POV Hilda
El cuarto era lujoso, y varios espejos adornaban el lugar, mi figura era visible a través de ellos, pelo largo y rojo, ojos rojos, cuerpo voluptuoso y esbelto, y mis pechos, son mi orgullo, puedo asegurar que no existen mejores y más grandes, además tienen una textura increíble.
Nací en una familia noble, y se me crio como tal, recibí varias lecciones de nobleza, escribir, sumar, un poco de política. Y claro que modales, todo para ser una esposa adecuada para el futuro, y dar buenos hijos. Ese ha sido mi destino desde que nací, solo un juguete de intercambio.
En realidad, me hubiera gustado ser una campesina, tener libertad y poder casarme con quien yo quiera, lástima que eso no fue posible. Además, nacer como campesina no asegura mi libertad, conozco a todos los nobles de Azura, y sé que todos son unos pervertidos.
Muchos de ellos abusan de las mujeres pobres, y desamparadas, he visto como arrebatan la mujer de otro hombre, el día de su boda, y no pudieron defenderse, son campesinos, no tiene poder. Así que no puedo quejarme, nací con dinero y poder, con eso basta para asegurar una buena vida.
El único pago, es que no soy libre.
-"Vamos Hilda, basta de lamentos, tienes que seguir adelante."
Mi vida no era tan mala, excepto por ese esposo mío, era una basura, una basura total, no puedo creer que le gustaran las niñas pequeñas, y lo peor, es que nunca me toco, bueno, tampoco quería que lo hiciera, siempre lo odie, porque me obligaron a casarme con él.
Pero por el bien de las apariencias, actúe como esposa amorosa y respetable, pero..., todo eso no sirvió, nunca me toco, ni siquiera dormimos en la misma cama. Y como dije, estaba feliz de que no me tocara, el único problema, es que necesitaba dar a luz, si no, sería catalogada como infértil y como esposa fallada.
Eso sería una desgracia para mi familia y nuestra nobleza, aparte, todos se burlarían de mí. No podía permitir que eso pasara, así que no quedo de otra, tuve que buscar entre todas esas niñas que fueron violadas por Philip, y sacar algo de su esperma, para poder embarazarme.
Eso fue..., ¡muy patético!, mierda, en realidad no quería que me tocara, pero que siempre me ignorará, me hace sentir poco valorada, o sea, miren mi cuerpo, soy hermosa en todos los sentidos, ¡joder!
Pero todo lado malo, tiene un lado bueno, y esa es Eris, mi pequeño monstruo, a diferencia de mí, esa chica es muy libre, hace lo que quiere y lo que desea, es descuidad y poco noble, siempre golpea a sus maestros y solo le gusta la espada.
Su pelo rojo y ojos rojos, son iguales a los míos, y cuando crezca, seguro heredara mi pecho. Estoy orgullosa de ella, que puede decir todo lo que piensa, y siempre hace lo que quiere. No se parece a mí, cuando pequeña siempre fui sumisa y siempre obedeci a mis padres.
En cambio Eris, fue mimada por todos, y eso la hizo quien es. Lástima que eso sea una desventaja ahora, no puedo dejar que Eris haga lo que quiera, si no, será maltratada. Ya está claro quien será nuestro comprador, será el rey, no por nada seremos subastadas, en la subasta del año.
Siempre aparece el rey en esta subasta, ese maldito desgraciado, como todo noble de Azura, está totalmente podrido, es un pervertido igual que Philip. Tienen el mismo fetiche, por eso tengo miedo por Eris, y claro que por mí también.
Ya que a diferencia de Philip, el rey tiene otro fetiche, y sé que es real, porque lo escuche de Philip, él no me lo dijo, pero lo escuche detrás de una pared, mientras hablaba con su padre. Otro pervertido más, que toco a todas las sirvientas de nuestro hogar, es un milagro que no me haya tocado o intentando violar.
Tos, tos, volvamos al fetiche del rey, su fetiche es que lo engañen, o mejor dicho, al rey le gusta compartir a su mujer, le gusta ver como otros hombres abusan de su esposa. Pobre reina, seguro sufrió mucho, no solo ella, todas sus concubinas iguales. Es bueno que la Reina esta muerta, y así no sufra más.
Una lástima, por eso, tengo miedo, no tengo problema con que sea solo un hombre, pero ese viejo desgraciado, me obligara a tener relaciones con otros, y todo mientras mira, sniff, sniff, ¡es una verdadera mierda!
¡Yo no quiero eso!, yo siempre quise una vida normal, un esposo normal, una familia normal, comida normal. Yo solo quería ser libre y poder decidir, saben, a mí gusta tocar el piano, me gusta pintar, también, me gusta mucho preparar mi propia comida.
Pero si hago eso, se burlaran de mí, para eso están las sirvientas.
Suspiro, me destino ya a sido sellado, seré usada como muñeca sexual, y muchos hombres me tocaran, mi pobre Eris será violada por un rey pedófilo, ¡¿por qué?!, ¡¿por qué?!, ¡¿por qué?!, no hice nada malo, siempre trate de hacer lo mejor, nunca ofendí a nadie.
Sniff, sniff, mierda, no puedo aguantar mis lágrimas, pero que puedo hacer, estoy desesperada, no quiero una vida así, y lo peor, no puedo matarme, es imposible, pusieron un sello que lo prohíbe.
-"¡Vamos Hilda!, no puedes llorar, tiene que ser fuerte por tu hija..., sniff, sniff, uggg, quiero llorar."
Mis mejillas están calientes y mi pecho húmedo debido a las lágrimas, mire a Eris, y la abrace con fuerza, ella estaba durmiendo, gracias a un tranquilizante, ella estaba muy alterada y asustada. Mi pequeña puede ser violenta y abusiva, y un pequeño monstruo, pero sigue siendo una niña pequeña por dentro.
No paraba de llamar a Ghislaine para que nos salvara, ella todavía no sabe que fue asesinada, incluso su cabeza fue puesta a la subasta.
-"Estúpido y maldito Philip"
Sí. Todo mis problemas son culpa de él, ahora mi destino a sido sellado por él, ¿acaso no puede ser normal?, ¡maldito infeliz!, si solo hubiera tenido gustos normales, nada estaría viviendo estos momentos.
No soy idiota, y sé que la persona detrás de esto, tenía un rencor contra Philip, claro esta. Tal vez un hombre bestia, que perdió a su hijo por culpa de mi esposo degenerado.
"Slap", deja de llorar Hilda.
Abofetee mis mejillas, y me di ánimo, tengo que ser fuerte por mi hija, espero salgamos bien de esto.
Todavía recuerdo cuando era pequeña, siempre soñaba con que unos bandidos atacarían mi carro, e intentarían raptarme. Y de la nada, aparecía un hermoso hombre, en su caballo blanco y su armadura resplandeciente. Sacaba su espada y con justicia, terminaba con todos los bandidos, y me salvaba.
Y luego, nos unían en matrimonio, sniff, era tan ingenua en ese entonces, ahora sé, que los héroes nunca están cuando los necesitas, y que ahora, nadie nos salvara.
Pronto entraron por la puerta, era un hombre gordo y con traje ajustado, parecía que reventaría en cualquier momento, sus ojos eran lujuriosos, pero nunca me toco, era mercancía valiosa y con alto precio. Y como todo comerciante, más que las mujeres, aman el dinero.
Saco unas cadenas, y me las puso, luego otra a mi hija, ambos estábamos unidas, y nos hizo caminar, el pasillo era extrañamente largo, mis pies pesaban, en cuanto a mi hija, tuve que sujetarla, ya que estaba media dormida, el tranquilizante todavía hacía efecto.
No sé cuanto tiempo paso, pero el camino era eterno, talvez era mi mente, que no quería llegar al matadero. Sufridle, y llorad, que los corderos irán al matadero, sonreír y comer, que vuestros estómagos están llenos, vivan y mueran, que el destino, es el mismo para todos.
La luz golpeó mis ojos, y observé el lugar, todos los asientos están ocupados, todos esos ojos llenos de lujuria y deseo, no dejan de mirarme, no me siento incómoda, ya me acostumbre, pero mi hija no, así que puse delante de ella, no quiero que vea esto todavía.
Arriba en el balcón, la sala vip, un hombre gordo, y lleno de joyas y oro, su pelo era rubio y sus ojos azules, a su lado, su hija, era una niña casi de la edad de Eris, tenía el pelo rubio y los ojos azules. Se llamaba Ariel.
Mi mirada no se detuvo, y seguí observando el lugar, y entre ellos, estaba Paul, ese cuñado mío, un playboy asqueroso. ¿Qué hace en este lugar?, quizás desea ofrecer por mí y compradme..., ¡ja ja ja!, seguro una broma, no podrá ganar contra el Rey. Sus ojos se posaron mi, y parecía sorprendido, talvez todavía no llegaba la noticia de la caída de los Boreas, entonces, que hace aquí, no vino por mí, si no por algo más, y su esposa, zenith, nunca la vi, así que no opinaré de ella.
Ahora que recuerdo vive muy lejos, bueno, no importa mucho. Su cara de sorpresa, fue cambiada por una pervertida en cosa de segundos, es una basura. Así que perdí rápido mi interés por él.
Luego, una chica llamó mi atención, tenía el pelo rojo, igual al mío, y su pecho, ¡no puede ser!, no es más grande que el mío, pero siento que perdí, no sé por qué, no solo eso, esa chica es extremo hermosa, y que pasa con su ropa, es muy linda y adecuada para ella.
Deje mirarla, porque algo más robo mi atención, era el hombre rubio que estaba con ella. Nuestras miradas se cruzaron, brrrrr, un escalofrío recorrió mi espalda, es como si hubiera visto un abismo sin fondo, era como un demonio, un ser, que no puedo explicar, tenía tanto miedo.
Pero a la vez, era tan fascinante, que extraño, pero..., quiero que me vuelva a mirar, y ¡boooom!, ¡él sonrió!, y mi corazón dio un vuelco, que pasa con esa sonrisa, es como si fuera un demonio, no..., ¡el rey demonio!, me encanta esa sonrisa, jejejeje.
Y no lo sabía, no este momento. Que mi vida no sería salvado por un héroe, si no, por el rey demonio. Y que mi vida recién comenzaba, y que no podría dormí en las noches, no sin antes ver esa sonrisa diabólicamente adictiva. Por fin, libertad.
Tercera persona POV
La gran subasta del año, estaba a la vista de todos, grandes tesoros, esclavos exoticos y gente de todos los lugares, y claro, muchos VIPs, entre todos ellos, estaba Ágata, que resaltaba por su hermoso cuerpo y rostro.
Ágata suspiraba y tenía el ceño fruncido. Se preguntaba como entrar a la subasta, y entrar como vip, no quería estar entre todos los idiotas, y menos dejaría que León se juntara con la gente normal, ya ve que alguien desea molestarlo y termina matando a todos. Ella conocía a León, y era mejor buscar un lado, donde él pueda disfrutar y estar en paz.
Claro que no solo eso, ella quería estar a solas con León, y avanzar en su conquista.
Mientras Ágata estaba perdida en sus pensamientos, un grupo de tres entraba por la gran puerta que daba ingreso a la subasta. Uno era un hombre alto, y de pelo castaño corto, y detrás una coleta, solo llevaba una camisa. Su nombre era Paul Greyrat, el hombre venado, ya que mientras él está aquí, a su esposa le destrozan el trasero,
El otro era un hombre pequeño, con barba larga que se dividía en dos al final. En su hombro, una especie de acta. Era Talhand, un enano.
Y del otro lado, una hermosa rubia de pechos pequeños, tenía orejas largas, ya que era un elfo. Su pelo era como un taladro, su mirada era coqueta y sus caderas anchas. No importa quien fuera, o que tan pulcro fuera el hombre, todos le daban una mirada y babeaban por ella.
En cuanto a la rubia, estaba más que feliz, y se preguntaba con cuantos hombres podría follar este día, era un gran subasta, así que seguro serían muchos. Ya pensaba en ir por ahi casando algunos hombres y llevarlos al baño, o hacerlo ahí mismo, ella no tenía vergüenza. Follaría con lo que sea que se cruzara por delante, incluso si era feo, o un goblin.
Ella era Elinalise, una hermosa Elfa con problemas de lujuria debido a su maldición. No solo eso, ella era la antigua sirvienta de Laplace, Laplace la ayudo con su problema mágico, y por eso decidió servirle. Claro que ella no lo recuerda, todos esos recuerdos fueron olvidados, o borrados luego de la muerte de Laplace.
Laplace, Orsted, y Hitogami, los seres más poderosos de este mundo, hasta que llego León, para el son solo hormigas sin valor, que pude matar cuando quiera. Pero no se los toma en serio, ni gasta su tiempo en ellos, ya que no son mujeres hermosas, son hombres feos y musculosos, no son su taza de té.
No olvidemos que León, es lujurioso, y no se moverá, a lo menos que sea una mujer hermosa.
A excepciones, como Elinalise, a León no le interesaba, claro era muy hermosa, pero demasiado usada para su gusto, ademas tampoco tiene tiempo de torturarla o jugar con ella, no vale la pena, no cuando tiene una Milf virgen que capturar, además del Oyakodon que podrá ganar gracias a eso.
Con esta captura, serian 4 Oyakondo, Haruno y su madre, Yui y su madre, y claro, Azula y su madre, claro que Azula todavía no sabe.
Dejando eso de lado, este grupo que entro a la subasta, eran conocidos como Colmillos del lobo negro, un ex grupo de aventureros de clase S. Así que llamaron un poco la atención, ya que algunos nobles contrataron su servicio.
Entre saludos de varios conocidos, lograron ingresar y tomar asientos vip, debido a sus conexiones.
Y el porqué estaban aquí, era por la cabeza de Ghislaine, ellos querían investigar quien mato tan brutalmente a una de sus compañeros, y claro, buscar venganza y saber si son apuntados como grupo, o solo era una venganza personal, o solo daño colateral.
-"Mira, jejejeje, es muy hermosa, a que la puedo conquistar."
Paul no estaba de buen humor al principio del viaje, no cuando su esposa lo hecho de la cama, y negó todo contacto. Claro que este humor mejoro gracias a Elinalise, no olvidemos que esta chica es un puta profesional, y no dudara en abrir las piernas.
Elinalise que vio a Ágata, no dudo en aceptar que era hermosa, la mujer más hermosa que ha visto hasta ahora, solo verla la puso cachonda. Elinalise era bisexual, y no tenía problemas con tener a otras mujeres en su cama, y mejor si era un trío, un cuarteto, incluso un ganbang, esta chica ha tenido todas las experiencias sexuales posibles, es un libro de kamasutra andante.
Era algo que todos hombres les gustaría probar, ya que Elinalise, podría hacerte llegar al orgasmo en cosas de segundos, gracias a su basta experiencia.
Elinalise se acercó a Paul, y lo agarro del hombro, para que no fuera y dijo:
-"Tienes razón, déjame ayudarte, parece que se abrirá fácil, además no es virgen, y tiene cara de adoradora de dinero, mira su ropa, es de alta calidad, y el anillo en su dedo, tiene un rastro de maná, quizás sea un anillo de almacenamiento."
-"No necesito tu ayuda." Dijo Paul, un poco molesto.
-"Tranquilo, si logro conquistarla, podríamos tener un trío, ¿no crees que es mejor?"
Paul lo pensó unos segundos, y asintió. Luego dijo muy emocionado:
-"Tienes razón, vamos, vamos, no puedo esperar más."
Talhand, que estaba al lado, solo reía, no le importaba mucho las aventuras pervertidas de sus amigos.
Ágata que estaba al tanto de esto, ya que tiene una audición muy buena, no estaba de buen humor. Menos que la trataran como mujer fácil, que abre las piernas por dinero, nunca hizo eso, además ya tenía un hombre, y que hablaran mal de ella, era ensuciar su reputación.
-"Hola, preciosa, veo que estas solas, no quieres compañía."
Ágata la miro, y se cruzó de brazos, y hablo con condescendencia:
-"Lamento decirte, que no soy una adoradora de dinero, que abre las piernas fácilmente, no como otra."
Elinalise quedo atónita, no pensó que la escucharían, aunque rápido volvió al juego, era una sinvergüenza con más de mil años, no se dejaría ganar por una niña,
-"Escuchaste eso, ¡ja, ja, ja!, solo era una broma, que tal esto, comamos algo, acéptalo como mi disculpa." Dijo Elinalise, mientras intentaba tocar el hombro de Ágata, pero esta se alejó.
-"No estás muy vieja para recoger chicas jóvenes, deberías tener unos 3000 a 5000 años, ¿no es así?"
Una vena apareció en la frente Elinalise, ninguna mujer desea ser llamada vieja.
-"Mocosa, cuando alguien pide paz, no das guerra, si sigues así, no conseguirás ningún hombre, eres demasiado rígida, deberías relajarte, y probar cosas nuevas. Como un trío, ¿acaso no quieres?, además, este hombre es muy guapo y bueno en la cama." Dijo Elinalise, mientras apuntaba a Paúl, que tenía una sonrisa pervertida.
Ágata estaba llegando a su límite, no quería perder el tiempo con idiotas y zorras, tenía que encontrar un palco vip para León, o este se enojaría. En realidad León no se enojaría, le daba lo mismo ser VIP, o estar sentado con el resto, claro que si lo molestan, se enojara y terminarían todos muertos.
-"Hasta luego, no pienso perder mi tiempo con una prostituta, un playboy y un..., y esa cosa."
-"¡Oye!, Los tres gritaron al mismo tiempo, ellos todavía tenían su orgullo, y ser llamado así, no les agrado.
Paul estaba molesto, no pensó que una chica tan hermosa, tendría un temperamento tan malo, y Elinalise también se molestó, no le agrado que la llamaran prostituta, era una, pero que la llamaran así, no le agradaba, después de todo, fue por eso que dejo a su familia, para que ellos no tuvieran manchas en sus nombres.
Ágata no los tomo en cuenta, y se fue, aunque fue detenida por una mano pequeña y blanca, era Elinalise , que no podía dejar ir a Ágata, tenía que darle una lección adecuada, después de todo, ella es un aventurero de clase S, además mujer.
-"Bien, si te disculpas, te dejaré tranquila."
-"¿Y si no?" Dijo Ágata con un tono amenazante.
Elinase se lamió los labios, y le dio una mirada depredadora.
-"jeee, tendré que darte una..."
BOOOOM, Elinalise no alcanzo decir más, Ágata apretó le dio un puñetazo en el abdomen. La rubia de taladros, hizo una línea recta, directa a la pared, incluso la atravesó y creo un hoyo en ella. A pesar de ser un aventurero consumado y de ser una gran luchadora, Elinalise no pudo evitar el golpe.
Y ni hablar de sus dos colegas, todavía no reaccionaban, ni siquiera vieron venir el golpe.
-"¡Elinalise!" grito Paúl, cuando logro entender todo lo que pasaba.
Talhand levanto su hacha y se puso frente a Ágata.
-"No pasarás."
-"No vuelvan a molestarme, o morirán, entiendes"
Talhand asintió, y vio como Ágata se marchaba, nunca bajo la guardia, hasta que desapareció de su vista.
-"Suspiro, que mujer más aterradora, thc, todo culpa de esos dos idiotas." Y dejando esas palabras atrás, fue a ver a su equipo, al parecer estaban bien, aunque Elinalise estaba muy magullada, y su ropa estaba rota, tanto que revelaba lugares vergonzosos. Claro que a ella no le importaba, ahora tenía ganas de follar, y sacar su frustración.
-"Mierda, esa chica es muy fuerte, no lo vi venir." Dijo Elinalise, que intentaba levantarse.
-"Estúpida desgraciada, debiste haberlo pensado antes, casi me arrastran a esa pelea, y no creo que pudiera ganar."
Talhand, el enano, estaba muy molesto, no quería morir joven, menos cuando no había encontrado a la enana perfecta.
-"No discutan más, es mejor curar esas heridas, y volver a la subasta, además todos nos están mirando."
-"No importa, entre ellos ahí buenos machos, ojalá vengan algunos..., aunque tienes razón, necesito curarme, me duele todo" Dijo Elinalise, mientras se frotaba el coño, el mejor anestésico para el dolor, es el placer.
-"Tos, tos, ahora que lo recuerdo, dijo..., no lo recuerdo, talvez no es importante."
-"Bueno, mejor vámonos, quiero sanarme y encontrar algunos hombres para divertirme"
El grupo estaba dispuesto a irse, y curar a Elinalise, pero la rubia se detuvo bruscamente, y su mirada se iluminó, parecían que corazones salían de sus ojos, pero no de amor, eran corazones lujuriosos, Elinalise había encontrado a su nueva presa.
Rubio, ojos rojos, alto, guapo, buenos músculos, además sus ojos y pelo tenían un color similar a los suyos, eso le agrega cierto fetiche, como un juego de roles pensó ella, como madre e hijo, o sobrino y tía, su mente estaba loca, fantaseando mil ideas.
Lástima que estuviera mal de la cadera, o ya se hubiera lanzado y lo hubiera follado frente a todos.
-"Mierda, mira ese hombre, con sola esa mirada me dejaría preñada."
Esta mujer, si solo no fuera una mujer fácil, la hubiera hecho mi segunda esposa, lástima que Zenith sea tan estrecha de mente, suspiro, lo bueno de Zenith, es que no me engañara, a diferencia de Elinalise, estar cerca de ella, es asegurarse unos cuernos y que todos se burlen de ti. Penso Paul, ignorando que su esposa ya lo engaño.
-"Ahh, que tiene de bueno, seguro es un debilucho."
-"thc, vamos a un curandero, luego puedes ir por hombres."
-"¡No!, primero tengo que conseguir una forma de contactarlo, y luego nos iremos."
Paul y Talhand se miraron, y no pudieron evitar suspirar, sabían que era imposible detener a esta mujer, menos cuando encontraba a su presa. Así que la ayudaron a caminar.
León que venía llegando, pudo sentir como alguien se acercaba, cuando vio a Paul, sonrió, pensar que se estuvo follando a su esposa hace algunos minutos, y el idiota no lo sabía, solo ese pensamiento lo hacía feliz. Pero su felicidad se arruinó un poco, cuando vio a la hermosa Elfa rubia.
No podía creer que oliera tan mal, a lo menos unos 30 hombres se acostaron con en estos días, y lo peor, la chica ni siquiera se bañó, si lo hubiera hecho, no olería tan mal. León no tenía problema con follar mujeres que ya no eran vírgenes.
En especial si eran Milf, pero el problema de Elinalise, es que estaba demasiado usada, y por su cuerpo pasaron más de dos mil hombres, y no quería meter su polla en un lugar tan sucio, es sorprenden que nunca ganara alguna infección, deberían agradecer a la magia en ese sentido.
Aun así, no la discriminaría, era su vida, su problema, mientras no lo molestaran, no le haría nada, no era su objetivo, su objetivo era Paúl, y su esposa.
León le dio otra mirada a Elinalise , y miro su abdomen, tenía un rastro de magia, y era un rastro inconfundible, era la magia de Ágata. Si la chica no se curaba pronto, se congelaría desde dentro, desde cuando se volvió tan cruel esta chica. Pensó Leon.
Elinalise sonrió con picardía y confianza, ella notó que León la miraba, y pensó que era por su belleza. Una idea errónea, ya que León solo la miro por curiosidad.
-"Hola chico guapo, no quieres jugar un rato, incluso puedes preñarme, me gustaría dar a luz un hijo contigo, seguro sería hermoso"
León frunció el ceño, y la miro con desdén:
-"No estas a mi altura, ahora deja mi vista, o te mataré, pero antes, tú, me caes mal." Dijo León, apuntado a Paul.
Paul estaba confundido, y se apuntó, preguntándose si era a él a quien se refería. León asintió y Paúl levanto una ceja, nunca antes se había encontrado con León, y no lo reconocía de ningún lado. Pero por algún motivo, Paúl odiaba a León, no sabía por qué, pero algo muy dentro de él, le decía que lo odiara, así que decidió burlase.
-"¿Es así?, no te reconozco..., ¡no me digas!, talvez conocí a tu mujer, y la robe, si es así, puedes culparte por ser tan..., uhhhhhh.
León levantó su pierna y le dio una fuerte patada a Paúl, directamente en las bolas. Paul solo pudo gritar para sus adentros, mientras sentía como fuerte dolor inundaba todo su cuerpo, era mejor morir que sentir tal desgracia.
-"Nos vemos."
Todos estaban sorprendidos, hoy, por segunda vez, alguien golpeo a un miembro de su grupo, y no solo eso, era tan fuerte, que ni defenderse pudieron, hoy era el día, en que recordaron en que existían muchos monstruos afuera, y que no deberían provocarlos.
León tarareaba muy feliz mientras se iba, esa patata no era normal, iba cargado con maná, y magia de desintegración, con el tiempo, a Paul se le caerá la polla, y nada, ni nadie podrá curarlo. Como podría León dejar que tocara a su mMilf, Zenith ya era su sirvienta y juguete personal, solo que todavía no era hora de llevársela.
Algunas horas pasaron, y León y Ágata ya se habían juntado, y la subasta ya había comenzado, en ella se habían vendido espadas santas y malditas, algunas armaduras raras, mapas de tesoros, ginseng de mil años. León lo compro, porque le pareció interesante, luego se lo daría a Riven para que lo plantara.
León siempre pensaba en sus mujeres, y cada vez que podía, les llevaba regalos y cosas que le gustan, no era fácil tener un harem, y menos mantenerlos felices y satisfechos.
-"Siéntate Ágata, todavía falta mucho para el producto que deseo comprar."
-"Leon, hmm, como compraremos todo eso, no tenemos monedas de oro, tuve que matar a un noble para tener esta sala vip."
-"Jajajaja, Ágata..., desde cuanto hacemos las cosas según las reglas, una vez que tengamos la mercancía, nos vamos, en cuanto a pagar, ¿por qué debería?, deberían estar felices que no entro y me los llevo a la fuerza, incluso puedo matarlos a todos, y problema resuelto.
Ágata asintió, después de todo León tenía razón, él podía matarlos a todos, y llevarse lo que quiere, después de todo, el fuerte es el único que tiene derecho a negociar, y como León es el más fuerte, y ellos débiles, León pone el precio a las cosas, es así de simple.
-"ahora siéntate en seiza."
Ágata asintió, saco una pequeña almohada, y la puso en el suelo, luego se arrodilló, dándole la espalda a León.
-"hhhmm" Ágata no pudo aguantar soltar un gemido de satisfacción.
León sacó una peineta, y comenzó a peinar a Ágata. Ella estaba feliz y su corazón latía como loco, León era muy bueno con los peines, después de todo tiene muchas mujeres, y como tal, sabe varias cosas que pueden complacerlas, además del sexo. Excepto cocinar.
Ágata ronroneaba como un gato. León solo podía sonreír, a veces es bueno pasar momentos tranquilos y relajados. Son momentos importantes en la vida, más cuando estas con una mujer, momentos como estos, son los que te ayudan a comprenderlas mejor.
(Continuara)