Cap 108 (R-18)

Roxi, una hermosa mujer de pelo azul, ojos azules y piel clara, si tuviéramos que poner un punto en contra, sería su pequeño pecho, eso sí, tenía un trasero muy bonito, no era un gran trasero, pero era estilizado, seguro sería un placer poner tus manos sobre tal obra de arte.

Contrario a su apariencia juvenil y adolescente, Roxi rondaba los 45 años, una milf cachonda desde el punto de vista humano. Desde el punto de vista de su raza, solo era una niña. Roxi pertenecía a la raza Migurd, su crecimiento físico se detiene cuando llegan a la edad de la escuela secundaria y finalmente pueden volver a envejecer después de cumplir los 150 años.

-"ha, ha, no quiero morir, ha, no quiero morir, no quiero morir, tos, tos, madre, padre, sniff, disculpen por ser tan rebelde."

Roxi no vivía el mejor momento de su vida, ahora estaba entre la vida la muerte, este acto se ha repetido durante 10 días seguidos, lo que la tiene con los nervios de punta y muy estresada, no poder dormir, comer o ir al baño tranquilo, volvería loco a cualquiera.

Cada paso que daba debía ser dado con cuidado, el lugar donde se encontraba estaba lleno de trampas letales, cada una la transportaría a un lugar lleno de monstruos que deseaban devorarla. Lo peor, es que no importa si los destruía a todos, volverían a aparecer pasado un tiempo.

Por lo que ningún sitio era seguro.

Los primeros días fueron fáciles, los derrotaba con facilidad, y se daba el tiempo para intentar escapar y mapear el calabozo, era la única forma de salir. Al tercer día todo empeoro, no por la cantidad de monstruos, seguía siendo la misma, lo que empeoro su situación, fue que el calabozo estaba en constante movimiento.

Así es, mapear no servía de nada, ya que todo estaba en constante movimiento, era como una mazmorra con vida, el peor lugar donde estar, una mazmorra por si sola era peligrosa, una con inteligencia era la perdición para cualquier aventurero, y ella lo sabía, eso solo empeoraba su estado anímico.

Roxi intento escapar muchas veces, al principio no dudaba en ingresar a los portales, y ver que había al otro lado, pero con el paso del tiempo, esta simple actividad la volvía loca, ya que cada vez que saltaba al portal, el sitio al que llegaba estaba infectado de monstruos.

Esto no cambio a lo largo de los días, y su comida se acabó al segundo día, nada más tenía dos pedazos de carne seca.

Ella no tenía planes para viajar, por eso no estaba preparada, tenía esos dos pedazos de carne por casualidad, o más que nada como bocadillo, Roxi gustaba de comer entre comidas, era un pequeño cerdito comelón.

No era su culpa no estar preparada, quien en su sano juicio pensaría que viviría una situación así, nadie.

-"Sniff, no quiero morir."

Repetía una y otra vez Roxi, era como un mantra para mantener la cordura y quizás recordar que todavía estaba viva. Roxi tenía la cara pálida, parecía un fantasma, no era del color blanco que le gusta a los protagonistas Xian xia, era blanco enfermizo.

Sus ojeras en negras y pronunciadas, sus ojos azules eran rodeados por el rojo de la sangre, signos de un mal dormir. Roxi no dormía hace varios días, los monstruos no la dejaban, y cada vez que cerraba los ojos, despertaba por el más mínimo ruido, la paranoia era demasiado fuerte en estos momentos.

-"10 días, duro bastante, tengo que admitir que la chica tiene tenacidad."

Claro que Roxi no estaba sola, León la vigilaba de vez en cuando, y dejaba a sus sombras para que la cuidaran y no muriera por negligencia, aunque si muriera, la reviviría y rebobinaría sus recuerdos y empezaría de nuevo, lo bueno es que no tuvo que hacerlo.

En la historia original Roxi duro casi un mes en el laberinto, León no quería esperar tanto, por ese motivo planto a sus propias creaciones, como varios espectros que consumían los buenos recuerdos, era como los dementores, León los creo en sus momentos de ocio, nunca pensó que le serian útiles.

Roxi metió su mano al bolso por décima vez mientras caminaba, pensó que algo apreciaría de la nada, y le quitaría el hambre. No paraba de limpiar sus labios secos con la lengua, estaba abrumada por la sed, su magia se había agotado y no podía generar más agua.

Y cada vez que recuperaba su magia, un enemigo aparecía y tenía que usar su poco maná para luchar y seguir viviendo otro segundo. Segundos llenos de dolor y miseria, Roxi se preguntaba porque todavía seguía luchando, ¿no sería más fácil rendirse y dormir el sueño eterno?

Quizás lo único que la mantenía despierta era el deseo de ser rescatada, y encontrarse con su príncipe de armadura reluciente, Roxi rogaba cada día que su sueño se hiciera realidad.

León estaba escondido en la sombra de Roxi, esperando el momento preciso para salvarla, además le gustaba mirarle su lindo trasero, su falda apenas podía cubrirlo, y lo mejor de todo era que no llevaba bragas, y podía ver su hendidura trasera y parte de su coño rosado.

Roxi no tenía ropa de repuesto, y los enemigos no tenían piedad, su ropa se rasgó varias veces, sus pechos apenas eran cubiertos por una fina capa de ropa, su abdomen estaba desnudo al igual que su espalda, y sus partes íntimas inferiores eran cubiertas por su falda, que tenía varios agujeros.

Sus bragas se perdieron cuando fue al baño, no tuvo tiempo de recogerlas, eran las bragas o su vida, no tuvo de otra, además, quien la miraría, nadie. Aunque a veces Roxi sintió miradas lujuriosas, pero lo descarto como paranoia, o sea, los monstruos no tenían sentimientos, ellos querían devorarla, a lo menos que fueran goblins u orcos, suerte para ella, no existían en el laberinto, o quien sabe que destino cruel tendría, eso pensaba ella.

Roxi camino con dificultad, si no fuera por las paredes, tendría que arrastrarse por el suelo.

León que miraba desde el costado, inicio el plan final, no podía dejar que la chica siguiera sufriendo, o se rompería, todo humano tiene un límite, y Roxi estaba a punto de alcanzarlo. León no quería que la chica sufriera un gran trauma, solo quería cumplir su sueño y salvarla.

thc, que tipo de chica sueña con ser salvada en un calabazo, no podría tener un sueño menos complicado o más seguro, no sé, digo, ser una princesa y enamorarse de un granjero, espera, eso no es tan simple, primero, dudo que ese amor dure mucho, segundo, desde cuando una princesa baja a mirar a la plebe, además, todos los nobles de este mundo tiene algunos problemas mentales.

Suspiro, que buen hombre soy, haciendo lo imposible para que ella cumpla con su sueño y se enamore de mí. Me gusta Roxi, es una buena mujer, si no, no me daría todo este trabajo, crear monstruos, poner temporizadores, y crear una mazmorra artificial no es fácil, bueno si, pero toma tiempo, y no soy un hombre trabajador.

Sin embargo, todo sea por conseguir a la chica, ¿o no?, como hombres, es nuestro deber conquistar el corazón de una dama, ya sea a la buena, o la mala. Pensó León.

León no creía que manipular las cosas para qué ella enamorará de él estuviera mal, la mayoría de los héroes usa la misma fórmula, ya sea salvando a la princesa o comprando la esclava mapache, al final, el método es el mismo, la única diferencia es que León, tendría que generar el escenario para que sucediera, en cambio, para el héroe ya viene todo listo, era llegar y servirse.

Al final, León las merecía más, ya que trabaja más para conseguirlas.

Roxi detuvo sus pasos, y miro el pequeño portal frente a ella, era un círculo mágico pegado al suelo, era muy complejo y con palabras extrañas que no comprendía. Al principio intento resolverlo para poder salir, pero no importa cuanto lo intento, no comprendía la simbología.

Y nunca lo haría, León uso una mezcla de ruso, árabe y los escribió como si fuera doctor, incluso él no sabía que mierda escribió.

Roxi se quedó mirando el círculo varios segundos, pensando si debería saltar o no. Una vez que saltara, ella sabía que tendría que enfrentar una horda de engendros del calabazo, o puede que sea el final de su mal viaje.

"¡gaaarrrrr!, ¡rrrrooooarrr!" Roxi miro hacia atrás, y vio como las bestias volvían a nacer, no le quedaba mucho, tenía que decidir morir aquí, o morir en otro lugar.

Ella no quería morir, sus ojos temblaban y se llenaban de lágrimas, sus piernas temblaban del miedo. Pero tenía que saltar, ella todavía guardaba la pequeña esperanza de que al saltar, ella aparecería en la entrada del calabazo, y su cruel odisea terminaría.

Era su pequeña esperanza, y a lo único que se aferraba, su última oportunidad. Con eso en mente, Roxi salto al portal, con toda la fe del mundo, creyendo que estaba vez si saldría del calabozo.

Roxi sintió como su cuerpo se deformaba y era enviado a otro lugar. "Puf" Sus pies tocaron el suelo, sus ojos estaban cerrados, y sus manos sujetaron con fuerza su fiel bastón, que la acompaño hasta el final, y nunca la traiciono.

Si no fuera por su bastón, hace mucho estaría muerta, y ella lo sabía, por eso lo apreciaba tanto.

"ufffff, grrrrr"

Una fuerte brisa golpeó la cara de Roxi, haciendo que su cuerpo temblara, no solo por el mal olor, era por el simple hecho de que algo vivo estaba frente a ella. Su apuesta fue errónea, por eso no quería abrir los ojos, no tenía ganas de ver la muerte de frente.

-"¡No quiero morir!"

Roxi recito su mantra mientras se caía de trasero al suelo, sus piernas temblorosas le fallaron, el miedo era tanto, que no podía estar de pie, y todo su cuerpo la traiciono, fue tanto el terror de tener la muerte de frente, que un pequeño charco se creó bajo su trasero y muslos. Se orinó encima.

-"¡Gaaaaaaaaaaaarrrrrggggggg!"

-"¡Hiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!, ¡N-no me comas!"

Roxi levanto el bastón, y golpeo lo que sea que estuviera frente a ella. Eso enfureció a la bestia y le volvió a rugir en la cara.

La bestia era una oruga gigante, de color negro y rojo, su boca tenía una hilera de dientes afilados y temibles, parecía que devoraría todo a su paso, comenzado con Roxi. Roxi abrió los ojos, y vio la bestia frente a ella, y no pudo evitar lanzar un grito ahogado, sus ojos se cerraron debido al miedo, no quería ver como la devoraban.

-"¡No quiero morir! Grito Roxi, intentando liberar su miedo, y que sus piernas se movieran, pero fallo, su cuerpo no respondía.

-"Gaarrrrr"

-"¡No me comas! ¡No soy sabrosa!" Grito Roxi, rogando que la oruga frente a ella fuera inteligente.

-"Eso sería imposible, eres demasiado hermosa como para no comerte."

-"No, no, no, no, te lo juro, tengo mal sabor." Respondió Roxi, ignorando que los monstruos no hablan, por lo menos no una oruga.

-"Con esa carita hermosa, no creo, algo me dices que tus labios saben a durazno."

-"¡Mentira....!, ¿eh?, ¿durazno?, no sabía que podía hablar con monstruos" Dijo Roxi mientras abría los ojos, solo par presenciar al hombre más guapo del mundo, según ella.

-"Que cruel, desde cuando un hombre tan guapo como yo, sería considerado un monstruo, quizás tus estándares de bellezas son bastante malos, bueno, veo que no eres humana, por tu pelo azul eres una Migurd, quizás la cultura es distinta y les agradan los hombres feos, de ser así, estoy jodido..."

Viendo que no le prestaban atención, León se cruzó de brazos y preguntó: "oye chica de cabello azula, ¿me estás escuchando o estoy hablando con la pared?"

Roxi abría y cerraba como un pez, no sabía que decir, en un momento estaba a punto de morir, y al otro, un chico guapo le hablaba como si estuvieran en el parque, era demasiado para procesar, además, era demasiado guapo, era una delicia para la vista, nunca antes vio a alguien así, y eso que viajo por muchos lugares.

Bueno, en realidad Roxi estaba exagerando debido a su falta de agua y sueño, y por supuesto, gracias a que su sueño de ser salvada en un calabazo, se cumplió por fin. En el momento que vio a León, ella ya se enamoró o sintió algo especial por León, quizás no era amor todavía, pero era un sentimiento muy fuerte que calentaba su cuerpo y corazón.

Ese brillo en sus ojos, a pesar de estar tan cansada y demacrada, todavía es hermosa, y esa sonrisa, uff, seguro es destructiva para los vírgenes y betas, seguro se sonrojan, yo no, ya me acostumbré. Fue bastante fácil hacer que se enamore de mí, que bueno soy en estas cosas, deberían darme una medalla o algo. Pensó León, el narcisista más grande de la historia,

-"¿Y la oruga gigante?" Pregunto Roxi, ignorando la pregunta de León, no fuer por mala educación, el problema era que recién procesaba las cosas.

-"No ves el polvo en el suelo, ya los eliminé, no podía dejar que una chica tan hermosa fuera almuerzo de una bestia." Dijo con una sonrisa encantadora, que sonrojo a Roxi.

Claro que no, mujeres como ella solo pueden ser devoradas por mí. Pensó León.

-"H-hermosa..., yo?" Dijo Roxi, apuntado con su dedo a su cara.

La pequeña Migurd no tenía confianza en sí misma como mujer, su cuerpo era pequeño y no desarrollado, además tenía un complejo con sus pequeñas tetas y su baja estatura, ella sabía que las personas la trataban como niña por eso.

León sonrió dulcemente, él no tenía problemas con los pechos pequeños, todavía podía chuparlos y lamerlos, aunque no podría usarlas como tercer coño gracias a su tamaño. Pero era lo de menos, para eso tenía varias mujeres, y varias de ellas tenían un pecho fenomenal, que dejaría en vergüenza a Hestia de Danmachi.

-"Ves a alguien más" León se giró por todo el lugar y volvió a mira a Roxi -"Yo no, o que, ¿no me crees?"

-"S-si te creo, es que..." Roxi bajo la mirada y se tocó los pechos.

-"Confía en mí, eres hermosa, y tus pechos son encantadores."

-"¿En serio?" Pregunto con dudas.

-"Si, el único problema es... León se acercó a Roxi, y se acuclilló, para que sus vistas estuvieran a la misma altura, y se tapó la nariz.

-"Apestas como el infierno, es que no te bañas chica, hueles a orina..., espera, te orinaste encima, en serio, ¿tienes 5 años?"

León no pudo evitar burlase de Roxi, Roxi tenía esa aura que te obligaba a intimidarla y ver sus reacciones, era el objetivo perfecto para los matones como León. Claro que él no lo hizo con mala intención..., casi no, su idea era molestarla un poco, y hacer que se calmara.

No funciono, Roxi entro en pánico y se cubrió sus partes intimas. Su falda estaba sobre sus caderas y dejaba a la vista su coño. Pero Roxi no se cubrió por eso, ella quería cubrir el pequeño charco que se formó debajo de ella.

León acaricio las mejillas de roxi, y dijo:

-"Vamos, estaba bromeando, no te preocupes por eso, será un secreto entre tú y yo, aunque si apenas, eh."

Roxi no pudo evitar sentirse mal, su sueño se arruinó por su mal olor, y por su poco controlo corporal. Ahora su salvador tiene la peor impresión de ella.

-"snifff, apesto, sniff." Dijo Roxi entre gimoteos.

-"Bien, apestas, pero no te preocupes, es normal cuando pasas tanto tiempo en un calabozo"

Ambos se quedaron en silencio, Roxi miraba el suelo con tristeza, León suspiro, era un dolor en el culo las mujeres con falta de confianza, se deprimían por todo. León tuvo que usar magia de limpieza.

La suciedad, cicatrices y heridas desaparecieron en un abrir y cerrar de ojos. Su mal olor desapareció y fue reemplazado por el aroma de una mujer, ese aroma que te obliga a oler su cabello y plantar tu rostro en el, es un olor único y que no tiene lógica.

Roxi se sorprendió, era segunda vez que ve magia sin canto, pero a diferencia de la primera vez, está la sorprendió mucho más, ya que curo todas sus heridas y fatiga física, además limpio todo su cuerpo. Roxi soltó su fiel bastón y toco su piel, no pudo evitar acerca su nariz y olerse, olía a jazmín.

Imposible negar su belleza, su cabello azul y largo que llega hasta su cintura, sus ojos azules como el mar parecen tragarte en un vórtice de felicidad, y su sombrero de bruja le da un toque encantador, nada mejor que una chica con cosplay de bruja, más si es una bruja real. Aunque para ser sincero, le faltan unas medias blancas y me la llevo a la cama de inmediato, las botas también le quedan bien.

-"No me digas que te enamoraste de ti mismo tanto que te tocas."

-"¿Eeehhhh?, C-claro que no, solo me sorprendí, tu magia es increíble." Dijo Roxi, con un brillo en sus ojos.

-"Entonces, ¿te enamoraste de mí?"

-"¿eeeeeeeeeeeeeeeeeehhhhhhh?" Grito Roxi, no estaba lista para esa pregunta.

-"No grites tanto, y no te preocupes, es normal enamorarse de mí, soy el mejor espécimen de hombre que podrías encontrar."

-"pff, jajajajaja." Roxi se rio con ganas, nunca antes conoció a alguien tan narcisista, y no le molesto, en cambio, le agrado y disfruto de la persona. Ella odiaba a la gente así, pero ya saben, el amor es ciego.

-"No deberías reírte, después de todo, yo todavía no me enamoro de ti."

Roxi se puso pálida al instante, ahora lo noto, ella podría tener sentimientos por el hombre frente a ella, pero eso no significa que la otra parte también los tengas, o sea, recién se conocieron, y no era la mejor primera impresión. Ella apestaba y tenía su ropa rota, parecía un mendigo.

León notó como Roxi se hundía en espira de depresión, ella tocó sus pechos y los miraba con decepción, no creía que tuviera lo necesario para conquistar a un hombre. León no se preocupó por eso, comprendía que Roxi tenía un gran complejo con su cuerpo, y se sentía inferior otras mujeres.

La solución a este problema no era fácil, sin embargo, León tenía su manera, y era follar, simple y directo, no era necesario un gran discurso o llenarla de palabras bonitas y motivadoras, un buen polvo solucionaba todo.

-"No me digas, en realidad te enamoraste." Dijo León mientras se tocaba el pecho y fingía sorpresa.

-"yo..." Roxi dudaba, las palabras que quería decir no salían.

-"jeee, si es así, deberías intentar conquistarme"

-"¿eh?" Roxi ladeo la cabeza, sin entender lo que León decía.

-"¿No entiendes?, una mujer también puede enamorar a un hombre, porque el hombre siempre tiene que hacer todo, yo soy un hombre moderno, también quiero flores y chocolate." Dijo León, dando un pequeño ejemplo, en realidad no quería flores, no es que no le gustaran, pero tenía un maldito jardín de más de cien metros en su casa, lleno de flores.

Roxi medito las palabras de León y encontró razón, porque debería desanimarse, ella también podía conseguir a su hombre, aunque ese pensamiento se borró al instante cuando toco su pecho, como podría enamorar a un hombre con un cuerpo tan mediocre.

-"Que mujer más complicada, me gustaría seguir hablando, pero tengo cosas que hacer."

León se acercó a Roxi, y le toco la frente, la chica de pelo azulado cayó en sus brazos, su respiración era tranquila y sus parpados estaban cerrados, León la puso a dormir, no olvidemos que el laberinto era artificial y no podía sacarla por la salida, ya que no había ninguna.

Una vez fuera del laberinto, este fue destruido, no quedo prueba de que estuvo involucrado, Roxi nunca sabrá que todo fue manipulado.

Un día después, roxi se enrollaba entre las sabanas, su dormir era muy malo, tenía todas las sabanas sacadas, lo bueno es que su cuerpo ya estaba al 100%, listo para ser devorado, claro que Roxi todavía no estaba al tanto de este hecho.

Roxi se estiró y bostezo con ganas, su sueño fue corto, pero reparador, fue el mejor sueño en años. Se levantó con cuidado y se sentó sobre la cama, las sabanas se deslizaron, dejando al descubierto su pequeño pecho y sus pezones rosados con un tono café.

Su mirada pasó por toda la habitación, era muy espaciosa y lujosa.

-"Que bonito" Susurro Roxi.

-"Gracias, es bueno saber que te agrada mi hogar, y tu futuro hogar, si es que logras conquistarme."

Roxi se sorprendió, y se cubrió el pecho, no quería que vieran su lugar tan lamentable, no hasta que lograra hacerlo suyo, aunque todavía no tenía ni idea de como hacerlo.

-"¿No te agrada tu cuerpo?"

-"No, siempre me tratan como una niña, y no lo soy, ¡soy una adulta.!" Dijo Roxi, León pensó que solo una niña diría eso, era bueno que no lo dijo, eso solo empeoraría la falta de confianza de Roxi

-"Lo sé, te ayudaré con eso, ponte estas medias blancas."

Roxi agarro las medias que lanzo León, y no sabía que hacer, luego se dio cuenta de un hecho, estaba durmiendo desnuda, eso significa una cosa, el hombre frente a ella, pudo admirar su cuerpo desnudo

León que era muy bueno leyendo a las personas, no dudo en responder.

-"Si, te observé desnuda y me gusto tu cuerpo, ¡ahora ponte esas medias!, ¡es hora de demostrar que eres una adulta!" La voz de León era dominante, y produjo que el coño de Roxi palpitara de anticipación.

Roxi se sonrojó, no es necesario ser un erudito para saber lo que quiere León, pero ella dudaba, no porque no le gustara, era por temor a que a él no le agradara su cuerpo.

A León no le importo la lucha interna de Roxi, él se acerco y saco la sabana, dejando todo el cuerpo desnudo a la vista del mundo y sus ojos, era tan espectacular y erótico, a pesar de verse joven, tenía su encanto seductor.

Roxi se quedó muda, y no sabía que hacer, León ya tenía experiencia guiando a chicas vírgenes y sin experiencia, aunque Roxi, si tenía mucha experiencia con la mano, Roxi era fanática de la masturbación y jugaba a diario con su coño, eso se debía a que nunca encontró el hombre adecuado, hasta ahora.

León agarró las medias y las deslizó con suavidad por las piernas de su amante, quedando un poco arriba de las rodillas. Roxi solo podía sonrojarse e intentar tapar sus partes intimas, todavía era pronto para hacerlo, pensó ella. Lástima que León no pensaba detenerse, quería el premio ahora, no le importaba saltarse algunos paso, luego la compensaría.

León sonrió con satisfacción, y se inclinó, su cara se acercó al hermoso coño de Roxi, ella todavía se tapaba con timidez.

-"Tranquila, quita las manos."

Roxi no quería hacerlo, pero tampoco podía negarse, era el hombre que le gustaba, y si podía usar su cuerpo mediocre para conquistarlo, lo haría. Con el coño de Roxi a la vista, León abrió su boca y empezó con el trabajo, utilizo su lengua para jugar con una pequeña bolita rosada que estaba al inicio.

-"Haaaaa, ummm, ¡increíble!."

Gimió Roxi, que por primera vez en su vida, tenía algo más que sus dedos dentro de ella.

León introdujo su lengua hasta el fondo, y la revolvió como un taladro, saboreando cada parte de las paredes internas de Roxi. Roxi poco a poco entraba en calor, y sus lubricantes naturales empezaron a generarse y salir por su coño.

Ni una sola gota cayó fuera, todo el néctar de amor fue consumido por León, que aprecia una aspiradora mientras devora el sabroso coño de su amante.

Roxi se inclinó levemente y acaricio la cabeza de su amante, sus delicados muslos apretaron firmemente la cabeza de León y no lo soltaban, ella no quería dejar ir el placer que sentía, sus dedos nunca lograron algo similar.

Ahora, ella sentía un ardor en su abdomen, y por su espalda recorrían pequeñas corrientes eléctricas.

-"¡Ahh!, si, no pares mi..., ¡aaah!, c-cuál es tu nombre."

Recién se dio cuenta de algo, ninguno sabía el nombre del otro, eso la lleno de vergüenza, está teniendo sexo con un desconocido, nunca pensó que haría eso, aunque amaba al desconocido.

León levantó la mirada y Roxi no pudo aguantar, esa mirada depravada y seductora la puso cachonda mando a la mierda el asunto de los nombres, luego preguntaría, ahora disfrutaría hasta el final.

-"Aaahhhhhh~siiiiiii~ummmmm"

Roxi agarro el cabello de León y lo mordió, llego al primer clímax de la noche, León no desaprovechó y consumió todos los jugos que libera el coño de su amante de cabello azul. Era un banquete de los dioses, tantos sabores únicos y legendarios llenaron sus papilas gustativas. Nada mejor que probar una chica virgen, y más cuando es de una raza distinta.

-"¡Mi turno!"

León se salio del agarre de Roxi, y se subió sobre ella, acomodo su polla y penetro a su amante, no lo dudo, era mejor aprovechar el calor del momento, y que estaba lubricada. Así no le dolería tanto.

-ehhhhhhhhhhh?~que fue~aaaaaaaah

Roxi gimió del placer y el dolor, estos dos conceptos llenaron su cabeza y se fue a blanco por un segundo, era demasiado para procesar. León no se detuvo, agarro una de las piernas de su amante y la puso sobre su cintura, quería que la chica se sujetara.

León no se detuvo con eso, agarro los pechos de su Roxi y los saboreo.

"Shupp~shupp~shupp"

-"Es-espera~aaahh~son~nuuuuuuu"

León no tenía tiempo para escuchar lamentos, no quería arruinar el momento con él autodesprecio de Roxi. Así que chupo más fuerte, la otra teta no quedo libre, León uso su mano para jugar con los pequeños pezones, Roxi no podía con tanto placer, y llego al segundo orgasmo de la noche o día, nadie lo sabía y no importaba,

-aaaaaaaaah~siii~nuuuuu.

Las piernas de Roxi temblaban debido al orgasmo continuo, y sus ojos lagrimeaban, lloraba de la felicidad, estaba feliz de que el hombre que amaba, adoraba su cuerpo pequeño y sus tetas pequeñas, si no fuera así, ¿por qué las chupaba con tanta avidez?

León exploró las tetas de Roxi como si fueran un lugar desconocido, su lengua y mano jugueteaba con los pezones, no pudo evitar girarlos y pellizcar, era un trato rudo, pero Roxi aguanto y lo disfruto.

Lentamente, León dejo los pechos y su objetivo cambio hacia la boca de Roxi, quería besarla, pero antes, beso cada parte de los pechos de Roxi, y subió besando sin parar, paso por el cuello, luego el mentón, y llego a su objetivo, los labios.

-"¡mmmmm~mmuum~ahhh!"

Gimió Roxi entre besos, nunca antes la habían besado, era su primer beso y fue emocionante.

León era experimentado, y uso su lengua para enroscar la de su amante, la lucha fue unilateral, Roxi no pudo hacer nada contra un hombre que tenía más de 10 esposas, no era rival.

Roxi intento amarrar sus piernas sobre la cintura de León, lástima que uno podía, no tenía fuerza en las piernas, así que las abrió lo mejor que pudo, para darle fácil acceso a su coño, deseaba que la golpearan duro y hasta el fondo, sería estúpido desperdiciar su primera vez, quería aprender lo más que pueda.

De repente, León le mordio los labios, era debido a que alcanzaba su límite y su polla estaba a punto de explotar. Roxi pudo sentir como el objeto dentro de ella se agrandaba y palpitaba, sus instintos femeninos gritaban, su cuerpo reaccionaba al deseo de ser impregnada, y sus piernas ganaron fuerza, como si fuera un koala se aferró a su amante, era necesario que esa carga fuera dentro su cuerpo, ya que era el momento del mes en que era más fértil, por eso estaba tan cachonda.

León tomó el cabello de Roxi y lo tiro hacia atrás, mordiéndole el cuello en el proceso, dejando una clara marca de dientes, era él marcando territorio, Roxi noto esto, y no dudo mostrar su cuello, quería más mordidas.

-"aahh~siii, dentro, quiero dentro esa cosa."

Ni que tuvieran que pedirlo, a León le encantaba terminar dentro, era lo mejor del mundo.

León pegó la embestida más fuerte que pudo, e introdujo su polla hasta el mismo útero, se quedó quieto mientras soltaba toda su carga y pintaba de blanco el interior de Roxi. La carga era basta y espesa, todo debido al estrecho coño virgen de Roxi, nada mejor que probar algo de primera.

-"¡aaaaaaaaah!"

Roxi llego al orgasmo con solo sentir su interior llenado, su abdomen ardía como si fuera lava, y su coño palpitaba y apretaba cada vez más fuerte la polla de León, no quería que se escapara, no quería desperdiciar ni una sola gota.

-"Fue~increíble, mis dedos nunca lograron algo similar." Dijo Roxi, mientras acariciaba la cabeza de su amante.

-"jeee, y eso que fue solo el inicio."

-"¡¿eh?!" Dijo Roxi en pánico.

León no se quedaría tranquilo con una ronda, recién iniciaba. Roxi entro en pánico, apenas sentía las piernas, y sus tetas estaban adoloridas, y su boca hinchada debido a los besos, con suerte podía seguir, incluso quería dormir, no olvidemos que Roxi es una maga, su fuerza física no es mucha.

Lástima para Roxi, no dormiría durante horas, y lo único que se escuchó en la habitación durante las siguientes horas, fueron gemidos y gritos de placer, y una que otra suplicara para que la dejaran ir, aunque no duraron mucho.