Rompiendo el sello

Ese era un bosque extremadamente denso. Aunque ocasionalmente había algo de luz que se filtraba por los espacios y se esparcía, aún era difícil expulsar esa oscuridad dentro del bosque. Era probable que la atmósfera que ejercía presión sería difícil de soportar cuando uno entraba a ese lugar.

Una ola de pasos apresurados resonó repentinamente en el bosque silencioso. Inmediatamente, un gran grupo de figuras negras indistintas aparecieron en un rincón del bosque. Esas figuras negras caminaban de una forma extremadamente silenciosa y eran evidentemente manos viejas muy experimentadas. Mientras caminaban, sus miradas estaban revisando cuidadosamente los rincones oscuros circundantes. En la Región Esquina Negra, uno siempre debía colocar la palabra 'cauteloso' en su corazón en todo momento, sin importar la identidad. Algo como un bote que se hundía en un drenaje ocurría casi todos los días. Si uno quería vivir más, siempre debía ser cauteloso.