10- Un Pequeño Contratiempo

Namjoon manejó lo más rápido que su auto le permitiría hasta llegar al hospital. Una vez en la cercanías, vio que el tráfico era muy intenso y que si se estancaba ahí, Yang Mi nunca viviría para ver el día de mañana. En la parte trasera del auto, se oía cómo respiraba con dificultad y cada vez más lento. Decidió Namjoon entonces, dejar el auto estacionado en algún lugar. Encontró un espacio en el borde d ella calle donde pudo estacionarse y saco a Yang Mi del auto, la envolvió en sus brazos de nuevo, y corrió, corrió con las pocas fuerzas que le quedaban para llegar al hospital. Tan pronto logró ver que atenderían a Yang Mi en la sala de emergencias, se desmayó, toda la adrenalina que había entrando en su cuerpo en ese momento se había ido. Despertó tres cuartos de hora después en una cama de hospital. No le había pasado nada grave. Simplemente el cansancio lo había drenado completamente. Se levantó de la cama y se dedicó a buscar a Yang Mi. Al pasar por un pasillo miro el tablero de cirugías y vió.

Jo Yang Mi Contusión severa Pneumothorax por tensión, aorta desgarrada.

Namjoon no tenía mucha experiencia con temas médicos, pero tantas cosas en una sola persona se oía bastante grave. Y entonces estuvo esperando, horas y horas, hasta que dos doctores salieron de la puerta que dirigía al quirófano.

-¿Cómo está ella?- les preguntó Namjoon.

-Esta débil, el daño en su cuerpo era bastante extenso, sin embargo logramos estabilizarla por el momento. Estará aquí un par de semanas hasta que se recupere completamente. Le recomiendo que se quede con ella, necesitará todo el apoyo necesario.- le dijo el doctor.

Un mes después

Ya un mes había pasado desde el viaje a Seúl, el caso había sido resuelto. Se descubrió que los secuestros eran realizados por una rama de la actual mafia coreana aliada a la vez con la Yakuza( mafia japonesa ). Kyul fue vinculado con esta asociación y condenado a veinte años de prisión. Lo qué pasó después de que la llamada con Yang Mi se cortará fue que los mafiosos lanzaron bombas con humo somnífero adentro de su casa. Después de que yaciera inconsciente se la llevaron a la cabaña.

Yang Mi sin embargo no se recupero totalmente. Sufrió mucho con síndrome de estrés postraumático. Namjoon fue quien la ayudó a recuperarse en su mayoría, ya que él era la única persona en la que confiaba después del secuestro. Él nunca se separaba de ella, lo cual ponía a Sun hee muy celosa. Sin embargo algo que realmente dejó que el vaso se derramara fue cuando Namjoon le compró a Yang Mi un departamento enfrente del suyo en Seongnam.

—Como se te ocurre semejante cosa Nam, una cosa es que la acompañes durante su tratamiento, una cosa es que la quieras ayudar, y otra es que le compres un maldito apartamento.— le espetó a la cara Sun hee con disgusto.

—Escúchame, no se que te picó pero lo que dices no tiene sentido, Yang Mi compró el departamento por su cuenta, yo solo fui quien le comentó que en mi edificio había un departamento a la venta. Se lo dije porque me comentó que estaba buscando un apartamento y ya.—respondió tranquilamente Namjoon. Solo pudo ver cómo Sun hee se dio la media vuelta y se fue caminando frustrada.

Dos años después

El invierno llegaba nuevamente a Seúl, especialmente frío este año. Namjoon se encontraba recargado sobre el respaldo de su cama observando la ventana empañada de su cuarto a su derecha. Lleva su mano a la ventana y observa el dorado anillo que lleva puesto desde hace seis meses en su dedo anular. Piensa que seis meses es poco comprado con lo mucho que quiere mantenerse junto a su amada esposa. Se voltea a la izquierda y observa el rostro dormido de su amada, tan hermoso como la primera vez que lo vio. Aún más tal vez. Se inclina y le da un pequeño beso en la frente, después susurra en su oído las palabras —Te amo— luego se recuesta sobre su almohada y la acerca a su pecho desnudo, rodeándola con sus brazos. La amó desde el primer día. Y la amará hasta que la muerte lo separe de ella.

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—¿Me amas Nam?—le preguntó Yang Mi con su mano sobre el pecho descubierto de Namjoon.

—¿Qué quieres decir? Por supuesto. Eres la persona que más he amado en toda mi vida. No podría vivir sin ti.—le responde él poniendo su mano sobre la de su amada. Procede a entrelazar sus dedos con los de ella, llevar la mano de Yang Mi a su boca y besar sus nudillos.— Te amo como a nadie, y no hay nada ni nadie que cambie eso.— Puso entonces las manos de ambos en medio de ellos e inclino su cabeza para besarla. Ella al igual se acercó a él hasta que sus caras estaban casi juntas. Él tomó la iniciativa de juntar sus labios, puso su mano libre sobre su mentón y besó sus suaves labios. Ella lo correspondió al momento que sus labios tocaron los suyos. Se separaron para tomar aire y luego Namjoon procedió a besar su cuello suavemente, ella soltó pequeños gemidos al sentir los labios de Nam besando la piel de su cuello. Ella abraza la cintura de Namjoon con su otro brazo, acercando su cuerpo más al suyo, queriendo que no se separara de ella. Queriendo que ese momento en el que sus cuerpos eran uno solo no terminara. Quería tenerlo junto a ella por siempre.