Mi hermano, Xiao Zhan, es mi medio hermano ya que tenemos diferente madre y padre. Es muy guapo y su existencia es como la de un ángel, incluso cuando respira puede salvar a una persona. Debido a él, yo era como una repartidora ayudándole a recibir muchas cartas de amor.
—Ge. Aquí están tus cartas de amor de este día—dije mientras ponía una caja llena de cartas de amor sobre la mesa.
Mi hermano estaba luchando con la carne hasta que me escuchó. Se volteó y sonrió cuando vio que mis cejas estaban fruncidas —Zu Er-ah, ya te dije que no recibieras las cartas—me dijo mientras apagaba la estufa de gas.
Mire a mi apuesto, amable y gentil hermano mayor. Tan alto, su apuesta cara no tenía ningún ángulo muerto, sus ojos son brillantes como si tuvieran diamantes, su nariz es fina y sus labios que siempre sonríen hace que el corazón de una persona se derrita. Si no estuvieran relacionados por sangre, ella ya lo habría perseguido.
—Vamos a comer—dijo mi hermano para después preparar la mesa.
¡Mira! ¡Incluso cocinaba! Puede lavar ropa. ¡Incluso limpiando la casa lo hace! Me senté frente a mi hermano y comenzamos a comer. ¡Mi hermano es un ángel enviado por el cielo! Lloré en mi corazón, mientras comía la comida de cinco estrellas de mi hermano—¿Cómo no puedo tomarlos?—pregunté—Las cartas son para ti—le dije.
Mi hermano sonrió—¿Qué hay de ti?—me preguntó—¿Hay alguien que te guste?—me dijo mientras ponía verduras en mi plato.
—Hmph. Si encontrará a alguien más guapo que tú hermano—le dije y le sonreí divertida a mi hermano.
Mi hermano negó con la cabeza y suspiró—Quién sabe. Tú puedes encontrarlo mañana—dijo mi hermano y seguimos comiendo.
Ella no sólo debe de adorar la mirada de su hermano, si no también creer en sus palabras. Su hermano es realmente un ángel. ¡Realmente había encontrado a un chico guapo en la escuela!
—Wang YiBo...—murmuré bajo mi aliento cuando lo vi correr hacia la cancha con sus amigos. Taché a sus amigos y solo me centre en él. Sentía que mi mundo se movía junto con Wang YiBo. Sus ojos se volvieron en forma de corazones mientras lo miraba.
¡A mi hermano le gustará definitivamente! Pensé.
—Oppa—llamé a mi hermano mientras se estaban atando los cordones de los zapatos en la sala de estar.
Mi hermano me miró confundido. ¿Aprendió coreano ahora? pensó.
—¿Hm?—mi hermano me miró fijamente—¿Tú encontró uno realmente?—me dijo sorprendido.
Asentí con la cabeza mientras miraba a la nada, mis ojos soñaban y mi sonrisa dulce aparecía. —Wang YiBo... él está patinando, está bailando, está jugando al baloncesto. Wang YiBo...—murmuré, incluso mi voz soñaba. Mis mejillas estaban enrojecidas, recordando la primera vez que lo conocí—Ah... estoy muerta—dije mientras se desplomaba en el sofá de la sala. ¡Wang YiBo es perfecto! ¡Como su hermano mayor!, pensé.
Xiao Zhan acababa de mirarla, desconcertado por su comportamiento. ¿Wang YiBo? Pensó.
🤡«¡No te lleves a mi hermano!»🤡
Días más tardes, Song Zu Er invitó a Xiao Zhan a ver un torneo de baloncesto—Hermano, más tarde, si ves al hombre más guapo del equipo, ¡ese es Wang YiBo!—dijo y se rio cuando vio a sus compañeros de escuela, levantaron banderas de Wang YiBo.
—Veo uno—dijo Xiao Zhan.
—¿Dónde?—Song Zu Er pregunto, pensando en Wang YiBo.
—Aquí—dijo Xiao Zhan, mientras señalaba a la pantalla de su teléfono-celular, reflejando su cara.
—Pft- —Song Zu Er se rio y asintió—Tienes razón, ¡Eres el más guapo, hermano!—le dijo.
Xiao Zhan también se rio con ella. Luego, la cancha completa se lleno con chillidos cuando los grupos que jugaban uno contra el otro entraban. Xiao Zhan sintió que sus tímpanos serían perforados por sus gritos. Se escapó de la cancha y se fue a la parte trasera de las gradas. Se apoyó en la valla de la escuela, mirando la cancha desde la distancia. Vio como el juego comenzó y los chillidos se volvieron más fuertes. Supuso que los estudiantes terminarían sus gritos cuando llegaran a la primera mitad. Y así se quedó él, esperando el silbato del arbitro, indicando la segunda mitad.
—¡Hermano!—exclamó Song Zu Er cuando por fin vio a Xiao Zhan—¿A dónde fuiste?—preguntó.
—Fui ha traer unos refrescos—dijo mientras le entregaba una lata de Pepsi a Song Zu Er.
Song Zu Er sentía que su corazón se derretía al sentir las miradas celosas de sus compañeros. Ella sonrió a Xiao Zhan—Gracias, hermano—dijo y comenzó a tomar la bebida orgullosamente.
¡Espero que te ahogues!, los estudiantes pensaron, queriendo que Xiao Zhan le dieran algo, incluso una simple hoja aceptarían.
Un segundo más tardes y Song Zu Er se ahogo. Xiao Zhan le entrego un pañuelo para que se limpiará la boca.
Wang YiBo se volteo cuando sintió una mirada sobre él. Vio una linda estudiante sonriéndole. Sin embargo, sus ojos se cambiaron y vio a un hombre guapo al lado de la chica. Está aquí. Pensó, sus labios sonrieron subconscientemente mientras se sentía vigorizado. El tercer tiempo comenzó e inmediatamente le robó la pelota a su oponente. Corrió donde se encontraba el cesto del equipo contrarío y lo arrojó hacia allí. Sin embargo, su lanzamiento fue demasiado fuerte y reboto la pelota del cesto de baloncesto. Entonces, voló hacia las gradas.
Los estudiantes esquivaron inmediatamente la pelota entrante. Desafortunadamente, Song Zu Er estaba muy ocupada suspirando para Wang YiBo. Y... sí, ella fue la muy desdichada de recibir la pelota en la cabeza—¡OUCH!—exclamó cuando la pelota se golpeo con su cabeza. Se sintió como si hubiera sido atropellada por un camión y volada por este mismo, luego chocó contra la pared de concreto, cayo al suelo cementado y se agrietó la cabeza.
—¡Zu Er!—exclamó Xiao Zhan cuando inmediatamente vio herida que había en la cabeza de Song Zu Er—Pensé que esquivarías la pelota, ¿no la viste?—preguntó, su voz estaba llenas de preocupación mientras revisaba cuidadosamente la cabeza de su hermana.
Los estudiantes no sabían si reír o llorar. Su cabeza es tan grande como la pelota, ¿Cómo no pudo verla? Pensaron. Sin embargo, se sentían como si quisieran ser golpeados por la pelota en su lugar. De esa manera, Xiao Zhan se preocuparía también de nosotros. ¡Xiao Zhan ah-, por favor..., míranos a nosotros también! ¡Nuestro corazón resulto herido!
El juego de repente hizo un descanso, y Wang YiBo corrió hacia las gradas, provocando un suspiro entre la multitud. Lo vieron correr hacia Song Zu Er. Abrió la boca y dijo—Zhan-ge, ¿estás bien?— pregunto con un tono de voz llena de pánico y preocupación—¿Estás bien?—agregó mientras sus ojos, que pensaban que estaban dirigidos hacia Song Zu Er, en realidad estaban mirando hacia Xiao Zhan, llenos de dulzura y preocupación.
—¿Huh?—Song Zu Er levanto la cabeza después de mostrarse confundida. Sintió que perdió la voz cuando vio a Wang YiBo de cerca. ¡Qué guapo! Pensó. Espera... recordó lo que Wang YiBo acababa de decir. ¿'Zhan-ge'? No recuerdo haber cambiado mi nombre a 'Zhan-ge'. Ella pensó y se volteo hacia su hermano, él se llama 'Zhan'.
Xiao Zhan acababa de mirar a Wang YiBo, y luego devolvió su mirada hacia Song Zu Er—Estoy bien—respondió él.
¿Pero... la persona que fue golpeada no fui yo? Pensó.
Xiao Zhan noto la mirada confusa de Song Zu Er y agregó—Fue mi hermana, quien fue golpeada—le dijo mientras envolvía su pañuelo en la fría lata de Pepsi—Vamos a la enfermería—dijo Xiao Zhan.
—¿Huh? Oh- —Song Zu Er respondió de forma distraída mientras se dejaba arrastrar por su hermano. ¿Me perdí de algo...? Pensó mientras miraba hacia atrás, donde se encontraba Wang YiBo. Fue culpa de la pelota y... por ella fui golpeada. Parece que no puedo pensar bien...
El juego se reanudó como si nada hubiera pasado. Sin embargo, el rendimiento de Wang YiBo disminuyo..., pero su equipo igualmente ganó.
Wang YiBo estaba sentando en las gradas junto con sus amigos cuando vio pasar a Xiao Zhan. Inmediatamente se despidió de sus amigos y se dirigió hacia Xiao Zhan—Ge—dijo cuando lo alcanzó.
Xiao Zhan se volteo y vio a Wang YiBo de pie delante suyo—Eres...—dijo Xiao Zhan.
El menor comenzó—Wang YiBo—dijo y extendió su mano hacia Xiao Zhan. Sintió como su corazón latía como la de un caballo salvaje mientras miraba la cara de Xiao Zhan. El uniforme blanco de Xiao Zhan y la luz del sol sobre ellos, hizo que el ya hombre brillante más brillante. Sostuvo la respiración, con sus corazón golpeando fuerte contra su pecho mientras esperaba a que Xiao Zhan alcanzará su mano. Se rompió sudando.
Xiao Zhan miró la mano de Wang YiBo. Entonces, lo alcanzó—Xiao Zhan—dijo y estrecho su mano con la de Wang YiBo—El hermano mayor de Song Zu Er—agregó.
—Lo sé—Wang YiBo dijo y apretó a un más la mano de Xiao Zhan. Ese calor proveniente de la mano de Xiao Zhan está corriendo a través de su palma, hasta su mano, y luego llenando su cuerpo de un calor suave—Te conozco—dijo Wang YiBo.
Xiao Zhan lo miró—Si—dijo—La última vez, en el partido de baloncesto... Dijiste mi nombre en lugar de mi hermana. ¿Mi hermana es aire para ti?*—Xiao Zhan se arrepintió un poco en preguntar eso, pero solo un poco.
—Es mi culpa—dijo Wang YiBo—Lo siento. Pensé que tú fuiste golpeado—dijo, lo cual era una mentira, por supuesto. La grada fue limpiada cuando los estudiantes movieron su cuerpo hacia atrás y sólo la cabeza de Song Zu Er quedo como un pulgar adolorido.
Xiao Zhan lo miró y no expuso su mentira—A mi hermana realmente le gustas—dijo—¿Qué tal si nos añadimos en WeChat?—preguntó mientras sacaba su teléfono-celular.
Los ojos de Wang YiBo se ensancharon y se sintió rojo—¿WeChat?—dijo, mientras sacaba su teléfono-celular con la mano temblorosa.
Xiao Zhan asintió con la cabeza, su cabeza bajo para buscar la aplicación WeChat, por lo que no pudo ver la cara de Wang YiBo, que están rara como la luna azul—Hmm—tarareó como respuesta. Luego, levanto la cabeza y vio a Wang YiBo que finalmente pudo calmarse—Tú me dice si mi hermana se acerca a usted, y me dices lo que están haciendo—explicó.
—Oh—Wang YiBo murmuró y sintió su corazón hundirse. Es para su hermana, pensó. Pero, al menos tengo el WeChat de Zhan-ge. Pensaba felizmente, su cara estaba así ^_^ mientras escaneaba el código QR.
Xiao Zhan asintió con la cabeza y se fue, dejando a un Wang YiBo sonriendo estúpidamente en la pantalla de su teléfono-celular. La mano que Xiao Zhan había sostenido comenzó a ser sobado por la otra mano.