Dos mundos chocan

En medio de una calle en la noche se encuentra una niña de 5 a 6 años, cabello bicolor negro y blanco pero parecía mas como si estuviera con rayos de color negro en el, en su cabeza tenia orejas de gato y detrás de su espalda se asomaba una cola con los mismos colores que su cabello, junto a ella estaba una mujer que se veía como de 29 a 30 años muy parecida a la niña pero ella estaba recostada en el suelo con sangre por todos lados y la pequeña estaba llorando a un costado.

"Mamá mamá despierta no dejes a Shiro sola, no quiero estar sola"

Su mamá intento abrir los ojos para poder ver a su niña pero solo vio una imagen borrosa y no podía distinguir nada pero con las pocas fuerzas que le quedaban dijo:

"Shiro... corre.... tienes.... corre"

Fue lo ultimo que dijo antes de dar lo ultimo para empujar a su hija para que corriera, Shiro lo único que pudo hacer fue correr como le dijo su mamá pero el destino siempre fue cruel ya que cuando corrió para ir a un edificio que su mamá muchas beses le dijo que fuera si pasara algo malo, se encontró con la persona que hirió a su mamá, ella asustada se dio la vuelta par correr en dirección contraria a la persona, ella en un intento de escapar se dirijo a las puertas del reino para poder salir, en el camino gritaba para que la gente saliera.

"Ayuda por favor alguien ayúdeme"

Por desgracia nadie salio, mas bien nadie quería salir todo por miedo al Rey.

En un instante Shiro se detuvo mientras sujetaba su cabeza a causa de un dolor muy grande por desgracia no tenia tiempo para detenerse ya que en unos minutos el hombre no tardaría en alcanzarla, a causa del dolor de cabeza ella no pudo correr y el hombre logro alcanzarla, en el momento en que el hombre se agacho para sujetarla por el cuello, Shiro se giro abrupta menta con una de sus manos dirigiéndose al cuello del hombre con los dedos completamente rectos y juntos. ella atravesó el cuello del hombre con su mano en cuestión de segundo, sin que el hombre se diera cuenta de lo que había pasado cayo al suelo sin vida mientras la sangre salia de su cuello manchando la calle debajo de el.

Shiro por otro lado con total indiferencia se dio la vuelta y corrió en dirección a la salida del Reino, mientras corría intentaba comprender los que estaba sucediendo ya que no comprendía lo que estaba pasando, ella decidió que era mejor dejar todo para después ya que su prioridad era salir del reino en el que se encontraba ya que esa fue su prioridad o eso fue lo que comprendió de las memorias confusas que tenia en este momento.

En unos minutos ella consiguió estar cerca de las puertas que dan al exterior del reino, justo unos pocos metros antes de llegar se escondió en un callejón mientras observaba las puertas al frente completamente serradas y custodiadas por tres personas, mientras observaba las puertas buscaba una manera de salir sin tener que llamar la atención de los guardias, a causa de no encontrar manera de burlar a los guardias decidió hacer una distracción, buscando en el callejón en el que se metió encontró unas ratas entre la basura así que decidió usarlas como la distracción, corrió a tomar dos ratas y las arrojo a la ventana de una casa, rompiendo la ventana las dos ratas golpearon a una mujer en la casa que causo que gritara por el susto y el asco que le dieron, esto alerto a los guardias cerca de la puerta que corrieron a donde escucharon los gritos.

Shiro no sabia si estas personas eran muy confiadas o completamente tontas ya que en uno de los tres guardias consigo vislumbrar las llaves de la puerta colgando de su cadera sin mencionar que corrieron juntos dejando las puertas completamente solas, en el momento que los guardias pasaron por el callejón donde Shiro se ocultaba, ella corrió y tomo las llaves del guardia sin que se diera cuenta y corrió hacia donde se encontraba la puerta lateral de las gigantescas puertas del Reino, ella abrió la puerta y salio corriendo al bosque que estaba a unos pocos minutos del muro del reino y se adentro en este mientras corría para alejarse del reino lo mas que podía.

Unas horas después encontró una cueva oculta entre enredaderas y arbustos que de no ser que callo dentro mientras intentaba sujetar la pared de piedra queriendo recuperar el aliento de correr todo el tiempo no la hubiera encontrado sin importar cuanto buscara en el día sin mencionar en una noche como en la que se encontraba ya que es una noche sin luna que se considera la mas oscura de todas.