Romper el punto muerto

Durante la Edad Media, Osric era un racista muy conocido. Siempre había pensado que otras razas además de los Altos Elfos eran inferiores y aptas sólo para servir como esclavas de los Altos Elfos. El elfo Helios Hollisas Dalisma y ese humano real de Rotterdam que había llegado a donde estaba gracias a su esposa tenían muchos rencores contra Osric. Si no fuera por la represión de la Reina Altos Elfos Azshara, Osric los habría matado personalmente.

Además, al final de la Edad Oscura, los humanos fueron la fuerza principal que derrocó el gobierno de los Altos Elfos. La extinción de los Altos Elfos podría atribuirse a la masacre que llevaron a cabo los humanos. Así, se podría decir que la única forma de resolver el odio entre las dos razas era que una de ellas pereciera.