907 Los Cumpleaños son para Pasarlos Juntos

—… —Gu Jingze sonrió y dijo—: Está bien, está bien. Pruébalo primero.

Lin Che sostuvo el arma con una mano. Anteriormente ya había hecho los movimientos simulando disparar mientras filmaba. Así que, definitivamente sabía qué hacer, aunque sostener un arma de verdad era un poco diferente a actuar.

El corazón de Lin Che incluso se estremeció de emoción. A partir de entonces, disparó un tiro directamente. El gran impacto la hizo sentir como si hubiera sido empujada hacia atrás. A partir de entonces, no sabía dónde había ido la bala.

Detrás de ella, el entrenador sintió la necesidad de reírse. Lin Che se preguntaba con incredulidad cómo el retroceso podía ser tan fuerte...

Gu Jingze dijo:

—Ahora lo sabes, ¿verdad? El retroceso es muy fuerte. Dale otro buen tiro.

Lin Che frunció los labios.