2 CHAPTER 2

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DAY Z

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Narra Protagonista.

—¿Qué crees que está sucediendo?— Fue la pregunta que hizo Claire, y voltee a mirarla por un breve momento.

Habíamos entrado a la ciudad hace relativamente poco, y pudimos ver movimiento militar en el área. Pero la ciudad era enorme y con una gran población, quizá era por ello que necesitaban también a todos los policías disponibles para controlar la situación.

Recordaba que en Fear The Walking Dead todo se volvió loco de golpe, y los idiotas que solo quieren anarquía empezaron a destruir todo. Según recordaba, Atlanta sería declarada una ciudad segura pero eso no iba a durar tanto tiempo cómo debería.

Y sinceramente... no quería estar aquí cuando los militares tiren Nepal desde los helicópteros.

—No lo se. ¿Algún virus?— Dije, realmente sonaba como un posible hipótesis a otra cosa. No quería sonar cómo si supiera lo que esta pasando, ya que eso llevaría a muchas preguntas que no quería responder.

—¿Qué virus haría que un hombre le arrancase un trozó de carne a otro?— Murmuró Claire, se notaba que estaba ya algo horrorizada por lo que había visto en la tienda de la estación de servicio.

Y no podía culparla sí lo que sucedió se parecía a lo que yo había visto en su momento.

—La comisaría no está lejos. Sabrán qué pasa— Comenté, y le di una mirada de apoyo.

En este tipo de situaciones debíamos confiar el uno en el otro, a pesar de que nos conocimos en una situación critica. También deberíamos estar centrados para evitar la muerte que ahora mismo podía estar en cada callejón de la ciudad.

—¿Y sí... esas cosas ya llegaron a la ciudad?— Preguntó Claire preocupada.

—Entonces, debemos llegar rápido para advertirlos y esperar que alguno sepa controlar esta situación— Respondí con firmeza.

Dudaba que alguno este realmente calificado para tener un control de situación, ya que la Ciudad caería en desgracia después de algunos cuantos días pero no había manera que le diga eso, sin duda la pondría más histérica y quería evitarlo.

Mientras avanzamos por las calles de la ciudad, pude distinguir como, a pesar de la concurrida calle, no estaba tan al borde como casi siempre. Podía ver cómo faltaba una cantidad de personas y vehículos en las calles, eso podía ser un problema ya que recordaba en Fear The Walking Dead muchos no iban por estar 'enfermos' o por que el virus los había contagiado.

Quizá eso estaba pasando, y por estar centrado en otro lado y mi supervivencia futura no me di cuenta de la situación.

Y lo pude notar una vez que Claire puso la radio y pudimos escuchar referente a una 'gripe' que estaba atacando la ciudad pero esta siendo controlada.

{Cómo les recordábamos a unos oyentes: Si, tienes alguno de los signos de enfermedad que hemos dicho. Ir a los principales centros de salud donde se los tratará adecuadamente. Ayudemos a colaborar todos juntos y no contagiar al que esta a nuestro lado.}

Las cosas se estaban complicando, la primera vez que decidí relajarme un poco para estar con mi familia y parece que todo a mi alrededor se fue al diablo mucho más rápido de lo que estimaba. 

Finalmente cuando llegamos a la comisaria principal de la ciudad, pude notar la actividad de los militares alrededor de ello y había varios compañeros policías ayudándolos a armar varias tiendas de campaña.

Me detuvieron en una especie de control, y baje la ventana para hablar con el soldado.

—¿Nombre?—

—Leon Kennedy— Dije, mostrando tanto mi placa como identificación.

—¿Tú acompañante?—

—Claire Redfield, vine a ver a mi hermano— Respondió Claire en mi lugar.

—No se permiten civiles en el haría—

—Ella está conmigo— Contesté con algo de severidad. —Sí hay algún problema, lo hablaré con mi jefe—

El soldado me miró unos segundos pero finalmente asintió, y nos dejo pasar. Quizá me metería en problemas pero poco me importaba por el momento, sabía que llegaría el momento en que los militares no serían nada más que peso muerto... no entendía por que siempre querían arreglar todo con explosiones pero no iba a quedarme aquí para averiguarlo.

Poco después de estacionar el Jeep, nos encaminamos a la puerta principal de la comisaria y al entrar pude notar como había muchos policías así cómo miembros del escuadrón del ejercito que parecía estar en la ciudad.

Podía sentir a Claire seguirme, mientras me posicionaba al lado de una mujer de cabello castaño corto, tez blanca y ojos azules suaves.

—Hey, Jill— Saludé suavemente.

—Finalmente estás aquí, Leon— Dijo Jill Valentine con una pequeña sonrisa. —¿Y ella quien es? ¿Tu novia?—

—N-No, n-nos conocimos hoy— Dijo Claire avergonzada.

—Ella es Claire Redfield, la hermana de Chris—

Pude notar como los ojos de Jill se abrieron un leve momento, y miraron a Claire con sorpresa. —¿Así que tu eres la hermana de Chris?—

—Sí, así es. ¿Él no hablo de mi?— Preguntó Claire con curiosidad.

Jill se tomó unos segundos para responder, y contestó suavemente. —Él... es muy cerrado en cuanto a su familia. Pocas veces te ha nombrado pero tenía tu foto en su escritorio—

Claire se tomó un momento, y dejo la tristeza que había aparecido en su rostro de lado y preguntó. —¿Puede decirle donde está él? Lo he estado llamando y no contesta su teléfono...—

—Intentaré responder tus preguntas luego de la reunión, ¿vale?— Jill le dijo con tranquilidad, notando como la chica estaba realmente preocupada por su hermano.

—Esta bien...— Respondió Claire, luego de unos segundos.

Se le notaba que quería saber más, y estaba profundamente preocupada por la seguridad de su hermano. Ya que no sabía si estaba o no vivo en este momento, y por ahora no le podían responder eso.

—Jill, ¿Qué está pasando?. Claire y yo nos encontramos con una situación en la estación de servicio de Bob— Comenté con seriedad, mientras me apoyaba en una columna cercana.

—¿Bob está muerto?— Dijo Jill sorprendida, ella también conocía al dependiente de esa estación de servicio.

—Suponiendo que tenía la misma piel pálida y podrida que el resto que estaba en el lugar... entonces, si—

—*Sigh* Realmente no se que esta pasando, han estado sucediendo cosas raras durante toda esta semana y de repente la mitad de la ciudad se comienza a enfermar, los alumnos faltan a sus clases y los trabajadores no van al trabajo— Comenté Jill con suavidad. —Pero sea lo que sea es grande... y ahora más con estos soldados dando vueltas por la ciudad 'controlando' la situación—

Antes de que pudiera continuar hablando, el comisionado Brian Irons dio un paso al frente con un militar condecorado a su lado. Y otros dos soldados traen un proyector hacía el medio de las filas de sillas donde había soldados y policías por igual, todos esperando ser informados.

—Bueno... aquí vamos a descubrirlo— Murmuré, y nos acercamos un poco más para escuchar lo que el jefe tenía que decir.

—Cómo muchos ya habrán visto, la situación en la ciudad es complicada así cómo la de los Ángeles— Dijo Irons, y hizo una señal para que el proyector fuera encendido, en el observe el video del bombero de los Ángeles siendo mordido por un caminante que se encontraba en una camilla en el suelo. —El Capitán Bobby Nash de la 118 de los Ángeles, se acercó a inspeccionar a la victima al notar que esta se estaba moviendo pero no espero el ataque, le mordió un pedazo de su cuello y el 'Sujeto' se levantó para ir a atacar a otros bomberos y policías cercanos. Los disparos en el cuerpo no hicieron nada para detenerlo, solo un fuerte disparo en la cabeza logro que no volviera a levantarse. Lo peor no fue eso, sino que el Capitán Nash se levantó en las mismas condiciones del 'Sujeto' y tuvieron que... dispararle—

Hubo un momento de silencio por parte de los presentes cuando se dio esa noticia, Bobby Nash en mi vida pasada no era nada más que un personaje ficticio y un bombero que, a pesar de sus problemas, era uno de los mejores y más confiables. Aquí fue una persona como cualquier otra, y no supe de su existencia hasta este momento, puso un poco de tristeza en mi y no quería imaginar como era con el resto de los miembros de la 118.

El Comisionado Irons volvió a hablar poco después. —Estamos en alerta roja, no sabemos que es este Virus—

—¿Se está buscando alguna cura?— Una compañera pregunto preocupada.

—Soy el Sargento Nicolas Zatch. Nuestros científicos estaban haciendo lo mejor que pueden con lo que tienen y aseguran prontos resultados. Lo importante es nuestro deber aquí y ahora, y ese es controlar la situación y primordialmente convertir a Atlanta en un punto seguro para los residentes y posibles refugiados— Exclamó el Sargento con autoridad. 

—¿Qué pasará con nuestras familias? Hay algunos de nosotros que tenemos familia fuera de la ciudad— Dijo un miembro de la policía.

—Cómo dije, la prioridad ahora mismo es construir un punto seguro para los trabajadores esenciales. Doctores, Enfermeros, Bomberos y Policías. Una vez que tengamos tiendas de campaña y un perímetro asegurado, una vez hecho eso, se les proporcionara a las familias hogares para acomodarse— Respondió el Sargento. —Luego se hará un anunció para todas las personas cercanas por la radio, televisión e internet. Ya hay varios avistamientos fuera de la ciudad y tenemos que trabajar rápido para crear un salvoconducto para los futuros refugiados— El Sargento se cruzó los brazos y agregó. —Todos deben ponerse su equipo y esperar instrucciones que se darán dentro de poco en diferentes estaciones—

Me quede allí unos segundos, y finalmente suspiré y miré a las dos mujeres a mi lado.

—Iré a cambiarme— Le dije a Claire. —¿Estarás bien?—

—Sí, hablaré con Jill y luego veré que hacer— Comentó Claire, se le notaba preocupada aun por la falta de información de su hermano mayor.

—De acuerdo, no te vayas sin avisar— Contesté, y miré a Jill. —Cuidala—

—Por supuesto que si— Dijo Jill con una sonrisa.

Y sin más, las deje ahí para ir a cambiarme.

Era momento de accionar, sabía cómo iban a terminar las cosas pero intentaré evitar que la ciudad cayera tanto como pudiera. Aun así, hay que ver la eficiencia de los militares en todo este asunto... por lo que se, pueden ser unos hijos de puta.

En el momento que viera las cosas saliéndose de control, tomaría lo necesario y me iría de aquí. Pero también necesitaba encontrar algún refugio provisional por si deciden seguir con la opción del Nepal, algo como un sótano sería una buena opción, quizá un edificio con aparcamiento interior.

No sabía si me iba a encontrar con el grupo de Rick o cualquier otro grupo, como el de Lee.

Pero no iba a estar al pendiente de otros, iba a crear un grupo propio que pudiera sobrevivir a la amenaza más peligrosa del nuevo mundo... las mismas personas.

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