—¿Qué debo hacer?
—Necesito algunos materiales mágicos. Esta es la lista. Mira si puedes ayudarme
con ellos —preguntó Lin Yun al pasarle la lista a Raymond.
Después de terminar las pociones Espectrales, Lin Yun no salió de la casa. Estaba
muy insatisfecho con la eficacia de sus dos Látigos Tornado. Ya fuera por el poder
o la precisión, estaban muy lejos de lo que hubiera sido capaz en el pasado.
Incluso dudaba de que esos hechizos los hubiera lanzado él.
Después de pensarlo, ese Mafa Merlin había estado estancado como aprendiz por
tanto tiempo que cobraba más sentido. Él tenía muy poco talento innato. Su
habilidad para sostener el maná o controlarlo estaba muy por debajo del promedio.
Hasta podía ser considerado un cuerpo fallido. El trabajo duro y la diligencia solo
podían hacer que el maná acumulado fuera más fuerte, pero no podían superar
los fallos del cuerpo y avanzar para convertirse en un verdadero mago.
Naturalmente, después de que Lin Yun llegara, se valió de su control superior de
maná y usaba un método tosco y rudimentario para avanzar en materia mágica.
Pero esto era solo porque quien controlaba este cuerpo ahora era Lin Yun, no
porque el problema de este cuerpo se hubiera resuelto.
El problema estaba lejos de ser resuelto. Aunque el maná en el remolino ya había
tomado forma, en el futuro, de Mago a Gran Mago, de Gran Mago a Alto Mago y
de Alto Mago a Archimago, cada vez que se graduara, las imperfecciones del
cuerpo le causarían más complicaciones. Si no resolvía el problema ahora, Lin
Yun iba a padecerlo tarde o temprano.
En esta era, la investigación de la materia no había madurado lo suficiente, pero
esta clase de defecto físico era el equivalente a ser cortado del camino del mago.
Si uno no era capaz de sostener un flujo de maná un poco más intenso, ¿cómo
podía convertirse en un mago calificado?
Afortunadamente para él, no pertenecía a esta era.
Resolver el problema de la sustentación de maná no era un problema, ya que Lin
Yun tenía por lo menos dos días.
Usó una técnica especial de meditación para cambiar el patrón de su flujo de
maná, pero el tiempo requerido para este método no era significativo. No sería
capaz de avanzar para convertirse en un gran mago por lo menos en tres o cinco
años si siguiese ese camino. La segunda forma era usar una poción de alquimia
para fortalecer el cuerpo. Este método era más rápido. 10 días en el mejor de los
casos, 15 en el peor. ¿Pero comparado a tres años?
Por supuesto, el coste de este método será enorme. Muchos materiales mágicos
que podían ser descritos como invaluables, incluso en esta era, y las 30 000
unidades de oro en las manos de Lin Yun, no estaban cerca de ser suficientes.
Pero no era urgente. Lin Yun estimó que antes de avanzar a Gran Mago tendría
una buena cantidad de tiempo, así que, durante ese tiempo, mejoraría su
entendimiento de este mundo.
Al recibir otra oportunidad, Raymond estaba ansioso por ayudar. No había
suficiente tiempo para relajarse en sus 10 días de vacaciones para terminar con
esto. Abrazó su botella de poción y corrió, haciendo que el anciano mayordomo
sacudiera su cabeza con una expresión solitaria. Suspiró, murmurándose a sí
mismo que su hijo había crecido y ya no quería quedarse haciéndole compañía a
su viejo padre.
—Así es, no es muy afectivo. Deberías darle una paliza cuando vuelva.
Lin Yun no tenía inconveniente con calumniar a Raymond mientras se preparaba
para ir al Gremio Mágico.
El Gremio de Magos también estaba en la calle Retorno Victorioso. Estaba a dos
intersecciones de la Rosa Dorada y se podía ver la Torre de Sabiduría alcanzando
el cielo. Las runas engravadas en la torre estaban constantemente parpadeando,
incluso cuando el sol brillaba, aún estaban cubiertas de esa misteriosa luz
intermitente.
Lin Yun se detuvo al pie de la torre, analizando las runas talladas en su exterior,
mientras esperaba que el guardia inspeccionara su pase. A juzgar por las runas
inscritas en la torre, debía haber sido construido en una era no pacífica, porque la
mayoría de ellas se utilizaban en batallas entre ejércitos, a la escala de decenas
de miles. Además, el maná que fluía de las runas se había usado más de una vez.
Más que una «torre», era más apropiado llamarla un «fuerte».
—Bienvenido a la Torre de Sabiduría.
Cuando vio el símbolo mágico dorado en la tarjeta de cristal, el guardia lo
reconoció inmediatamente y su tono se tornó más respetuoso. Este símbolo
significaba que el portador poseía los más altos privilegios y era libre de leer
cualquier libro en la biblioteca de la torre. En toda la Ciudad de Mil Velas, solo
siete personas tenían tal privilegio. Cada una de ellas era una autoridad a la cima
de su respectivo campo. No era alguien que un simple guardia como él pudiera
descuidar.
—Gracias. —Lin Yun inspeccionó el pase devuelto y sonrió ante el trato
respetuoso del guardia antes de entrar al recibidor milenario.
Podría decirse que la Torre de Sabiduría era el palacio mágico en la Ciudad de Mil
Velas y, por ende, su biblioteca era un cuarto atesorado. Poseía la colección de
libros más grande de todo el reino del este. Numerosos sabios habían dejado sus
manuscritos aquí y, cada año, incontables magos se molestaban en viajar grandes
distancias para llegar hasta aquí y entrar en la biblioteca de la Torre de Sabiduría,
incluso si solo era para pararse tontamente dentro un largo rato.
Para los magos, el conocimiento era como una droga, y su sed de conocimientos
superaba todo lo demás. En el área de Loshent, muchos magos pagaban sumas
exorbitantes de dinero para ganar acceso a la librería de la Torre de Sabiduría, sin
arrepentimiento.
Naturalmente, Lin Yun poseía el pase con mayor acceso, así que no
experimentaba esa clase de sentimiento.
Al subir lentamente por los delicados escalones decorados, pasó al lado de
algunos magos apurados. Pronto, Lin Yun se encontró parado fuera de la
biblioteca, en el decimoctavo piso de la Torre de Sabiduría.
La biblioteca era muy pacífica. Desde fuera, se podían observar siluetas con
túnicas negras sentadas en varios escritorios. Rara vez hablaban entre ellos e
incluso cuando no tenían otra opción más que hablar, susurraban muy
suavemente; al punto que Lin Yun, quien se encontraba en la entrada, no podía
escuchar nada más que el sonido añejo de las páginas siendo volteadas.
—Es un muy buen ambiente de lectura.
Lin Yun entró en la biblioteca e intentó no hacer ni un sonido. Encontró un
escritorio vacío contra una pared y apoyó su pase para mostrar que este asiento
se encontraba ocupado. Sin embargo, cuando estaba a punto de ir a buscar un
libro, un joven mago de túnica negra se sentó frente a él.
Cuando aquel mago se sentó, apoyó los tres libros en sus manos con algo de
fuerza, haciendo sonar un fuerte golpe. Lin Yun, que se acababa de levantar no
pudo resistir fruncir el ceño y le dio una mirada extraña al otro mago.
—¿Me has olvidado tan pronto, Merlín?
El joven mago parecía tener unos 25 años, era bastante atractivo, pero su
semblante actual era muy desagradable. Por ello, Lin Yun no pudo evitar su
expresión al verlo.
Si Raymond lo viera fruncir el ceño, definitivamente se callaría. Pero este joven
mago no era Raymond. Desde aquel día en la Rosa Dorada, cuando Lin Yun casi
lo había matado, solo había tenido que fruncir el ceño una vez. Ahora lo estaba
haciendo de nuevo.
Quien acababa de aparecer no parecía entender el significado de la expresión. Lin
Yun estaba claramente disgustado y, de hecho, no parecía recordarlo para nada,
pero el tipo continuó de manera exagerada: —Apenas nos vimos el mes pasado,
¿Cómo puedes haberme olvidado tan rápido? Ser olvidadizo no es bueno. Soy
Mason. El mes pasado golpeé tu nariz hasta sangrar en la reunión del Sindicato
de Cámaras de Comercio. Ese Mason.
—¿Mason? —Lin Yun estudió sus nuevos recuerdos y descubrió que tal persona
existía.
Y había dejado una profunda impresión...