Las cejas de Xi Xiaye se alzaron aún más, su rostro justo y delicado florecía con una rara sonrisa de alegría. La quietud en sus ojos centelleantes era similar al cielo nocturno después que las nubes oscuras se hubieran disipado, la luz múltiple de estrellas brotaba como un torrente.
—¿Qué tan válidas son tus palabras? De hecho, parece que estoy oliendo algo de ti en éste momento...—ella sonrió lentamente y lo miró desconcertada.
Actuó con calma como siempre y la miró. Si él hizo la suposición correcta, entonces no caería en su trampa. Respondió con voz baja: —Es el olor a hombría que te cautiva.
Cuando dijo esto, Xi Xiaye se sorprendió por un momento. Luego lo miró con seriedad y dijo con calma: —No, es un olor agrio, como el de los celos...
—Pura imaginación tuya, Señora. ¿Crees que un hombre tan excelente como yo estaría celoso de un hombre humilde? ¡Es absurdo!
Support your favorite authors and translators in webnovel.com