Tres por ciento

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Fang Rui se sentó en la cabina de juego, aguardando tranquilamente a su siguiente oponente.

¡Yo gané!

Y contra Zhou Zekai. Terminó con la racha ganadora de Zhou Zekai. Era demasiado, Fang Rui ya había hecho algo de lo que enorgullecerse.

Pero Fang Rui no estaba satisfecho.

¿Zhou Zekai? ¿Y qué? ¿El que lo haya vencido quiere decir que ganaron las finales? No. No solo no les garantizaba el trofeo de campeonato, ni siquiera les garantizaba la arena grupal.

Para Fang Rui, Zhou Zekai era solo el segundo jugador de la arena grupal. Sí, era formidable y difícil de vencer, pero más importante aún, después de él estaba el tercer jugador de Samsara. Si lo derrotaba, solo sería otro pequeño paso hacia la victoria. ¡Habían incluso otros obstáculos que tenía que superar!

¿De que iba a alegrarse? ¡El seguía lejos de estar feliz u orgulloso!

¡Siguiente!