La más grende crisis de Gu Jingming

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Estaba mucho más despierta ahora. Levantó la cabeza y miró hacia afuera...

¿Dónde estaba este lugar?

El auto se dirigió en una dirección con la que no estaba familiarizada. En un instante, Yu Minmin sintió que no volvería a casa. En cambio, se estaba alejando cada vez más.

—Ustedes ¿Qué está pasando? ¿Quiénes son? ¿¡A dónde me llevan!?

Los dos la miraron. Para horror de Yu Minmin, sus expresiones ya no tenían el mismo respeto que por ella en este momento. En cambio, tenían una expresión cruel y no parecían buenos.

Uno de ellos la observó y sonrió con frialdad. Luego, cubrió su boca con una mano.

Yu Minmin gritó sorprendida y sintió que inhalaba algo peculiar. Luego, perdió el conocimiento y se quedó sin fuerzas.

Los dos vieron que Yu Minmin se desmayó y tomaron el teléfono.

—La tenemos y nos dirigimos hacia M Nation ahora. Sí. Conduciremos por los caminos pequeños. No seremos descubiertos. Sí.