡Shhh!

Solo Shiraishi tenía un rostro tranquilo, en serio, no sabía cómo abordar el tema y aunque fuera de esta manera quería hacerlo, también lo había predicho para ella al traer a su hermana ahí con Kyle sabiendo que ella haría eso.

—¿Y decías de cosas que no se habían dicho?— preguntó Akatsuki aún saber cómo sentirse

—Iba a eso después de venir aquí

—Eso espero por qué hay mucho de lo que hablar

—Vaya que si— dijo Cristel en voz baja

Kyle presentó su salón con una sonrisa de victoria.

—Aqui es algo… digamos que de todo el desastre que es la academia, es el lugar más tranquilo que puedes encontrar…

—Salvo por ti— interrumpió Shiraishi

—Algo así— respondió Kyle sin inmutarse

«No se le va a quitar esa cara» pensaron todos ahí

Y demasiado de la nada una mochila voló hacia ella, pero increíblemente no reaccionó en absoluto, solo las gemelas se asustaron por eso.

—¿Eso es normal?— preguntó Akatsuki

—Bastante— dijeron todos

—Lo que no es normal es verla feliz todo el tiempo— dijo un niño

Y asintieron.

Otra mochila voló pero está vez regreso por dónde venía, derribando a quien la arrojó, pero ahora nadie reaccionó.

—Me siento tan mal por las maestras y maestros que no usan magia— dijo Shiraishi

Y nadie podía decir algo contra eso.

Después de explicar lo que eran las clases y cada una que se tomaban en todos los días, por el momento solo sería ese salón, ver cómo le iba y pensar o al menos experimentar si era posible tener más salones repartidos entre menos alumnos como ahí, así que todo ese edificio solo era para dos lugares especiales, ellas salieron de ahí, y ese lugar del que hable estaba junto a la primaria.

—¿Entonces?— preguntó Akatsuki

—... sobre eso, es complicado…— dijo Shiraishi al sostener un extremo de una cuerda

—Pues dímelo lentamente, no soy tan tonta para no entenderlo pero me acelero cuando no me dicen lo importante— dijo Akatsuki del otro lado de esa cuerda

Shiraishi solo sonrió un poco por esa actitud de su hermana.

Ambas estaban jugando a saltar la cuerda con niños aún más pequeños que los anteriores, Shiraishi le habló sobre Lucio.

—... que molesto es ese sujeto

—Lo se, y por eso es que lo amo, es lo bastante cínico como para enojarte solo un momento y decir que cosa no está tan mal

—Ehhh, me gustaría conocerlo

—Por ahora… no se puede, pero ya pronto, enserio lo harás,

Después estaban siendo las clientas de un restaurante de juego.

—Pero tampoco digo que este mal o lo diga seriamente… creo que haría lo mismo aún si eso es doloroso

—Ambos lo sabemos y más que nada, no se cómo podre sanar de eso, por lo tanto quiero seguir adelante, me he puesto una meta que deseo hacer, ¿tu que harás? No pregunte cómo te ha ido si no querías decirme

Akatsuki sentía que estaba algo lejos de ella en el sentido de que tenía al menos prioridades.

—No lo sé

Ambas estaban sentadas, mirando a más niños jugar entre ellos, algunos comiendo pegamento, otros persiguiendose o a una pelota, haciendo cosas de niños, incluso una niña que tenía la funda de una daga y estaba rayando las paredes intentando escribir algo, y todos los demás haciendo cosas de niños.

»… después de lo que pasó, lejos del desastre que se veía venir por tus compañeros y el retiro del clan Asturias… me quedé llevando mi luto como debía ser… pero no me sentía demasiado tranquila a pesar de todo— dijo y recargó su cabeza en sus manos apoyadas en sus muslos—, papá me dejó un lugar donde vivir, gente que me sirve, todo lo que me vendría bien siendo mi estatus, pero no es suficiente

Después miró a su hermana.

»Por eso quería venir a verte, preguntarte cómo hacer algo para seguir adelante… veo que aunque igual tienes todo, aún sientes que falta algo

Y no se equivocaba, Shiraishi también lo entendía, lo entendía tan perfectamente que aunque el contexto de su hermana era diferente, sentía que era igual al de ella.

— Hablé con mi tío de esto… dice que pasé por las fases de duelo… pero que aún necesito mi catarsis… un momento, un lugar, una persona que acepte mis sentimientos, no de amor, no de amistad, sino mi verdadera persona…

Apoyó el cuerpo al poner las manos detrás su cuerpo y mirar hacia el techo de aquel gran salón contrario a su hermana.

—¿Y tiene razón?— preguntó Akatsuki curiosa mirando por un lado a su hermana

—¿Tu no estarías siempre en guardia ocultando lo que eres?

—... cierto… se podría decir que yo también tengo que tener la mía… además de las prioridades aparte de mi vida…

Y después miró a los niños nuevamente.

»Por eso me mostraste esto… por lo que hicieron ellos, por lo que van hacer...

Shiraishi se volvió a acomodar.

—Hermana, puedes hacerle al lugar lo que ellos y tú quieras, pero no van a pagar justos por pecadores, tocan este lugar que en absoluto no tiene nada que ver con lo demás… sus cabezas serán nuestras

Akatsuki se acomodó como ella y suspiró.

—Que intensas prioridades tiene mi hermana, me alegro ser la tranquila de entre las dos, entendido, haré lo imposible por marcar eso en esos tipos cuando vuelva, pero en serio no prometo que ellos obedezcan

Shiraishi abrazó a su hermana.

—Gracias, haz lo que puedas

Y todo siguió normal hasta la tarde, justo cuando todo terminaba y todos tenían que ir a sus habitaciones en el gran edificio, los niños pequeños eran traídos a sus casas por carruajes de lo que hoy podría decirse que era el autobús escolar.

—¿Quieres dormir conmigo?— preguntó Shiraishi

—... Eso es bastante vergonzoso

—... si no quieres no te obligare, normalmente suelo dormir en otra habitación pero ahora estás aquí…

—¿Otra? No será…

Y Shiraishi se puso roja de vergüenza.

—Es complicado, mañana te lo explico

—Mas te vale… por cierto, quería preguntarte algo muy aparte de todo esto

—¿Qué cosa?

—¿Contra quién choque cuando sea quien sea el de la armadura me arrojó? ¿sigue vivo?

—Viva y como dije, mañana te lo explico