Capitulo 258: Yagura (Segundo)

"¡¿Ehhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh?!" - el rostro de Tsunami se enrojeció aún más mientras sentía con la vergüenza aumentaba con cada segundo que pasaba.

"Te lo dije, sabía que esto pasaría" - dijo Kurama mientras negaba con la cabeza.

"¡¿Cómo estás seguro de eso?!" - exclamó Tsunami mientras abría los ojos en sorpresa. Ella podía jurar que no solo sus mejillas estaban rojas, sino también sus orejas.

"Tengo la suficiente experiencia como para poder calcular ese tipo de cosas" - respondió Kurama con seriedad mientras sus ojos brillaban ligeramente - "Puedo asegurarte que tus pechos son ligeramente más pequeños que los de Miko-chan por unos 3 centímetros, o al menos ese es mis cálculos, una lástima que solo son números y no hay manera de que pueda comprobarlo"

"¿Por qué no lo compruebas?" - preguntó Tsunami, solo para taparse la boca al comprender lo que había dicho.

". . ." - Kurama le dio una mirada llena de sorpresa a la mujer, quien parecía estar rogando porque la tierra se la tragase - "OK, no esperaba esa respuesta"

"Solo ignórame..." - dijo Tsunami mientras agachaba la mirada para que no viera lo avergonzada que estaba.

"No creo que sea posible luego de lo que dijiste" - comentó Kurama mientras negaba con la cabeza.

"Ugh, que alguien me mate..." - suspiró Tsunami mientras sus ojos se empañaban en lágrimas.

"¿Kaasan?" - preguntó Inari con sorpresa al ver a su madre con el rostro rojo al lado de un hombre familiar - "¿Sensei?"

"Oh, hola, Inari" - sonrió Kurama mientras veía a su clon, quien solo asintió antes de desaparecer en una cortina de humo - "Tuvieron una linda conversación ustedes dos"

"Fue un buen descanso" - dijo Inari mientras miraba al pelirrojo con una sonrisa - "Pero, ¿Qué es lo que estaban haciendo juntos?"

"Hablando sobre ti" - dijo Kurama con una enorme sonrisa - "Tu madre me contó muchas cosas interesantes sobre ti"

"Ugh..." - Inari no necesitaba ser un genio para saber que ahora Kurama tenía unos cuantos secretos oscuros que solo su madre sabía.

Tsunami se calmó un poco cuando vio que habían dejado ese vergonzoso tema a un lado, solo para mirar a su hijo con una sonrisa - "Kurama-kun también me contó algunas cosas sobre tu entrenamiento, Inari, y estoy muy enojada por como te has sobre esforzado tanto"

"Ugh..." - Inari nuevamente gimió en irritación al ver como su madre lo estaba mirando con neutralidad - "Pero..."

"Lo siento Inari, pero ella tiene muchos motivos para estar molesta" - dijo Kurama mientras Inari agachaba la mirada - "Ok, suficiente de bromas, creo que es tiempo de que me retire"

"¡E-Espera, Kurama-kun!" - exclamó Tsunami mientras miraba al joven - "M-Me gustaría que viniera con nosotros a cenar"

". . ." - Kurama sintió algo en la mujer mientras veía como en su rostro aumentaba la tonalidad carmesí - "¿OK?"

"¿Vas a venir con nosotras?" - preguntó Inari mientras miraba a su instructor.

"Hmm... tendría que avisarles a los demás que voy a cenar fuera" - dijo Kurama mientras se ponía a pensar - "OK, voy con ustedes"

* * * * *

"Esto es una pérdida de tiempo" - dijo Onoki mientras fruncía el ceño al ver el reporte que tenía frente a tus ojos - "Solo tenemos que lanzarnos con todo contra esos bastardos"

"No creo que sea buena idea" - respondió su secretario mientras miraba a su líder - "No sabemos si ellos tienen más fuerzas escondidas, o miembros secretos"

"Cierto... pero sigue siendo un problema que podemos resolver con fuerza bruta" - respondió Onoki con seriedad mientras sacudía la cabeza - "Es por eso que tenemos que reunir a nuestros mejores shinobis y lanzarnos contra ellos de una vez por todas"

El secretario negó con la cabeza mientras empezaba a explicarle a su obstinado Tsuchikage.

* * * * *

". . ." - Gaara se quedó en silencio unos segundos antes de dejar el documento en el escritorio.

"¡Quiero venganza!" - exclamó Shukaku mientras entrecerraba los ojos - "¡Deseo ver la sangre de esos hijos de puta que quisieron encerrarme en esa puta estatua!"

"¿Tan malo es?" - preguntó Kankuro mientras miraba al Tanuki.

"Imagina ser encerrado en una celda tan pequeña que a duras penas contiene tu cuerpo" - dijo Shukaku mientras gruñía con irritación - "Sin contar que poco a poco pierdes la capacidad de pensar, volviéndote solo una masa de energía"

"Ugh, OK, eso suena horrible" - dijo Kankuro mientras fruncía el ceño - "Lamento escuchar que tus hermanos tengan que pasar por algo como eso"

"No te preocupes, al menos en esas condiciones no sufren" - murmuró Shukaku mientras suspiraba con pesar - "Como sea, es mejor que te concentres en lo que tienes al frente"

". . ." - Gaara miró al Tanuki de Arena, solo para asentir - "Shukaku tienen razón, lo que tenemos que hacer es decidir como proseguir"

"Yo digo que enviemos a nuestros 10 mejores shinobis como 'guardaespaldas'" - respondió Kankuro con seriedad mientras miraba a su hermano menor - "Tenemos que demostrar que Suna no es menos que las demás aldeas"

"Supongo que tendremos que pedirle más cupos al clan Uzumaki para entrar a la [Habitación del Tiempo]" - dijo Gaara mientras negaba con la cabeza - "Ok, voy a contactar con Kurama"

"Estoy seguro de que no eres el único que pensó en pedir cupos para usar esa habitación" - dijo Shukaku mientras le giraba los ojos a los hermanos - "Por cierto, deberían de comprar más dulces porque ya no quedan"

"¿No compré esta mañana?" - preguntó Kankuro mientras fruncía el ceño.

"Sí, pero se acabaron" - respondió Shukaku mientras se encogía de hombros.

* * * * *

"Juro por dios que esas reuniones serán mi fin..." - dijo Ao mientras suspiraba con pesar. Él en estos momentos estaba solo en su oficina, mirando por la ventana como el cielo nuevamente estaba completamente nublado - "Tal vez debería de entregarle el puesto de Mizukage a Chojuro y por fin terminar con mi sufrimiento"

"Sería una buena idea, una lástima que el mocoso no está listo" - dijo la anciana mujer mientras entraba a la oficina.

"Te he dicho miles de veces que tienes que entrar luego de que te dé permiso, vieja bruja" - dijo Ao con irritación - "Ahora dime que es lo que quieres antes de que les diga a mis Anbu que te arrojen por la ventana"

"Eres un viejo gruñón, Ao" - dijo Kyoko mientras fruncía el ceño - "Solo vine a decirte que llegó una carta de Tetsu no Kuni"

"Por favor, dime que no son más problemas" - dijo Ao mientras suspiraba con pesar - "Tengo suficiente trabajo en estos momentos como para que ese viejo cascarrabias de Mifune venga a darme más problemas"

"Respondiendo a tu pregunta, Mifune-dono mandó un mensaje diciendo que una reunión de los 5 Kage ha sido programada para dos meses en el futuro" - respondió Kyoko con seriedad mientras notaba el cambio en la expresión del viejo shinobi de Kiri - ""Según el documento, esto se debe a que Tetsu no Kuni ha recibido información sobre la amenaza que es Akatsuki para las Naciones Elementales luego del ataque a Kumo"

"Sigo diciendo que fue una mala idea la de hacer a ese imbécil el anfitrión y regulador de las reuniones diplomáticas" - murmuró Ao mientras gruñía en irritación - "Supongo que no tengo elección"

"¿Qué piensas hacer?" - preguntó Kyoko mientras miraba a su viejo conocido.

"Primero, entrenar a un nuevo grupo de shinobis para demostrar que Kiri dejó de ser esa aldea que necesitaba la piedad de las demás aldeas para continuar sobreviviendo" - dijo Ao mientras apretaba sus puños con firmeza - "Segundo... planeo llevar a ese chico"

"¿Seguro?" - preguntó Kyoko con el ceño fruncido - "Normalmente no aceptaría la idea de mostrar su presencia ante otros miembros de Kiri, pero viendo que ahora la reputación de Yagura-sama ha vuelto a la normalidad con la revelación de la verdad, es posible que pueda relacionarse con los demás miembros de los Siete Espadachines de la Niebla"

"Anbu, quiero que vayan a la habitación número 24 del edificio C del distrito 9" - dijo Ao mientras dos sombras salían por la ventana.

* * *

"¿Me mandó a llamar, Ao-sama?" - preguntó un joven que no parecía mayor de 18 años. Él tenía el cabello color rubio arena, unos enormes ojos rosados sin pupila, y una marca rosada que parecía ser un número dos sobre su mejilla.

"Así es" - dijo Ao mientras miraba al joven - "Por cierto, ¿Estás seguro de esto?"

"Sí, mi decisión es definitiva" - dijo el joven mientras asentía con firmeza - "Voy a tomar su nombre para poder traer honor a mi clan"

"Estoy seguro de que tu padre no querría eso" - suspiró Ao al ver la actitud tan seria del chico - "Yagura-sama no querría ver como te vuelves su sombra, hijo"

"Lo sé, pero no importa cuanto se niegue, voy a seguir adelante con mi deseo de cambiar mi nombre al de mi padre" - dijo el joven con seriedad - "Espero que acepte mi decisión, Ao-sama"

"Si eso es lo que desea, no voy a detenerte" - dijo Ao mientras negaba con la cabeza - "Espero que te acostumbres a trabajar con tus nuevos compañeros... Yagura-dono..."

"¡Hai!" - exclamó Yagura mientras asentía con firmeza.