Ya era de tarde cuando todas llegaron junto con D'narda y un montón de bolsos que iban siendo cargados por el clon de Aegon, todas venían contentas y sonriendo hasta que entraron en el apartamento y se encontraron con Aegon y Jennifer.
Esto no debería ser tan extraño pues ya habían visto una foto de Jennifer y sabían que era la abogada de Aegon. El problema era que cuando entraron Jennifer estaba sentada sobre Aegon.
"Esta vez sí lo linchamos." Le dijo Liz al resto. "No sé de qué hablan, pero estoy con ustedes." Les dijo D'narda algo confundida, pero comenzaba a hacerse la idea de lo que ocurría.
"Esa pelirroja es la más celosa de todas. No entiendo, con tanto cariño que le doy." Le dijo Aegon a Jennifer mientras apuntaba a D'narda. "Tú y yo no tenemos nada." Respondió la mujer algo indignada de que la estuvieran incluyendo.
"Por ahora." Esta vez fue MJ quien habló sorprendiendo a D'narda, Felicia pensaba igual. "Probablemente tengas razón." El resto solo asintió.
D'narda estaba con la boca abierta al ver como todas solo asumían que ella sería otra más de las mujeres de Aegon, por quien la tomaban. El chico era increíblemente apuesto y claro que a ella le gustaría que él la tomara entre sus brazos y… ¿por qué diablos pensaba algo así? Se preguntó. "Saben que no les seguiré el juego, estaré en mi habitación mientras ustedes aclaran lo que sea que esté ocurriendo aquí."
Todas miraron a D'narda de manera sospechosa, incluso Jennifer, el instinto de mujer les estaba advirtiendo. Cuando se hubo marchado Jessica fue la primera en acercarse y Jennifer se sentó al lado de Aegon.
"Ya podemos imaginar lo que pasa aquí, pero ¿te importaría explicarnos? Estoy interesada en saber con qué historia vas a salirnos esta vez."
Aegon se quedó en silencio por unos segundos pensando como escapar de la furia de varias mujeres. Dejó escapar un suspiro. "Ella me sedujo y fui víctima de la tentación."
"¿¡Yo qué!?" Gritó Jennifer cuando escuchó lo que él había dicho, era una sorpresa que solo lo hubiera tomado por el cuello y no se hubiese transformado y estuviera destruyendo todo a su alrededor. "¿Cómo puedes decir algo así? ¿Por qué todo tiene que ser una broma contigo?" El resto de las chicas solo asentía, Rogue incluso estaba grabando todo con su smartphone.
"¿Qué quieres que diga? El día que te conocí no me había esperado que fueras tan hermosa, caí en tu trampa carnal en el instante mis ojos observaron ese bello cuerpo que tienes. Todas aquí saben que soy muy débil antes la belleza femenina. Si hay algún culpable de mi conducta, esas serían ustedes."
Todas se quedaron boquiabierta al oír tal deducción. Ahora ellas eran las culpables de que él fuera un mujeriego. "Así que ahora nosotras somos las culpables." Gwen miró a todas incluida Jennifer, ella ya era parte de esto. "Creo que todas estaríamos de acuerdo que un castigo no está fuera de lugar aquí."
"Esa es una buena idea."
"Estoy de acuerdo."
"Me gusta."
"Si, hagámoslo."
Estas fueron algunas de las respuestas que recibió. "Ya que todas están de acuerdo, esto es lo que propongo. Lo tendremos sin sexo durante toda la semana. Ya sabemos lo goloso que es y cuál es su dulce favorito. Así que se lo quitaremos toda una semana."
Todas se quedaron en silencio mirándose unas a otras hasta que aceptaron.
Aegon por parte su permanecía en silencio viendo como su existencia había sido ignorada por completo y ahora era castigado sin poder quejarse. Pero solo era una semana sin sexo. ¿Qué tan mal podía ser?
Una vez que todas se pusieron de acuerdo Ororo se acercó a Jennifer y se presentó. "Yo soy Ororo Munroe, es placer conocerte Jennifer. Parece que seremos cercanas de ahora en adelante."
Jennifer se quedó por un momento sin saber que hacer, pero se recompuso, ella era la persona de mayor edad en la habitación. "Jennifer Walters, el gusto es mío Ororo. Y si, parece que todas hemos sido víctimas de cierto demonio." Ambas se echaron a reír. Luego continuaron las presentaciones del resto.
Media hora después todos estaban conversando y D'narda se había vuelto a unir al grupo. Aegon había aprovechado para explicarles a todos la situación de Jennifer y explicarle a Jennifer los poderes que tenían algunas de las chicas y quien era D'narda.
"Algo más que quiero decirles. Mañana Jennifer y yo haremos un viaje al Zahara, es mejor comprobar si ha sufrido algún cambio debido a la transfusión de sangre que recibió. Además, me gustaría que todas fueran conmigo. Creo que ya es tiempo de que reciban las habilidades de las que habíamos hablado. Esto es solo si lo desean, pero espero que escuchen mi concejo y acepten."
"¿Estás hablando de recibir habilidades como las de Spiderman y el Capitán América?" Preguntó Felicia emocionada.
"Exacto."
"Espera, ¿puedes hacer eso?" Jennifer no podía creer lo que estaba escuchando.
"Tengo mis métodos, mañana los verás."
"Hay un problema." Liz les dijo a todos. "¿Cómo haremos para justificar nuestra ausencia en el colegio? Podrían avisarles a nuestros padres."
"Deja que yo me encargue de ello." Le contestó Aegon sin darle mucha importancia, no es como si no tuviera las vías para darle solución a tan insignificante problema.
El ambiente en el apartamento volvió a ser animado como siempre, pero Aegon no recibió nada más que no fueran algunos besos, dejándolo un poco frustrado. Cuando ya se hacía algo tarde todas comenzaron a marcharse, estaban emocionadas por el viaje que estarían haciendo.
Al final solo quedaron Jennifer y D'narda. Jennifer le dijo que dormiría sola, el día había sido demasiado con lo que lidiar y necesitaba algo de tiempo a solas. Aegon abatido miró a D'narda con pequeñas esperanzas. "Ni siquiera lo pienses." Fue lo único que le dijo la mujer, dejándolo solo en la sala.
Viendo que aún era bastante temprano Aegon tomó un baño, se cambió de ropas y decidió salir un rato por la ciudad. Tal vez encontraba algo interesante o podía presenciar algún acto heroico de Peter o Cindy.
Aegon estuvo deambulando por la ciudad por unas horas en las que pudo presenciar a Peter balanceándose por los edificios detrás de un automóvil, algunos patrulleros también eran parte de la persecución por lo que debía ser un atraco o robo de algún tipo.
Ahora que veía a Peter en acción recordó que hacía algún tiempo no había escuchado noticias del Duende Verde. Comenzó a pensar que debería darse prisa en lidiar con el Duende Verde antes de que Spiderman se le adelantara. Aegon no soportaba a Norman Osborn así que esta sería una buena oportunidad de desahogarse.
Mientras caminaba terminó llegando cerca del club donde había conocido a Ananastasia, era como si el destino le estuviera guiando al pecado, pero su voluntad era fuerte, no caería tan fácil. O así pensó y estaba a punto de dar media vuelta y alejarse del club, pero en ese entonces capto algo que atrajo su curiosidad.
Tenía una melena rosada hermosa, con unos ojos verdes cautivadores. Su cabello caía por debajo de su trasero el cual tenía una bella forma de corazón. También contaba una delantera robusta en la que podrías enterrar el rostro.
Aegon creyó que por un momento se había lamido los labios. Poco a poco sin siquiera darse cuenta se había acercado a la entrada del club.
Por supuesto lo que le había llamado la atención no era la belleza de la chica, él no era esa clase de hombre, claro que no. Lo que le había llamado la atención era que la chica era una mutante, algo que ya podía reconocer fácilmente a estas alturas.
Por lo que podía escuchar desde donde estaba, la chica había venido con la esperanza de obtener un trabajo como bailarina exótica y Aegon estaba seguro que lo conseguiría. Cualquiera podría asegurarlo después de ver la apariencia de la chica.
Antes de que otra chica mucho menos atractiva que la acompañaba y era la que estaba tratando de conseguirle el empleo terminara de hablar con el portero para que le permitiera entra a ambas Aegon se acercó a ellas.
"Disculpa." La atención de ambas chicas y la del portero se centró en Aegon. "Escuché que buscabas trabajo." Aegon se dirigió directamente a la chica de cabellos rosas sin prestarle atención a los otros 2.
La chica estaba un poco insegura al ver al apuesto joven que se había acercado a ella y ahora le estaba preguntando si buscaba trabajo. Ella solo asintió.
Su amiga se interpuso entre ambos. "Mira chico no sé qué escuchaste o que pensaste, pero no somos ese tipo de chicas."
"Qué tipo de chicas son ustedes no me interesa en estos momentos, pero tu amiga podría escuchar lo que tengo que proponerle. Qué tal si les invito un café y mientras tanto me escuchan. No tienen nada que perder."
"Una noche de trabajo eso tenemos que perder."
"Sabes, realmente solo quiero hablar con tu amiga, no tengo ningún interés en ti." La chica iba a contestarle, pero vio como Aegon la ignoró y se acercó a su amiga y le susurró algo al oído.
"Lisa, voy a aceptar su propuesta. De todas maneras, no me siento segura de sí quiero trabajar aquí o no."
"¿Qué te ha dicho para que cambies de opinión Lori? ¿A caso te ha amenazado? Si es así…"
"Nada de eso, te contaré más tarde." Lori se dirigió a Aegon. "Podemos conversar en el café que hay más adelante cuando se dobla aquella esquina."
Viendo que la chica era cautelosa con él Aegon decidió aligerar un poco el ambiente y se dirigió a Lisa. "Sabes, quiero hablar en privado con tu amiga. Eso no significa que no puedas venir al café también y esperarla sentada en otra mesa desde donde puedes mirarla. Yo invito."
La proposición de Aegon pareció aligerar la tensión y Lisa aceptó su propuesta así los 3 se dirigieron a la cafetería que había mencionado Lori.