Capítulo 38: Shizuka mostrando su utilidad

--- (Perspectiva Mikoto Kiba) ---

¡¿Maldita sea cuanto tiempo piensa tardar?!

Luis se quedó a pelear con los zombis para permitirnos escapar lo que solo definirse como una misión suicida. No quiero admitirlo que estoy muy preocupada por una persona que acabo de conocer, pero no puedo negar mi creciente ansiedad al recordar la expresión cansada de Luis mientras luchaba para protegernos.

Mi preocupación solo creció cuando un sonido similar a una bestia peleando con una máquina perforadora resonó del lugar donde debería estar Luis.

Desde la distancia pudimos ver una explosión que debería haber destruido la entrada del colegio, solo alguien como Sayo-san o Yuko-san podrían sobrevivir a eso, pero incluso ellas no saldrían ilesas.

No fui la única que estaba preocupada, el grupo de alumnas y profesoras que fueron rescatadas por Luis estaban ansiosas, una mujer que no es de esta escuela se desmayó al pensar que Luis podría haber muerto. Tuve convencer a una estudiante llamada Saeko de que solo seríamos una carga si tratábamos de ayudar ya que la chica estaba por correr para intentar ayudar.

Yo también quería ir a ayudar, pero recordando como Luis tuvo que sobre esforzarse para protegerme me hizo detenerme, no quiero ser una carga y provocar la muerte de quien esta dispuesto a arriesgar su vida para protegerme.

Mientras el tiempo se terminaba mi corazón se llenaba de ansiedad.

Para evitar ser consumida por la preocupación me centré en mi odio por el grupo de estudiantes que se fueron por su cuenta.

Luis estaba arriesgando su vida para protegerlos y esos ingratos querían abandonarlo en la primera oportunidad. El peor de todos fue el pedazo de mierda andante que finge ser humano.

Shido Koichi, hijo del ministro. Usando las conexiones de su padre ese hijo de perra ha estado haciendo lo que se le da la gana, amenazando estudiantes para que se acuesten con él, poniendo cargos falsos contra los profesores que van en su contra e incluso hay registros de que ha matado a varias mujeres debido a sus fetiches desenfrenados.

Shido Koichi es de las escorias mas repugnantes que contaminan el mundo y ni siquiera un apocalipsis pudo hacerlo recapacitar. Cuando llegamos a los camiones, el grupo de Shido Koichi llegó corriendo para que los salváramos.

Quise dispararle cuando lo vi, pero ya no tenía balas. Arashi y Chikage pensaban igual que yo ya que conocemos las acciones de este imbécil, lamentablemente no todos pensaban igual y un estudiante de cabello negro les ofreció ayuda. No fue el único, varios estudiantes quisieron ayudarlo ya que no conocían la verdadera cara de esa basura.

Afortunadamente no todos los estudiantes eran ignorantes de la naturaleza de esa basura ya que se opusieron a ayudarlos sin embargo la mayoría de los estudiantes eran personas civilizadas que ayudarían a otros por lo que Shido Koichi y su grupo se unieron a nosotros.

Shido comenzó un discurso sobre la necesidad de un líder que dirigiera a los sobrevivientes a un mejor futuro, era una mierda sin sentido que logró conmover a la mayoría de los estudiantes poniéndolos de su lado.

Shido Koichi no estaba conforme con engañar a un montón de idiotas e intentó presionar para que lo siguiéramos, sus ojos no se alejaron de las maestras y enfermeras de la escuela. Me preocupaba que Marikawa-san y Sakurada-san lo siguieran ya que son conocidas por ser cabezas huecas pero contrario a mis creencias las dos se opusieron firmemente a seguirlo mientras argumentaban que debían esperar a Luis.

Shido Koichi quería actuar amenazante usando a los estudiantes para presionar con números, pero la creciente intención asesina de la estudiante Saeko lo detuvo. Me sorprendí por la reacción de Saeko a la vez que me alegraba de tener una posible compañera confiable.

Pude recordar que la familia Busujima son una prestigiosa casa de guerreros que se remontan al periodo Edo, todos los miembros de esa familia son gente estricta y dedicada que morirían antes de traicionar a sus compañeros.

Black Label tiene algunas conexiones con la familia Busujima ya que Yuko-san fue discípula del anterior patriarca de esa familia.

No solo Saeko amenazó a Shido Koichi con su presencia, una chica de cabello blanco y una chica de cabello castaño parecían querer matar a Shido Koichi por proponer abandonar a Luis.

Mi grupo se unió a esas chicas y al final Shido Koichi y su grupo se fueron asustados, pero juzgando la mirada que tenía al irse estoy segura de que buscara causarnos problemas.

Es una lástima haberme quedado sin balas, la próxima vez que lo vea debo matarlo.

Así es como nos quedamos esperando, después de una discusión decidimos que esperaríamos una hora mas antes de irnos ya que era peligroso quedarnos quietos en un área abierta.

Cuando quedaban 10 minutos y mi ansiedad estaba al borde de explotar finalmente vimos a Luis acercándose mientras cargaba a dos estudiantes.

No parecía herido y solo se veía cansado, aunque me pregunto porque está sin camisa. Al menos puedo ver que no fue herido así que debería estar bien aunque viendo su cuerpo puedo ver toda clase de heridas que solo se verían en un soldado o un mercenario experimentado.

Siento mas curiosidad sobre la identidad de Luis, pero al menos estoy segura de que no es un mal tipo como el pedazo de mierda que se hace pasar por profesor.

"¡Luis-chan!" – Marikawa-san corrió al ver a Luis.

No fue la única, varias de las mujeres del grupo fueron a abrazarlo, al parecer es bastante popular con las mujeres…

¡No estoy molesta!

Luis dejó a los dos estudiantes inconscientes y entró en el autobús, me mostró una sonrisa amable a lo que hice una cara molesta. – "¡Hmp!"

No se porque puse esta actitud al verlo rodeado de mujeres, debe ser porque me molesta que tardara tanto en volver, eso debe ser.

"Me alegra ver que estas bien" – Contrario a mi actitud gruñona, Luis me dio una palmadita en la cabeza y entró en el autobús.

Se sintió agradable, quería hablar con él, quería preguntarle si sabía lo que fue la explosión anterior, pero al entrar lo encontré durmiendo en un asiento. Decidí dejar las preguntas para después, debe estar cansado por lo que necesita dormir.

"¿Alguien tiene una sugerencia de a donde deberíamos ir?" – Pregunté al grupo ya que no podía pensar a donde ir.

Podríamos dirigirnos al hospital para reunirme con los demás miembros de Black Label pero me preocupa que los demás estudiantes no puedan sobrevivir.

Cuando el caos comenzó fui contactada por la directora del hospital, Fiona-san. Ella mencionó que la situación en el hospital no era del todo buena ya que muchos pacientes se volvieron violentos y las cosas se estaban saliendo de control por lo que tendrían que evacuar al personal del hospital.

La agente de Black Label es fuerte por lo que estarán bien, el problema es que no he podido volver a contactarlos después de eso por lo que no se si siguen en el hospital.

No puedo pensar en un lugar seguro donde refugiarnos así que quería ideas.

Todos parecían en la misma condición ya no parecían conocer un lugar seguro para descansar. Necesitamos descansar o podríamos ponernos en peligro si seguimos peleando sin descanso.

"Ummmm creo que la casa de Rika-chan sería un buen lugar~" – Marikawa-san habló con voz alegre. – "¡Es un lugar grande y tiene una gran barda para seguridad!"

Marikawa-san extendió los brazos para tratar de mostrar lo grande que era el lugar, pero solo esta acentuando lo grande que es su pecho.

"Suena bien, vamos a ese lugar" – Luis habló con voz cansada mientras seguía con los ojos cerrados.

Al parecer sigue alerta mientras intenta descansar, es similar a nosotros como asesinos profesionales. Realmente quiero conocer la identidad de Luis.

Al final elegimos ir a la residencia donde se quedaba Marikawa-san, ella se queda en casa de su mejor amiga ya que queda cerca del colegio y su amiga siempre esta de viaje por su trabajo.

En el camino encontramos algunos infectados pero la mayoría de ellos parecían dirigirse a otra región de la ciudad por lo que pudimos avanzar.

Por sugerencia de Luis pasamos por un par de tiendas para vaciarlas ya que nos faltaban suministros.

Insistí en que Luis debía descansar mientras cargábamos los suministros, pero él fue quien se aseguró de que las tiendas fueran seguras además de ser el primero en pelear con los infectados para proteger a las estudiantes encargadas de cargar los suministros.

Luis fue claro en que todos debían cooperar para ayudar al grupo por lo que nos dividimos en dos grupos, los que podían pelear eran la defensa mientras el resto subían los suministros al autobús.

Después de asegurar bastante comida nos dirigimos a casa de Marikawa-san, el problema fue que a medio camino encontramos un grupo de delincuentes que se pusieron en medio del camino para evitarnos el paso.

Marikawa-san era quien conducía y se detuvo al ver a gente sana en medio del camino, yo le insistí que los atropellara ya que puedo reconocer basura cuando la veo, pero Marikawa-san es demasiado amable.

"¡Bajen del puto vehículo!" – Uno de los delincuentes comenzó a gritar mientras agitaba una tubería como arma.

"¿Qué pasa?" – Luis preguntó al sentir que nos deteníamos, el esta muy cansado y apenas parece prestar atención al entorno lo que me preocupa.

Estaba por explicarle cuando el repentino sonido de un golpe en la puerta nos llamó la atención. – "¡Dije que bajaran del puto auto!"

La expresión de Luis se volvió mala, sin decir una palabra se puso de pie y miró a Marikawa-san. Ella bajó la cabeza como si comprendiera que hizo algo malo.

Luis solo suspiró y le dio unas palmaditas en la cabeza. – "No sé qué pasó, pero en el futuro no te detengas, esos tipos no son buenas personas y sería terrible si te hacen algo"

Marikawa-san asintió como una niña siendo regañada. Luis abrió la puerta del autobús y salió.

"¡¿Maldito imbécil quien te has creído?!" – El delincuente gritó con enojo antes de ser golpeado en el estómago.

El delincuente no pudo decir nada ya que estaba tirado en el suelo escupiendo sangre, ese golpe debió romperle un par de costillas.

"¡Lárguense!" – Luis gritó con furia a los delincuentes.

Luis no parece una persona violenta, pero muestra una actitud decidida en momentos de necesidad. Me preocupaba que Luis fuera demasiado blando por la forma en que arriesgaba su vida para salvar a otros, pero parece que mis preocupaciones eran en vano, Luis tiene el carácter adecuado para usar la fuerza en momentos adecuados.

Los delincuentes comenzaron a maldecir mientras agitaban sus bates y palos. Antes de que se acercaran a Luis para pelear Saeko bajó del autobús y se paró frente a Luis mientras levantaba su espada de madera. – "¿Puedo encargarme de ellos?"

Me sentí extraña al ver la actitud de Saeko. Por lo que se dé la familia Busujima ellos son directos y decididos, no pedirían el permiso de otros para blandir sus armas y siempre pelearían de frente. El hecho de que un Busujima pida permiso para pelear representa que ha reconocido a esa persona como su maestro.

"Encárgate de ellos" – Luis asintió.

Saeko corrió hacia los delincuentes, con un corte diagonal golpeó la cabeza de un delincuente lanzándolo a un par de metros, ella esquivó un golpe con un bate de acero y dio una estocada al pecho de otro delincuente.

Cada golpe de Saeko era un golpe a un punto vital y por la fuerza usada se veía que ella estaba tratando de incapacitarlos de forma permanente. Ella puso cuidado de no matarlos, pero es posible que esos delincuentes no puedan volver a caminar.

Después de ese breve incidente finalmente llegamos a casa de Marikawa-san. La enfermera no exageraba al decir que este lugar era seguro, por la forma y bardas en el edificio puedo decir que la dueña del lugar está relacionada con la policía, el ejercito o tiene experiencia en el campo de batalla.

Metimos el autobús y nos preparamos para descargar los suministros. Luis, Saeko, Asashi y un estudiante llamado Takashi fuimos a comprobar que no hubieran infectados. Takashi no me agrada ya que fue uno de los estudiantes que ayudaron a la basura de Shido Koichi pero al menos recapacitó al ver la actitud de esa basura.

El resto de las personas que podían pelear se quedó para proteger a la gente el autobús.

En la casa encontramos un almacén de armas y un vehículo blindado que serían útiles para sobrevivir. Fue una excelente idea venir aquí.

Con ayuda de Asashi recogimos las armas para comprobar que funcionaran y tenerlas en un lugar seguro, no confío en todos los estudiantes que nos acompañan ya que algunas de ellas tienen historiales cuestionables.

Cuando le mostré las armas a Luis él me pidió que me encargara de cuidarlas. Luis parece similar a nosotros, un miembro del bajo mundo por lo que mostrar este nivel de confianza en alguien que acaba de conocer me hace sentir un poco de sospecha, pero principalmente me hace feliz, después de todo hemos peleado hombro con hombro en una situación de vida o muerte.

Después de revisar el lugar y ver que estaba limpio finalmente descargamos los suministros mientras nos repartíamos las habitaciones para descansar.

Estaba por proponer que comiéramos y habláramos para relajarnos, pero un grito me llenó de miedo. "¡Luis!" – Saeko estaba en pánico cuando Luis cayó inconsciente de forma repentina.

Al ver que Luis era sostenido por las dos enfermeras de la escuela me sentí asustada, me asustaba que el pudiera estar herido, que algo malo le pasara, que hubiera muerto. Desde la muerte de mi hermano esta era la primera vez que sentía miedo.

"Está bien, solo esta muy cansado, lo llevaré a mi habitación para que pueda descansar" – Marikawa-san habló después de ver la condición de Luis.

El par de enfermeras y Saeko se llevaron a Luis para dejarlo descansar.

Luis puso gran esfuerzo para protegernos, merece un largo descanso.

El resto del grupo nos quedamos en la sala, el ambiente era sombrío por todo lo que experimentamos y nadie parecía de humor para hablar.

"¡Esto es una mierda! ¡Vamos a comer!" – Dejé salir un grito frustrado, normalmente suelo actuar como una dama educada pero mi verdadero yo sale en situaciones estresantes.

El resto del grupo me siguió y comenzamos a comer. Marikawa-san y Tachibana-san, el par de enfermeras volvió y se unió a nosotros mientras Saeko se quedaba para cuidar de Luis.

En algún momento alguien sacó bebidas alcohólicas y después todo se volvió borroso.

Ese tonto Luis, ¿Por qué las mujeres lo rodean tanto?

¡Es un tonto!

Pero es un tonto un poco lindo…

¡B-Baka no es como si me gustara hmp!