Capítulo 35 – Una actuación impresionante

La familia An.

Cuando llegaron a la entrada de la casa, An Xiaxia también sacó una máscara desechable y se la puso. Hasta escondió la herida en su mano con la manga antes de entrar, fingiendo que no había pasado nada.

—Papi, ¡volví! ¡Voy a subir! —dijo con una sonrisa An Xiaxia y, luego, subió las escaleras corriendo a toda velocidad.

El Papá An sonrió con resignación y dijo:

—Xiaxia, ten cuidado.

An Xiaxia hizo oídos sordos y subió rápidamente.

Sheng Yize la miró con desdén y saludó al Papá An, luego, también subió las escaleras. Se quedó en el tercer piso por un corto rato, pero se distraía a cada rato. Durante ese rato, Chi Yuanfeng fue a su habitación para hablar de algo, pero lo ahuyentó la actitud fría de Sheng Yize.

Pensó en la herida de An Xiaxia y frunció el ceño. Después de pensar al respecto por un rato, no pudo evitar bajar al segundo piso. Sabía dónde estaba la habitación de An Xiaxia. Cuando llegó e iba a tocar la puerta, se detuvo ante los sonidos que venían de adentro.

—Hermano, ¡recuerda traerme un regalo cuando regreses! ¡Prométeme que no lo olvidarás!

—Por qué me preguntas cómo estoy... jaja, por supuesto que estoy bien. Todo está bien en la escuela nueva, mis compañeros son simpáticos y todo es genial —dicho eso, la dulce voz de la adolescente hizo una pequeña pausa antes de volverse más nasal.

La expresión de Sheng Yize permaneció indiferente, pero un leve dolor estaba naciendo en algún lugar en lo profundo de su corazón.

«¿Está llorando?», pensó.

—Estoy bien, de verdad. No te estoy mintiendo y tampoco estoy llorando... solo te extraño. Así que vuelve lo antes posible... Bueno, adiós, ahora tengo que hacer mi tarea —An Xiaxia colgó el teléfono y resopló. Luego tomó el hisopo de algodón y volvió a encargarse de su herida.

Cuando el alcohol tocó su herida, chilló de dolor. De pronto, la puerta se abrió de golpe y ella volteó sorprendida. Cuando se dio cuenta de que era Sheng Yize, hasta se le cayó el hisopo de algodón que tenía en la mano.

—¿¡Por qué entraste a mi habitación!? —An Xiaxia se ruborizó un poco.

Sheng Yize se sintió bastante incómodo. Se frotó la nariz y frunció el ceño cuando sus ojos cayeron en su herida.

—¿Por qué no le pides al Tío An que vea tu herida?

—No quiero que se preocupe. Además, esto no es tan grave... —murmuró para sí misma An Xiaxia. Luego, sonrió con dulzura a Sheng Yize—. Todavía no te lo he agradecido. Gracias por creer que no usé el cuchillo para herirlas... Aunque, ¿por qué entraste a mi habitación?

¿¡Estaba planeando algo!? An Xiaxia se cubrió el pecho nerviosamente.

La esquina de la boca de Sheng Yize se crispó un poco. Esta chica... ¿qué tipo de persona pensaba que era? Se acercó a ella y tomó otro hisopo de algodón, luego, comenzó a atender la horrenda herida en la mano de An Xiaxia.

—Tus habilidades actorales son impresionantes y mientes bien —dijo lentamente Sheng Yize.

An Xiaxia ensanchó los ojos y dijo:

—¡No estaba mintiendo! Era una mentira blanca, ¿sí? Mmm... Parece que tienes experiencia vendando. ¿Haces esto con frecuencia?

—Antes de que tuviéramos un representante, nos cuidábamos solos si nos hacíamos daño durante los ensayos. Cuanto más nos herimos, más experiencia adquirimos —le explicó en un tono despreocupado a An Xiaxia.

«Ya veo, Starry Night también tuvo una época desdichada.»

—¿De verdad eres el heredero de la familia Sheng? ¿Por qué estás en la industria del entretenimiento haciendo todo ese trabajo duro? —preguntó curiosamente An Xiaxia.

Sheng Yize levantó una ceja y respondió:

—¿Qué? ¿Deseas que sea él?

An Xiaxia sonrió avergonzada y dijo:

—No... Solo lo encuentro muy inconcebible.

No obstante, si lo pensaba, todo calzaba.

Si no era el joven amo de la familia Sheng, cómo era posible que fuera tan atractivo y caprichoso...

Si no era el joven amo de la familia Sheng, cómo era posible que no hubiera información de su familia después de su debut hace tres años...