El matrimonio es para toda la vida

Yu Lili estaba a punto de ayudarlo a ponerse la ropa, pero se detuvo en seco. Tiró su ropa a un lado y se alejó diciendo: "Me voy a bañar".

Ou Ming podía decir que esta mujer estaba realmente enojada. Corrió hacia ella y la retuvo. "Espera, Yu Lili".

Yu Lili se detuvo en seco y se volvió para mirarlo.

"¿Qué pasa? ¿Por qué de repente estás enojado de la nada? ¡Al menos tienes que decirme la razón!" Ou Ming la miró y no supo qué más decir. "De repente estás enojado sin razón. Soy realmente inocente..."

"No estoy enojada", afirmó claramente, pero sus rasgos faciales se tensaron imperceptiblemente. "Suéltame. Me voy a bañar".

"¿Estás enojado porque te arrastré al baño conmigo?" Ou Ming agarró pajitas mientras fruncía el ceño.

Muy pronto, rechazó esa noción. No era como si nunca antes se hubieran duchado juntos. Por el contrario, tal actividad era casi tan común para ambos como comer juntos.

¿Por qué había que enfadarse?